A lo largo del día todo parecía ir normal con excepción de mis dudas. ¿Parece que se refería en aquel pueblo en donde estábamos... o con las personas con las que estaba él? ..... creo que mejor tomo la idea del pueblo, aunque no tenga idea de donde este. Tendré que hacer mi mayor esfuerzo para encontrarlo y así poder ayudar a Peter.
Al llegar la hora del almuerzo fui casi corriendo hacia las computadoras de la biblioteca buscando como loca aquel pueblo. Lamentablemente no tuve mucha suerte al principio hasta que recordé aquel enorme reloj en donde se encontraba tumbado Peter así que decidí tomarlo como referencia para reiniciar mi búsqueda.
Después de varios intentos por fin lo había logrado. Encontré una foto del pueblo el cual tiene el nombre de Storybrooke. La descripción decía que era un pueblo lleno de misterio, ya que en varias ocasiones no se encontraba este supuesto pueblo, pero las personas que si lograban llegar, jamás volvían a saber de estas. A pesar del miedo que está me causó decidí buscar la dirección y mandarla a mi teléfono para ir lo más antes posible. Aunque eso implique escaparme... O mi expulsión.
Al terminar mis clases me asegure de que mi compañera de habitación no estuviera en esta para así poder hacer mis maletas e idear el plan para poder escaparme. El pueblo estaba lejos de mi dirección. Maine no me quedaba tan cerca, pero estaba segur de que podía sobornar a un taxista para que me pudiera llevar, ya que por fortuna, podía llegar en auto.
Después de terminar mi maleta comencé a idear el plan. El cual se llevaría a cabo a las 3 de la mañana, ya que es la hora es en donde la mayoría de los guardias no están debido al cambio de turno. Un taxi me estará esperando poco menos de una cuadra para poder irme en él hacia Storybrooke solo me queda esperar.
Por fin ya había llegado la hora. Solo tenía que hacerlo rápido y silencioso. Si hacía una sola cosa fuera del plan todo se iría abajo sin tener otra oportunidad de poder ayudar a Peter.
Solo podría ser hoy y no me importaría lo que me llegara a pasar por hacerlo. La escuela la odio y a mi familia no le importo así que no hay problema en escapar.
Tomé mis maletas y abrí cuidadosamente la puerta la cual me conducía a un pasillo casi interminable, estaba custodiada por un guardia en cada esquina y la única forma de pasar sin que me vieran era cruzar de lado de la pared de los cuartos hasta llegar a una de las esquinas y esperar el cambio del guardia. Su cambio seria en 5 minutos si mal no recuerdo así que mucho tiempo en verdad no tenía, en lo que el otro guardia trataría de llegar duraría unos 15 minutos más. Tenía el tiempo medido así que solo tenía que armarme de valor y salir de mi habitación.
-Tú puedes Amelia. - Tome una gran bocanada de aire para después salir cuidadosamente de mi habitación cerrando la puerta detrás de mí.
Comencé a caminar en cuclillas hacia el fondo del pasillo llegando hasta la esquina. No pasó mucho tiempo para que el guardia se fuera, viendo así mi oportunidad de salir. Comencé a moverme en las partes más oscuras de los pasillos, tomando ventaja de que el piso tuviera alfombra dejando inaudible mis pasos. Pasé por la puerta principal de la academia, parecía que un guardia la dejó abierta.
Salí casi corriendo de aquella academia, el taxi me estaba esperando una cuadra más adelante y no se me fue difícil distinguir su tan vivo color amarillo. Cuando me subí confirme que se trataba del mismo chófer con el que hice el trato a lo cual pude ver que si era él. Después de darle un adelanto del pago arrancó el taxi y así comenzó mi viaje a Storybrooke.
Estaba bastante cansada. Ya eran más de las 4 y no había dormido nada por hacer el plan, así que solo recargue mi cabeza contra la puerta poniendo un suéter entre el vidrio de la ventana y mi cabeza para que está amortiguada. Casi de inmediato me quede dormida.
En un abrir y cerrar de ojos me pude percatar de que estaba en aquella isla nuevamente, traté de encontrar a Peter con la mirada, pero no lograba verlo por ninguna parte de la playa así que me puse de pie y comencé a buscarlo dentro de la selva.
