Perdida estaba entre letras de canciones y escritos sin sentido
Iba sin rumbo y sin dirección alguna
El amor, algo desconocido
Monocromática era, hasta su llegada.
Como acuarela en lienzo se extendió su color por mi ser,
Su melodía perfecta para mi verso...
Ese asombro de leer(lo)
Y empezar a sentir cada palabra dentro de mi ser
Conquistó tierra y proclamó como suyo mi corazón
De entre la niebla salió para volver todo claro,
Ya no son solo sueños, ya no más sombras
Escuchar su voz es como estar, por fin, en casa.