No sobrevivió

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Anteriormente en buscando una realidad…

-Soy una maldita enferma. ¿Ya viste como trate al estúpido terapeuta? Estoy harta de esto, estoy harta de que me miren con compasión como si fuera un bicho raro. –

 

 -¿Vengo acá por ti y así es como me lo agradeces? Dijo bruscamente.-Pues bien, me voy. Intente ayudar pero veo que no tienes ni la mínima intención de mejorar, ¡madura de una vez dios! -

 

-Adam- dijo el terapeuta- Si tú eras la razón por la que estuvo triste y te fuiste, si vuelves y le dices todo eso en cara….-

 

-¡Llama a una ambulancia!- dijo Steven mientras observaba al cuerpo de la chica.

No, esto no podía estar pasando.

 

*************

Estúpido, estúpido, estúpido, estúpido.

¿¡Como había sido tan estúpido?!

¿¡Como no se había dado cuenta de que Naomi era sensible?!

-Adam cálmate- le dijo Steven sacándolo de sus ensimismamientos, La madre de Naomi, Steven y el terapeuta también se encontraban en la sala de espera, expectantes a que venga algún doctor para decir que Naomi estaba bien.

Ya habían pasado 5 horas. Cinco malditas horas en las que no sabían nada de ella, si estaba muerta o viva.

Apenas habían llegado al hospital habían llamado a su madre, quien llego al instante.

Ver la cara de la pobre mujer lo rompía por dentro. Y todo había sido su maldita culpa. Ya ni sabía que debió de haber hecho y que no. El se alejo, y eso fue un error. El volvió y fue aun peor. ¿Qué debía de hacer? Por otro lado estaba Naomi, quien si no sobrevivía quedaría destrozado y no se lo perdonaría nunca.

Porque aunque aún no se lo creyera, ella era importante para él. Probablemente demasiado para su propio bien.  Si Naomi despertaba, el tendría que hablar con ella, necesitaba saber si lo quería lejos o cerca. Y lo necesitaba saber ya. Vio a la madre de la chica pararse por quinta vez para preguntarle a alguna enfermera cuando podrían decirle como estaba su hija, como siempre, no obtuvo respuesta. La culpabilidad lo estaba carcomiendo por dentro.

Nunca antes se había visto afectado por una paciente. Naomi tenía cierto efecto en el. Ese efecto de querer protegerla, o simplemente verla feliz. El quería que ella fuera feliz y no sabía cómo.  Debió de hacerle caso y quedarse en filadelfia, debió…por lo menos no haberle gritado de esa manera, normalmente se podía controlar, podía controlar su temperamento y saber cuando debía parar.

Pero con Naomi todo se le desfiguraba de una manera en la que ni el entendía. Unos minutos después su teléfono sonó. Era Linda.

-¿¡Estas en la ciudad y no me dijiste?!- escucho gritar a su amiga desde la otra línea. El alejo un poco el teléfono de su oreja para no quedarse sordo.

-Si, lo siento, se me olvido.-

-Si, claro, se te olvido. ¿Has ido a ver a tu novia?- pregunto divertida. Adam suspiro. ¿Tenia que preguntar eso?

-No…no quiero hablar de eso-

-Hey, ¿estas bien?-

-Si-

-Adam-

-La he cagado- soltó suspirando-Y feo-

-¿Con Naomi?-

Buscando una RealidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora