Yo te amo en silencio, pero te amo de veras, tú quizás no lo sepas, ni jamás lo sabrás.
Pasarán muy felices nuestras cien primaveras, pero nunca el cariño te podré confesar.
Como sé que te quiero, me conformo con eso.
Yo no puedo confiarte mi secreto de amor, y el romántico anhelo que en mi ser llevo preso, al saverse callado me conmueve en dolor.
Yo te llevo en mis ojos y te siento adherido a la entraña profunda de mi fiel corazón. Pero nunca en mis labios, por jamás en la vida, te dirán al oído mi sutíl confesión.
Porque temo que altiva me reproche inpía, y la dulce quimera que ha nacido de tí, al saber la crueldad de que no serás mío, se marchite en el alma como pobre alhelí.
Yo te amo cual nadie te habrá amado nunca pero yo te amo en silencio... No lo sé confesar... Y al guardar para siempre mi esperanza ya trunca, tú quizás me comprenda. ¡Pero tarde será!.....