Cartas para Katsuki

Nuevo Ingreso

El examen para U.A ya había sido aplicado y entrando por recomendación Todoroki Shoto y Kimura Sayuri quedaron en la clase 1-A del curso de héroes, faltaba apenas una semana para entrar a clases y los padres de los mencionados dejaron la semana libre para que estos pudieran hacer lo que quisieran, comprar lo necesario y por supuesto prepararse para entrar a la preparatoria juntos.

La pelirroja recién se levantaba con uno de sus mejores ánimos, pues a pesar de estar nerviosa no podía ocultar su emoción por entrar la mejor escuela de héroes. Desayuno con sus padres, se cambio de ropa, lavo sus dientes y se dispuso a salir, no sin antes avisarles a sus papás que daría la vuelta, tomo su celular y sus audífonos para después cerrar la puerta; coloco su playlist en aleatorio y comenzó su caminata bailando al ritmo de la música evitando chocar con alguien que se le atravesará.

A lo lejos un chico con ojos color carmesí y cabellera rubia ceniza observaba a la ojimiel bailar a lo lejos, sentía un sonrojo en sus mejillas, al parecer la chica estaba tan concentrada en su baile que ni siquiera noto la presencia del rubio, quien la seguía para asegurarse de que esta no cayera o tropezara. Más de un año y medio tenían sin poder salir como cuando eran chicos, porque si bien se veían en las salidas de la secundaria no les daba tiempo suficiente de hablar, ya que muchas veces solo alcanzaban a despedirse del otro pues la ojimiel iba a sus entrenamientos después de clases.

Al asegurarse de que esta no caería Katsuki apresuró su paso y dejó atrás a una pelirroja que aún no lo veía, aunque sin saberlo iban a la misma cafetería. La chica paró su música por un momento y fue a conseguir una mesa mientras le llevaban la carta.

-¿Lo de siempre señorita Kimura?- Decía el camarero amablemente, pues ella suele ir con sus padres seguido a ese lugar.

-¡Si, por favor! y un rol de canela con azúcar por favor- exclamó de manera amable.

-Enseguida está.- Dijo retirando la carta y caminando hacía la cocina, volvió a poner su música en aleatorio y empezó a observar el local, cada pared, planta, mesa, silla, decoración y demás, mientras miraba cada detalle del establecimiento diviso una cabellera rubia a 2 o 3 mesas más en frente de ella, decidió llamar la atención del rubio lanzando un pedazo de servilleta que decía "Voltea".

El chico extrañado por lo que le lanzaron giro su cabeza y cuerpo para buscar a la responsable de esta nota, encontrando a su amiga de infantes sentada a unas mesas de él. Con su ceño fruncido caminó hacía ojimiel.

-¿Qué haces aquí mierda de madera?- decía con un tono de enojo y burla.

-Me alegro de verte igual, cohete andante- dijo burlándose del rubio- Vine a tomar un café, ¿Quieres tomar asiento o te quedarás ahí parado como imbécil?

-Jódete maldita naranja- tomó asiento frente a la pelirroja y comenzaron a hablar del incidente de hace unos 10 meses, en el cual Bakugou había sido atacado por un monstruo de lodo, el mencionado estaba con el ceño fruncido.

-Pensé que como héroe número uno no tendrías que necesitar de Izuku para ayudarte.- como se estaba burlando de una manera inocente para ella el rubio enojado le contesto.

-¡Cállate maldita mierda naranja!, yo podía solo. El idiota de Deku intentaba hacerse el héroe tratando de sacarme de ahí ¡pero se veía ridículo!

-Awwww, te preocupa Izuku.

-¡Claro que no jodida elemental!- decía sacando humo de sus manos.

-Ya cálmate jodido musulmán, como si de verdad fuera la gran cosa.- dijo calmada y volteó dándose cuenta de que su pedido llegaba.

-Un café moka con un rol de canela y azúcar- dejando las cosas para la pelirroja volteó a ver al rubio- ¿le traigo algo joven?

-No, lárguese- el mesero desconcertado se fue hacia la cocina de nuevo.

-No había necesidad de ser tan grosero Kacchan- decía la ojimiel tomando un sorbo de su café.

-¡No me digas así mierda! Suficiente tengo con el maldito nerd, ¿y bien?- pregunto con tono indiferente y grosero.

-Bien ¿qué?- mordía su rol.

-¿Qué harás para la preparatoria?- preguntó con curiosidad y una ligera preocupación que la chica no notó.

-Creo que es obvio, seré una heroína.

-¿Y cómo mierdas lo harás? Estando en casa no creo que se pueda maldita elemental.

-Claro que no, ya tengo la preparatoria a la que iré. Pero eso por el momento no te incumbe- dio sus últimas mordidas al rol de canela y el último sorbo a su café.- Voy al centro comercial a comprar mis útiles, ¿Vienes?

-No, la bruja me necesita en 10 min.

-Bueno, nos vemos Kacchan~.- deposito un beso en su mejilla cómo hacían desde que eran niños, la pelirroja siguió con su camino y el rubio igual. Esa semana no se encontraron más.

Ahora si empieza lo bueno, espero que cuando lean esto la estén disfrutando como yo xd