FUGA DEL OMEGA ll NARRY

I'll be with you from dusk till dawn

NIALL

Ellos debían haber estado vigilando la casa, porque Harry había salido esa mañana una hora antes cuando la puerta se abrió y dos hombres atravesaron la sala y me atraparon. No tuve la menor oportunidad de detenerlos, no pude alcanzar mi celular para pedir ayuda, y no estaba completamente vestido, había sentido náuseas por la mañana que duraron más de lo habitual.

Harry se había preocupado. —Voy a tomarme el día, ¿quieres que me quede? —Las pequeñas arrugas en las esquinas de sus ojos eran más pronunciadas.

—No seas bobo. Voy a estar bien en un minuto y comerme unas obleas. —Me hubiera encantado pedirle que se quedara.

Unas manos callosas apretaron mis brazos, e inmediatamente sentí que toda mi confianza huía. Una niebla fría invadió mi mente, paralizándome.

Y mi corazón se detuvo.

Zayn se acercó, su rostro triunfante. —Te encontramos, omega. —Su nariz se arrugó con disgusto. —Estás embarazado por lo que huelo.

—Por favor, por favor déjeme. —Mi voz tembló con miedo.

— ¿Olvidaste tus modales tan rápido? —Su voz era fría y cruel.

—No señor. Por favor, señor. —Podía sentir mi corazón golpeando fuerte contra mis costillas y mi respiración agitada.

Su rostro hizo una mueca de desprecio. —Debería matarte ahora. Castigarte por huir, —Se giró hacia la puerta. —Pero te llevaremos con nosotros, dejaremos que los omegas decidan tu castigo. —Él se volvió, acercando su rostro al mío. —No te hagas ilusiones, vamos a hacer que seas un muy doloroso ejemplo.

Los dos alfas que sujetaban mis brazos me arrastraron hacia fuera. Yo comencé a luchar.

—Por favor, por favor, por favor. —Tenía que proteger a nuestro hijo. Pero no podía hacer nada. Intenté morder a uno de ellos, pero el otro me amarró fuerte.

—De tente o será peor para ti.

Debo cambiar, pensé aterrorizado. Pero cuando eché mi cabeza hacia atrás, Zayn dijo brusco.

—Si te atreves a cambiar, vamos a colocarte en una caja para que no puedas hacer nada. —Vi más hombres fuera de la puerta, y mi mente quedó en blanco. ¿Cómo podría escapar?

—Es mejor que lo coloquemos en el baúl, Zayn—dijo uno de mis captores. —De lo contrario vamos a tener que vigilarlo todo el camino.

—Mi automóvil es mejor. —Zayn parecía indiferente, y se giró hacia una esquina.

—¿Puedo tomar el dinero y cosas de valor, jefe? —Uno de los hombres corrió por la casa cuando Zayn asintió. Escuché nuestras cosas cayendo al piso, y mi corazón se rompió. Fui un estúpido al soñar con la libertad. Ahora Harry estaba envuelto y quedaría quebrado también.

Me empujaron hacia afuera. Me hubiera gustado saber si los vecinos estaban, pensé en tomar una bocanada de aire para gritar por ayuda. Inmediatamente una mano tocó mi rostro y luché por respirar. Me arrastraron por el patio trasero hasta un automóvil y una camioneta estacionada al final de la calle.

Luché frenéticamente cuando me di cuenta que iban a forzarme a subir a uno de los vehículos, pero mis esfuerzos fueron en vano, sentí que me cubrían con algo y luego la tapa de la cajuela se cerró sobre mí.

Oscuridad y terror. Miedo por Harry. Miedo por nuestro bebé. Seguridad que moriría. Estaba congelado por el horror cuando el vehículo comenzó a sacudirse por el camino. Sabía que la menor de mis preocupaciones era la colección de magullones que estaba adquiriendo.