Caminé durante un largo rato hasta que comencé a escuchar una voz que venía detrás de un árbol. Me acerqué lo suficiente como para darme cuenta de que la voz venía de Peter, pero, ¿con quién podría estar hablando? En esta isla solo somos nosotros dos.... o al menos eso me dijo él....
Me escondí entre los arbustos para escuchar mejor su conversación, aunque lo podía ver a él perfectamente no lograba ver con quién estaba hablando y tampoco podía escuchar su voz.
-Aún no es tiempo, tenemos que ser más pacientes.................... apenas está comenzando el plan y no dejaré que lo arruines........................ mira, yo deseo lo mismo que tú, y si queremos que salga como lo esperamos tenemos que ser pacientes ¡ENTIENDE! -
En casi toda su conversación Peter se notaba frustrado. Algo no estaba saliendo como el desconocido esperaba y dos cosas que le molestan bastante a Peter es que lo presionen y le den órdenes.
Después de un corto tiempo Peter iba a comenzar a hablar hasta que por accidente pise una rama que hizo que Peter se exaltara y comenzara a mirar hacia todos lados. Me escondí totalmente en aquel arbusto en donde lo estaba espiando, ahora ya no podía verlo, solo podía escuchar cómo se acercaba cada vez más hacia aquel arbusto en donde me escondía.
Podía escuchar sus pasos cada vez más cercas hasta que se quedó completamente quieto. El miedo se apoderó más de mí esperando que solo me gritara, pero poco tiempo después de que Peter se quedara quieto el conductor del taxi freno de una manera fuerte y brusca, lo cual hizo que despertara por completo.
-MIERDA!!- el conductor se bajó del taxi furioso, parecía que un neumático se había ponchado.
Cuando el conductor se bajó a revisar su auto había comenzado a llover. Parece que una tormenta se estaba acercando. Aproveche el momento para analizar un poco lo que había ocurrido en la isla. ¿Con quién podría estar hablando Peter?, le estaba dando tantas vueltas al asunto que nunca me percate de que el conductor se estaba tardando demasiado. Lo que hizo que me sacara de mis pensamientos fue un grito que provenía desde afuera. Me asomé por la ventana, pero no logré ver nada, el conductor ya no estaba y eso me había asustado demasiado.
Me bajé del taxi para encontrar al conductor, pero no logré verlo por ningún lado. De Repente escuche como un grito de un animal provenía del cielo, cuando voltee hacia arriba vi como una cosa con alas estaba tratando de agarrarme a lo cual yo solo pude correr hacia un lado para evitar que este me tomara. La criatura extraña se decidió a copiar mi movimiento para así atraparme. Corrí lo más rápido que pude hacia la dirección en la que estaba yendo el taxi dejando todas mis cosas atrás.
Casi inmediato de que comencé a correr pude divisar entre la lluvia un letrero de bienvenida hacia Storybrooke. Por fin lo había conseguido, solo tenía que llegar a un lugar seguro para poder resguardarme de la lluvia y de aquella criatura, ya me estaba cansado, mi condición física no era la mejor, pero tenía que hacer mi mayor esfuerzo por salvar mi vida.
Después de un rato de correr me percaté de que ya me encontraba en él tan esperando pueblo, cercas de mí había una pequeña cafetería, jamás había estado tan feliz en toda mi vida de ver una cafetería, pero antes de poder llegar a esta, la criatura que me comenzó a seguir durante ya bastante rato había aterrizado enfrente de mí. Me quede paralizada, pero justo antes de poder hacer algo, sentí como si una energía se apoderaba de mí a lo cual yo solo me desmaye.
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Hola, espero que les esté gustando esta historia y perdón si me llego a tardar demasiado en subir los capítulos, pero por problemas de la escuela he disminuido bastante mi tiempo para escribir.
Pero bueno. Espero que estén disfrutando esta historia tanto como yo disfruto escribirla. Sin más que decir. Hasta luego.
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Dentro de mi ser (Peter Pan/Robbie Kay & Tu)
FanfictionTodos en Storybrooke creyeron que por fin se había terminado el tormento de Peter Pan después de aquel tedioso año lleno de misterio en el bosque encantado... o al menos es lo que ellos pensaban hasta toparse con la llegada al pueblo de una chica de...