Close My Eyes [Terminada]

Epílogo

"Prométeme que te cuidarás, que disfrutarás cada momento a partir de ahora, que tratarás de sonreír a menudo e intentarás ser el mejor hombre que puedas. Por favor, necesito que me lo jures."

Carta 7: Fragmento dedicado a mí mismo.

Abro mis ojos. Han pasado más de cinco años desde el fin de la guerra y aún no puedo creer que puedo hacerlo. Observo la habitación en la que me encuentro. Es diferente a la primera vez que la vi, y ahora me parece tan familiar.

Hay una pila de libros sobre cada mesa de noche, cada una situada en los extremos de la cama. Las blancas paredes están cubiertas de fotografías, excepto por el espacio que ocupa un amplio ropero de madera de roble. Un reloj en la pared frente a mí, silenciosamente gira sus manecillas, marcando las tres de la mañana. La luz de la luna se filtra a través de las cortinas. Afuera se escuchan los grillos. El mundo sigue girando, de la misma forma que lo ha hecho siempre. Jamás había tenido el tiempo de ponerme a analizar cosas tan triviales.

Siento que no debería estar vivo, que no lo merezco ¿Cuántas personas inocentes ya no están y soy yo el que sobrevivió? ¿Por qué puedo disfrutar de estas pequeñas cosas en las que nunca me había fijado? ¿Por qué me dieron otra oportunidad?

Volteo mi cabeza hacia la derecha. Ella está a mi lado, tan perfecta como siempre. Escucho un quejido y siento que el peso de la cama cambia. Luego de unos segundos, se sienta y me mira con sus cálidos ojos color avellana.

—Estás despierto, ¿Pasa algo malo? —dice con ese tono de preocupación que la he escuchado tantas veces utilizar conmigo.

—No, solo pensaba en lo afortunado que soy por vivir otro día.

Me dedica la sonrisa más hermosa, brillante y genuina que haya existido.

—Tengo algo que decirte Severus. No sé cómo lo vayas a tomar, pero pienso que es mejor que lo sepas... —Sus ojos se pusieron cristalinos, no pudo seguir hablando, debía tener un nudo en la garganta.

—¿Qué sucede? —Miles de pensamientos pasaron por mi mente ¿Algo le pasó en el trabajo? ¿Y si ella estaba enferma?

Toma mi mano izquierda nerviosamente y con lentitud la dirige hacia su vientre. Nuestras miradas se encuentran y las respiraciones se cortan. Mis ojos comienzan a humedecerse ¿Estaría ella diciendo lo que creo?

—Estoy embarazada Sev. —dijo mordiéndose el labio inferior.

Me abalancé sobre ella y la envolví en un cálido abrazo. Comencé a cubrir con besos toda su cara. No hacían falta palabras ¿Cómo podría haber pensado que lo tomaría mal o me enojaría con ella?

—Son las palabras más hermosas que he escuchado en toda mi vida, y lo que me parece más impactante es que están dedicadas a mí. —Volví a besarla, esta vez en los labios—. Los amo, prometo cuidarlos y estar para ustedes cada vez que me necesiten. Siempre.

Puedo decir que soy totalmente feliz, pero es demasiado bueno para ser real. A veces pienso que estoy en el cielo, pero no pertenezco a ese lugar; otras veces, que solo es un sueño, uno maravilloso y lleno de esperanza, pero que algún día voy a despertar. Si es así solo me consolará saber que puedo volver a cerrar mis ojos y comenzar otra vez.

"Ese hombre a quien amo y del que niego su existencia; porque a pesar de que en este mundo tenga un nombre y una cara, un corazón, una mente y un alma; no lo conozco, o no lo hago como realmente es, lo idealizo, lo perfecciono y lo adapto a mis deseos. Ese hombre solo vive en mis sueños; está ahí, esperando a que lo invoque, a que lo busque con mi voz y le prometa la felicidad eterna. Ese es un placer que solo me puedo dar... al cerrar mis ojos."

Vickysmart.