Error

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Dedicado a @ZCReka

Capítulo 11: "Error"

Lucian regresaba a su cuarto por el largo pasillo de antorchas, todo el día había leído, visto y resuelto asuntos de la manada. Era muy cansado ser alfa. Había tenido que estar casi todo el día en su forma humana, ya que no se podía escribir con garras.

Solo quería bañarse y dormir en su cama, sin importar si su esposo estaba de humor o no para su presencia.

Abrió las puertas. Por un momento pensó haberse equivocado de castillo, pero no, era su castillo, su casa, su trono.

Vio alrededor, todo estaba muy limpio, y las ventanas abiertas dejaban entrar la brisa nocturna marina. Hace mucho que no veía todo tan limpio.

De repente, un olor le llegó a la nariz. No podía ser. Todo se detuvo, no pensó y salió corriendo al cuarto. Entró y buscó desesperadamente con la mirada, pero solo encontró el ropero abierto. Entonces entendió, y una ola de furia invadió su cuerpo.

Oyó ruidos en el baño, entró con el cuerpo humano temblando de furia y la ira creció cuando vio a ese mocoso vistiendo esa ropa y en sus manos ese relicario, a partir de allí su mente fue solo un torrente de emociones revueltas.

—¿¡QUÉ CARAJO HACES!? —El susto fue tal, que Claude soltó el relicario, el cual cayó al suelo.



Una vez limpio, Claude no había podido evitar la tentación de probarse uno de los vestidos. Eran muy bonitos. Escogió el negro de seda con pedrería, aunque del busto le quedó grande, se le ajustaba muy bien en la cintura y la cadera.

Dio vueltas en el baño imaginándose en un baile, vio su reflejo en el espejo, agarró el relicario entre sus manos.

Una vez que lo hubo limpiado, había quedado brillante.

—¿¡QUE CARAJO HACES!? —La gruesa y furiosa voz de Lucian explotó en el cuarto.

Con temor, Claude volteó, encontrándose con la furiosa mirada del hombre, en su vida había visto a alguien tan molesto. En un parpadeo, Lucian lo tenía agarrado fuertemente de las muñecas.

—¿Qué mierda haces con ese vestido? —susurró, destilando veneno en cada palabra.

—Yo lo en-encontré en el ropero —dijo con dificultad, no sentía ya las manos por la fuerza que ejercía el otro sobre las muñecas.

—¿Tocaste algo más? —preguntó muy bajo, Claude sentía el terror inundar su cuerpo, la furia de Lucian era palpable en el ambiente—. ¿¡Tocaste algo más!?-

—La cade-dena.-

Lucian sintió algo nublarse en su mente. La furia, enojo y tristeza controlaban su cuerpo. Arrojó el pequeño cuerpo contra las baldosas del suelo, haciendo que se golpeara la cabeza.

Claude sintió un terrible golpe en la cabeza, su vista se tornó borrosa.

—¡Quítatelo en este puto instante! —Con dificultad, Claude se paró, y con la cabeza gacha y lágrimas de miedo cayendo de sus mejillas, se quitó el vestido, dejando que cayera al suelo. Quedó desnudo frente al hombre que apretaba los puños hasta dejarlos blancos.

Una fuerte cachetada lo mandó al suelo, temblores y sollozos recorrían el frágil cuerpo desnudo.

—Jamás, —escupió el hombre—, ¡jamás vuelvas a tocar sus cosas! —El menor solo atinó a asentir, no sabiendo a lo que se refería—, ¿¡entendido!? —gritó, tomándole de la barbilla.

Aullando bajo la misma lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora