Niall
El río estaba congelado, y la corriente era mucho más fuerte de lo que esperaba. Estaba feliz que el lobo más grande estuviera detrás, casi empujándome hacia adelante. Así fue que me hizo cambiar, no sabía nadar, pero mi lobo parecía que sí.
Mantuve mi cabeza erguida fuera del agua e hice mi mejor esfuerzo para nadar más rápido.
Ver a Harry me dejaba como débil en comparación, y estaba determinado a mostrar que podía hacer lo que fuera necesario para impresionarlo. Pero los latidos de los lobos de la Academia a la distancia parecían paralizar mis pensamientos y todo lo que conseguía pensar era el castigo que vendría si me atrapaban.
Una mordida en mi flanco y un gruñido irritado llamó mi atención hacia el presente, y me concentré en continuar nadando tan rápido como podía, ayudado por los toques y apoyo del gran lobo detrás de mí.
Hacía mucho frío a pesar de todo. Mi cuerpo temblaba y apenas podía sentir mis patas. Estaba exhausto y mi cabeza se hundió por lo que tragué agua en vez de aire y tosí intentando recuperar el aliento. No sé cuánto tiempo estuvimos en el agua, pero de repente él estaba a mi lado, empujando mí cuerpo en dirección al tronco de un árbol caído río abajo en el centro de la corriente de agua.
Nadé con fuerza hacia él y conseguí colocar mis patas sobre él, e intenté subirme a él. Sentí el lobo a mi lado cambiar al hombre enorme y musculoso que recordaba. Se subió al tronco con facilidad y se inclinó para sujetar un puñado de pelo de mi cuello y tiró de mí. Estaba mortificado por sentirme tan delgado, y comencé a estirarme para cambiar y decir cuánto lo sentía pero él negó con la cabeza.
—No. Permanece como estás. Voy a cambiar otra vez para calentarme y tenemos mucho que recorrer todavía. Tengo que llevarte a un lugar caliente rápido. ¿Entiendes?
Asentí con la cabeza en silencio.
Él sonrió con fuerza, su cuerpo temblaba de frío.
—Bueno, silencio absoluto y corre por tu vida. —Sus articulaciones se contrajeron y dio un suspiro llenando sus pulmones con aire, sus ojos verdes fijos en los míos. Él se giró y comenzó a correr, mirando hacia atrás para verificar que estaba detrás de él.
Hice mi mejor esfuerzo para mantenerme a la par. Correr era bueno en la medida que haría que estuviera seco y caliente. Pero estaba tan malditamente cansado. Creo que prácticamente estaba durmiéndome sobre mis patas, cuando de repente casi me choqué con él. Él se detuvo, y esperé atento.
Miró a su alrededor, su cabeza se inclinó hacia un lado. Luego, continuó corriendo. Estiré mis piernas y lo seguí lo mejor que pude. Fue un largo tiempo antes que disminuyera la velocidad, acercándose y empujándome a la derecha.
Vi un puente, y trotamos sobre el río. Sus ojos verdes se encontraron con los míos y, a continuación, continuó corriendo. Lo seguí, preguntándome cuánto tiempo más podría continuar.
Ví una ciudad delante de mí en la costa. Harry giró a la derecha otra vez y comenzó a caminar a través de los árboles en los límites de la ciudad.
Nos detuvimos, escondidos en las sombras. Vi al lobo cambiar a humano y el hombre se agachó a mi lado.
—Está bien Niall. Necesito que permanezcas muy quieto ahora. Puedes cambiar, pero debes hacer exactamente lo que te diga, —su susurro era ronco y áspero.
Cambié, feliz de estar en mi propia piel, aun cuando estaba desnudo y temblando.
—Ok, sígueme. —Harry se levantó y caminó al frente, en silencio a través de las sombras. Lo seguí lo mejor que pude, intentando caminar exactamente sobre sus pasos.
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FUGA DEL OMEGA ll NARRY
Fanfiction¿Es posible rescatar la felicidad de un desastre? Harry Ahora que salí del ejército, quiero una vida tranquila. Un bosque cercano, dónde mi lobo pueda correr y cazar, y mi taller dónde pueda trabajar con mi madera con la que... siento afinidad. De...