Buscando una Realidad

No puedo

Naomi

Estaba en su casa, aburrida, sin nada que hacer. Se seco las lágrimas que le quedaban. Jamás pensó que se podría enamorar de Adam, es decir, su mejor amiga la iba a matar si se enteraba de que Adam era su terapeuta y que en la mañana se acababan de besar.  En eso escucho que tocaban la puerta.

-hija ¿Estas bien?- era su madre, siempre preocupada por ella.

-Si ma ¿Por qué no?-

-Te escuche llorar hace un rato ¿está todo bien?-

-Si, no te preocupes- A veces le costaba decirle que si a su madre cuando nada estaba bien.  No quería preocuparla. Escucho que su mama se alejaba y suspiro. Tenía ganas de despedirse de Adam, pero ya se había despedido de el…con ese beso. No sabía en que estaba pensando cuando lo beso, fue como un impulso, y lo deseaba desde hace tiempo, solo que no tenía el valor para hacerlo ¿Por qué? Porque tenía miedo de que el solo la viera como una paciente y nada más, y la rechace, pero esta mañana…Aparto todos esos pensamientos de su mente y lo beso, y para su mayor suerte le devolvió el beso.  Para ella, era  la mejor sensación que haya sentido antes. Lamentablemente no se lo podía contar a nadie, si alguien se enteraba de eso, la creerían puta, agrandada, zorra, etc. Pero, el solo era 1 año mayor que ella ¿eso no era problema no? Y ahora él se iba a ir, y ella se iba a quedar ahí, en carolina del norte, mientras él se iba a california, y de seguro que se conseguía otra chica en un dos por tres, lo cual la enfurecía mucho. Temía que él la fuera a olvidar. Necesitaba verlo. Aunque sea por última vez. Y ahí se lo ocurrió: ¿Qué mejor idea que irlo a despedir al aeropuerto? Cogió su teléfono y llamo a su amigo, Will.

-¿Hola?-

-Will necesito que me lleves al aeropuerto- Will era el amigo menos interesado en la vida de Naomi, por lo que esperaba que no pregunte.

-¿Por qué?-

-Necesito despedirme de alguien-

-¿De cuando acá tu te despides de alguien?-

-Por favor-

-Esta bien, pero me debes una-

-Claro claro-

-Estoy allí en media hora- Suerte de que estaba en vacaciones, si no estaba fregada, bueno, gracias a las vacaciones podía tener las citas en las mañanas con Adam.  Se peino un poco, se cambio de ropa y media hora después ya se encontraba en el carro con Will. Miro la hora.

-¡Will apúrate no voy a alcanzar!- de seguro su vuelo estaba a punto de salir.

-Estoy haciendo lo que puedo- dijo Acelerando.

-¡Cuidado!- dijo ella cuando estaban a punto de aplastar a una pobre anciana.

-Eso estuvo cerca- dijo.-Listo, ya llegamos-

-Bien, estaciónate y me esperas-

-Esta bien- dijo el de mala gana. Ella salió rápidamente y corrió lo más rápido. En eso paró en seco. ¿A dónde estaba la sala de embarque de Adam? Después de estar como 10 minutos preguntando,  corrió por el extenso aeropuerto. Le encantaba el estilo de ese aeropuerto, lo veía en cierto modo original. Corrió hasta que a lo lejos lo vio. Se estaba despidiendo de lo que supuso sus amigos. Tomo aire y empezó a caminar casualmente como si no estuviera nada desesperada. Estaba bien lejos, por lo que a mitad de camino en la vio. Todos sus amigos voltearon al igual que el. Los había visto en su instituto el año pasado. Bueno, le llegaba, no sentía ni la mínima vergüenza.  Una vez que estuvo relativamente cerca, iba a hablar, pero él se le adelanto.

-No  sabía que ibas a venir- le dijo.

-Soy una chica llena de sorpresas- Y era verdad…”Tal vez con más sorpresa s de lo debido” pensó.