Más allá de la puerta

Capítulo 13

-¿Entonces simplemente dijo"John"?- pregunta Nathe confundido.

Estamos en el recreo y decidí contarle el suceso de ayer con Travis.

-Si, no se por qué, pero siento que es una pista.
-Hagamos algo, deja de pensar en el tema hasta el viernes, distráete un poco y el viernes nos reunimos para investigar más ¿si?- propone.
-¿Te parece mejor el sábado en mi casa? Así mis papás no están y mamá no me hace preguntas de si estamos juntos- explico.
-¿Piensa que estamos juntos?
-Si, no deja de hablar sobre ti- digo y él sonríe.
-Eso es tierno.
-No lo es.
-Si lo es.
-¿Entonces el sábado?- cambio de tema.
-Perfecto.
-Bien.
-Oye ¿no has pensado en ir a una fiesta?
-¿Por qué lo preguntas?
-El viernes hay una fiesta en casa de uno de los del equipo de natación y pensé que tal vez deberías ir conmigo- dice y volteo la mirada al piso.
-No lo sé Nathe, no me gustan las fiestas.
-Anda, será divertido.
-No lo creo.
-Aunquesea piénsalo- me mira suplicante.
-Bien- celebra- no celebres, eso no es un si.
-Pero es un tal vez- dice y niego con la cabeza divertida- a mi tampoco me gustan mucho las fiestas, pero de vez en cuando hace falta relajarse y desconectarse.
-Bueno, tengo clase, nos vemos- me despido y me voy por lo pasillos rumbo al salón que me corresponde.

...

Ya es viernes por la tarde y Nathe no para de llamarme para que vaya a fiesta, pero la verdad no tengo ganas de ir, prefiero quedarme en casa viendo alguna serie.

Escucho mi teléfono y me levanto para atender, al ver el nombre de Nathe en la pantalla bufo y contesto.

-Megan, vístete- insiste.
-No iré Nathe.
-Tienes que salir, no puedes quedarte en casa siempre.
-Pues saldré a comer helado pero no a una fiesta.
-Si no accedes tendré que recurrir a mi segunda opción- dice y quedo confundida.
-¿De qué hablas?- antes de que él pueda contestar mi madre entra a mi habitación.

-¿Cómo es posible que haya una fiesta y no quieras ir?- grita mi madre y tomo aire, no puede ser.

-¿Cómo conseguiste el número de mi madre?- pregunto confundida a Nathe.
-Tengo contactos- dice divertido.
-Te odio.
-Te recojo a las 6, adiós- cuelga antes de que pueda insultarlo.

Bloqueo mi teléfono, lo dejo en una mesita y volteo a ver a mi madre que está parada en el borde de mi puerta observándome.

-Irás a la fiesta y no discutiremos- ordena.
-Mamá no quiero ir.
-Vístete, tienes 1 hora hasta que llegue Nathe- dice y sale de mi habitación cerrando la puerta luego.

Me dejo caer en la cama y bufo viendo al techo, no quiero ir a esa maldita fiesta...

Sin nada de ganas me levanto y abro mi closet para buscar algo que ponerme, ¿qué se supone que me ponga?

Luego de tanto buscar me decido por una falda acampanada negra de cuero, una camisa con un pequeño escote negra y unos tenis blancos, ni loca me pondré tacones. Suelto mi cabello y lo peino un poco, me maquillo muy ligeramente y tomo un pequeño bolso para meter mi teléfono.

Me miro al espejo indecisa y en eso mi mamá entra, se queda viéndome y sonríe.

-Te ves hermosa.
-¿Segura?
-No tengo dudas- dice- Nathe esta abajo.
-Ya voy.

Salgo de mi habitación, me despido de mi mamá y con los nervios consumiéndome bajo las escaleras.

¿Por qué estoy tan nerviosa? Creo que nunca había estado así.

Al ver el carro de Nathe me acerco y al entrar noto como él se queda observándome en silencio.

-¿Está mal?- pregunto nerviosa refiriéndome a mi ropa.
-Estás perfecta- sonríe y le devuelvo la sonrisa.

Nathe maneja hasta la casa de su amigo en silencio y al llegar veo una casa hermosa blanca con muchos ventanales y balcones. Hay música muy alta, mucha gente y me siento súper fuera de lugar.

Nathe aparca y ambos bajamos del auto, cada vez que nos acercamos más a la entrada de la casa siento como mis nervios aumentan.

-Tranquila, será genial- me tranquiliza y yo me limito a asentir.

Ambos entramos y siento como la música entra bruscamente a mis oídos. Un chico se acerca a nosotros y saluda felizmente a Nathe.

-¡Nathe! Me alegra que vinieras hermano- dice hablando alto para que lo podamos escuchar- ¿Ella quién es?- pregunta volteando hacia mi y los nervios atacan de nuevo.
-Megan, es mi amiga- me presenta.
-Es un gusto Megan, mi nombre es Troy- deja un beso en mi mejilla.

Debo admitir que Troy es guapo, además se ve un chico bastante alegre y buena vibra.

-Igualmente-
-Bueno, nosotros vamos por un trago, nos vemos- dice Nathe y toma mi mano para guiarme hasta el bar.

Nathe pide dos tragos y nos sentamos en la barra a beberlos.

-¿Te atrae alguien de la fiesta?- me pregunta y volteo a verlo.
-No, ¿por qué?
-Vamos Meg, debe haber alguien.
-Nop.
-¿Que te parezca lindo?
-Bueno, hay alguien que me parece lindo pero eso no significa que vaya a hacer nada con ese alguien, solo me parece lindo a primera vista.
-¿Quién?
-No te diré, harás un escándalo.
-Dime- insiste.
-Troy- digo y él me mira impactado.
-¿Enserio?
-¿Por qué te sorprende tanto?
-No se, no pensé que fuera tu tipo...
-¿Y cuál es mi tipo?- pregunto divertida.
-No sé... ven, tienes que hablar con él.
-No, me da pena- me resisto.
-Meg debes tomar más riesgos. Hagamos algo, yo te dejo con él y si simplemente sientes que no quieres estár más con él me mandas un mensaje que diga donde estás y yo voy para allá rápidamente, ¿bien?- lo pienso.
-Bien- acepto sin muchos ánimos.

Debo admitir que tengo miedo de lo que pueda pasar ya que JAMÁS he si quiera besado a alguien... si, estúpido, pero no salgo casi de casa y como dije me cuesta hacer nuevos amigos si estoy sola, por lo que es lógico que aún no haya dado mi primer beso.

Ya veremos como sale todo...