Speak Now ›z.m‹

Capítulo Dos.

Chapter Two:

¿Cómo me sentía? Como un completo idiota. Pude haber llevado a Perrie a pasear una o dos horas y luego dejarla con sus amigas, ella misma me lo había propuesto, pero yo como estúpido le dije que no, que me quedaría con ella todo el día. ¿Por qué no le hice caso? Pude haber hecho lo que me propuso y así pasaba mi día con ____. Además, para empeorarlo, es tan dulce y comprensiva que ni siquiera aceptó las disculpas de Perrie, porque las novias van primero y me comparte.

Pero yo sé que eso no es cierto. En un punto de nuestra amistad ambos acordamos que nosotros dos seríamos siempre primeros, nunca pondríamos primero a nadie más que no sea ella o yo. No lo entiendo, sonríe, la abraza y habla con mi novia de lo más normal, pero sé que en el fondo está decepcionada. ¿Quién no lo estaría? Si tu mejor amigo te deja plantada por la novia.

—Es por eso que Jade no le dio mi número.—Las tres rieron. Por un momento pude concentrarme en lo que hablaban. —De todos modos, él no era tan lindo.

—¿De qué hablan? —Pregunté confundido.

—Ay tonto, ¿Qué no estás escuchando?, hablamos del sexy chico que coqueteó con ___, y me pidió su número para pasarselo. —Mencionó Jade riendo.

—¿Quién es él y en dónde vive? —Dije al instante.

—Oh cielo, no te pongas en plan de amigo celoso, es bueno que los chicos la busquen, ella es una chica hermosa e independiente.

—Gracias Perrie, que dulce—Dijo enternecida mi mejor amiga. Luego me miró—. Aún recuerdo cada cita que me has arruinado. —Las otras dos me miraron al instante.

—¿Le arruinabas las citas? ¿Cuántas veces lo has hecho?—Preguntó Jade indignada. Yo reí por lo bajo.

—No lo sé, he perdido la cuenta— Mi novia y su amiga me golpearon en ambos brazos. —¡Auch! ¡Oigan! Lo hacía por su bien, los chicos eran unos idiotas.

—Gavin no era tan malo—Dijo ___ acariciando su cuello con su mano. Señal de nerviosismo.

—¿No era tan malo? —Perrie me interrumpió.

—Alto, ¿hablas de Gavin Lexer? ¿El de la secundaria? —Mi mejor amiga asintió. —¡Zayn! Ese chico era un amor, trabajaba en un jardín de niños luego de la escuela y rescataba animalitos abandonados de la calle. —Jade puso cara de ternura.

—Aww ¡que amor! —Mencionó con emoción. —¿Quién no querría un chico así? ¡Zayn idiota!

—¡Oye! No me digas idiota—Me quejé—, lo hice por su bien.

—No sabes…—Dijo entusiasmada Perrie a Jade—El chico era perfecto para ___, es castaño con ojos azules, es tierno, caballeroso, respetuoso. Recuerdo que cada vez que terminaba con una chica era porque él sentía que no era su verdadero amor. Bueno… sin contar que esas chicas solo eran zorras que lo querían para poner celoso a alguien más. —Rieron.

—¿Puedes dejar de hablar de el magnífico principe así? Estoy delante de ti amor mío—Dije sonriendo sarcástico.

—Lo siento cariño. —Miró a ___—No sabía que habías salido con él.

—Bueno… la verdad es que salimos dos veces en una verdadera cita, luego nos veíamos en el jardín de niños porque yo iba a ayudar a una amiga de ahí. Pero nunca supe si realmente le gusté.

—Él te amaba—Mi subconciente me maldijo internamente por decir eso—Lo lamento, princesa. Él te quería, pero por un malentendido yo creí que era malo, así que arruiné su cita y él se alejó.

—Eres increíble—Musitó Jade con los ojos entrecerrados.

—Lo siento ¿sí?

—No te preocupes Zayn, solo querías lo mejor para mí.

—Nada de eso—Mencionó mi novia—Lo mejor para ti es contactarlo nuevamente. Que no se hable más, amiga, nosotras nos encargaremos de todo. ¿Cierto, Jade?

—Exacto, no hay nada mejor que ver a una de mis amigas feliz. Así que… ¿Qué dices ___?—Ella me miró mientras que las otras dos la miraban fijamente.

Oh… ella esperaba una respuesta mía. Me miraba a los ojos y creo que Perrie y Jade no lo notaban. Esperaban una respuesta de ella, pero me seguía mirando y yo no le decía nada. Así que suspiró, desvió su mirada y asintió con la cabeza, haciendo que las otras dos peguen un grito de emoción. Yo me maldije. Saldrá lastimada, yo lo sé, siempre la protegí de todo, pero en esto no puedo meterme, ni aún sabiendo que saldrá herida. Perrie me matará si arruino esto, así que dejaré que lastimen a mi mejor amiga. Aunque… eso es algo totalmente imposible, porque al primer pelo que el idiota le toque, le bajaré todos los dientes.

—Ni se te ocurra interferir.

—No lo haré Jade, lo prometo.

—Debo irme—Dijo ___ rápidamente, mientras se paraba. La miramos extrañados.

—¿Ya te vas? —Preguntó Perrie.

—Sí… mañana tengo examen—Mintió, yo sé que mintió. Porque no tiene ningún examen. —Además estoy cargada de trabajo. Prefiero hacerlo ahora y no desvelarme luego.

—¿Nos vemos luego?

—Claro Jade, llámenme y salimos las cinco.

—Genial—Dijeron las dos.

—Las quiero chicas. Nos estamos viendo—Se agachó y besó sus mejillas para luego darles un pequeño abrazo. Se separó y me miró—Te veré mañana. —Recordé lo de esta mañana, porque ella me dijo lo mismo, en el mismo tono.

—¿Paso por ti?

—Tranquilo, sé dónde queda la escuela.

Se acomodó el bolso, me miró por última vez, se dio vuelta y comenzó a irse.

—¡Te quiero, princesa! —Le grité. Ella frenó. Esperé que volteara, pero vi como negaba cabizbaja con la cabeza y seguía caminando.—Está molesta. —Dije por lo bajo, suspirando.

—Tranquilo. Déjala, ya se le pasará. Nosotras somos así; si te la mandaste, tienes que dejar que se aliviane para no arruinarlo más—Dijo mi novia acariciando mi cabello.

—Está bien.

—Bueno… yo mejor me voy, quedé con las chicas que iríamos de compras. —Se paró. —Los veré mañana tortolitos, cuidense. —Nos besó la mejilla y se fue dejándonos solos.

Dejé que mi vista vagara por el mar, veía como las olas rompían en la orilla, dejando una leve capa de espuma. Mis pensamientos quedaron perdidos en ____, realmente no sé porqué se molestó.

¿Quería mi opinión sobre Gavin? Pero… ella sabe que yo pienso que solo es un idiota más.

Suspiré internamente sintiéndome frustrado, había veces donde no entendía a las mujeres.

Ella siempre fue mi mejor amiga, siempre supimos que le pasaba al otro, qué pensábamos, qué sentíamos, fue como si desde el primer momento nos hubiéramos conectado. Pero ahora pareciera que esa conexión se iba desvaneciendo de a poco; y eso realmente me estaba matando, siento que con cada segundo que pasa la voy perdiendo.

¡No! No podía perderla, no después de todo lo que pasamos juntos.