Damian - 2 La Princesa De La Mafia (COMPLETA)

XIV

CAPITULO XIV

Me desperté en mi habitación, a mi lado se encontraba Gabriel dormido, pobre mi niño, debe de estar muy cansado, un movimiento a los pies de la cama me hizo voltear a ver en esta se encontraba Damián viéndome fijamente.

- Exijo que me expliques por que el niño sabe eso de la tita y por qué tenías una bolsa de sangre guardada- dijo el muy serio.

- Pues veras, cuando el tenía 5 años, tu padre me encontró, yo trate de huir del muchas veces pero la mayoría yo salía muy herida, un día él se dio cuenta y decidí enseñarle que hacer en caso de que yo llegara real mente mal y no pudiera curarme, desde esa edad aprendió a como se limpian las heridas además de que se aprendió el número de emergencia y como llamar, nuestra vida no ha sido fácil Damián, el que dijeras que eres el padre de mi hijo no te da ningún derecho de que me exijas cosas, no te equivoques conmigo, yo nunca he necesitado de ustedes y nunca lo voy a ser el día que me canse de este juego estúpido me voy sin mirar atrás y tú te quedas con todo. Si piensas que aparecí en este momento para quedarme con las cosas que dejo Dylan estas muy equivocado, yo de ese hombre no necesito absolutamente nada, perdón si al principio fui un poco confianzuda contigo, créeme que eso no va a volver a pasar así que no te preocupes, te pido por favor me dejes descansar en paz y después hablamos del resto- sin decir más me di la vuelta y abracé a Gabriel y volví a quedar dormida.

Cuando desperté Gabriel ya no se encontraba a mi lado, mire la hora y son las 7:30 en este momento deben de estar comiendo, la verdad no tengo muchos ánimos de pararme, pero el hambre me gana así que sin pensarlo mucho me paro, y me pongo el pijama que consiste en un short pequeño y una blusa de tirantes, al estar lista comienzo a descender por las escaleras y escucho que se encuentran en el comedor hablando de lo sucedido hoy.

- Buenas noches – dije entrando y tomando lugar al lado de Gabriel, puedo ver que en la mesa se encuentran todos ya con sus platos de comida cada uno. – me podrías traer la comida por favor- dije a una de las muchachas del aseo.

- Claro señorita- dijo y se retiró.

- Hola mami como esta- dijo mi pequeño

- Hola mi amor, ya estoy mejor gracias a que dormí contigo- dije y le di un beso en su mejilla.

- Vez papi yo te dije que ella siempre se ponía mejor cuando dormía a mi lado y tú no me querías dejar- dijo el pequeño mirando a Damián

- Campeón pensé que la podrías lastimar – dijo el

- No, siempre que ella esta así yo me acuesto con ella y la consiento verdad mami- dijo

- Verdad amor, no te preocupes yo estoy muy bien- dije lo último mirando a Damián.

- Isa yo te quería agradecer por todo lo de hoy la verdad si no hubiera sido por ti en este momento me encontraría muy mal, la verdad aun no entiendo por qué nos atacaron, si tengo entendido que ustedes ya no están en ese mundo- dijo Sofía, lo último me sorprendió así que mire a Damián el cual me estaba mirando fijamente y tenía las manos echas puño.

- O tranquila no dejaría que te pasara nada además eres mi amiga- dije volví a mirar a Damián y seguí hablando – y con respecto al ataque, yo pienso que aún no creen que hayan dejado ese mundo – al terminar de decir eso pude ver como Damián dejaba de estar tan tenso.

- Mami que mundo, luego papi es un sayayin y viene del planeta ...- pregunto el pequeño causando en toda una sonrisa.

- No amor es una forma de decir que dejo una etapa de su vida atrás- dije yo

- Aaa bueno, mami puedo irme a mi habitación- dijo el pequeño mirando su plato en el cual ya no quedaba casi nada.

- Ve amor, ahorita voy a darte las buenas noches- dije, el salió casi corriendo del comedor.

- Isa vas a ir mañana a la Universidad- hablo por primera vez en toda la noche Daniel.

- Si, esto no es nada me han pasado cosas peores- dije yo.

- Isa y no hay manera de que a la que buscaran fuera a ti – dijo Sofía

- No sofí, el único que sabía mi verdadera identidad era Dylan y como ya no está pues no creo que afecté mucho- dije yo terminando de comer – bueno si me permiten voy a ir a acostar a Gabriel con permiso- dije yo y todos nos paramos de la mesa.

- Claro ve, creo que todos estamos muy agotados por todo lo sucedido así que yo también me voy a acostar con permiso- dijo Sofía saliendo del comedor, pero en ella había algo raro pues esta vez no se despidió de Damián si no que se quedó mirando fijamente a Daniel.

- Con permiso yo también me retiro- dijo Daniel y salió detrás de Sofía ellos esconden algo y creo saber que es, pero espero equivocarme porque si no es así en esta casa se va a armar una gran guerra.

Sin decir nada más le dedique una mirada a Damián el cual se encontraba con el ceño fruncido y salí también del comedor, al llegar a la habitación de Gabriel me pude dar cuenta de que él ya tenía el pijama puesta y estaba acostado en la cama esperando a que llegara para arroparlo.

- Hola mi vida, ya estás listo- dije yo mientras entraba a la habitación y me sentaba en el bordé de la cama.

- Si mami, oye me podrías contar una historia- dijo él.

- Claro, cual quieres que te cuente- dije yo mientras tomaba las cobijas y lo arropaba en forma de taquito.

- La de los 3 cerditos- dijo.

- Muy bien erase una vez...- cuando termine de contrale el cuento pude ver que ya estaba dormido así que le di un beso en la frente y me puse de pie, antes de salir de la habitación encendí la lucecita que tienen de noche y cerré la puerta.

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hola chicas aquí otro capitulo y perdón por la demora espero les guste