Cartas De Sucidio

Carta 11

Como despedirme de alguien que no existe, siento como mi corazón se parte en dos, como mis centrañas se retuercen, y mis ojos solo aguardan a soltar las primeras lágrimas, esto duele, quiero ser libre, quiero volar como siempre soñé, ser eso que todos deseaban, ser ese orgullo del cual papá me felicitara, ser esa niña linda que mi mamá adorará, ser esa hermana que nunca te dejará, solo quería ser eso para todos, pero me escondí en mi propio ser, ¿como pude permitirlo?, ahora danzo sobre mi alma destruida por la sociedad, no fui lo suficientemente fuerte para soportarlo, siempre fui débil, me perdí, me puse una máscara, una que se adueñó de mi verdadero ser, soy su títere, puedo sentir los hilos en mis muñecas llorar por libertad, y gotas escurrir debajo de la máscara, en este momento solo puedo mirar mi reflejo sin vida en el espejo, ¿donde quede?, mis ojos desaparecieron y fueron ocupados por la fina lámina de la máscara, mi sonrisa es larga y atroz, ya no tengo esas mejillas rellenas, ahora están ocupadas por un horrible color rosa y pálida piel, ¿donde quede?, mis labios ya no están, estos han sido corrompidos por unos más delgados y color durazno, mis cicatrices estan debajo de un suave suéter color rosa, recorro con la mirada mis prendas, ¿desde cuando uso faldas?, mis muslos están escondidos bajo unas medias, mi cabello esta largo y rizado , ¿desde cuando me preocupa mi apariencia?, ¿donde quede?....

Todo tipo de pensamientos plasmo en esa hoja....
Salió de su cuarto a paso apresurado, desgarrando el suéter mientras bajaba las escaleras, se dirigió al cajón a un lado de la puerta, sacando inmediatamente unas tijeras, cortando el cabello como fuera, dejando de lado los rasguños que estas le dejaran, terminó con ello, tomó el pomo de la puerta y salió, se estremeció al sentir la brisa, cerró sus ojos un instante para abrirlos con fuerza y caminar a paso decidido al jardín desabrochando su falda lanzandola al piso, lágrimas gruesas salían de la máscara, todavía sostenía las tijeras, tenía que terminar con todo eso.....

Sus dedos temblaban al compaz de su corazón, y se deslizaron por la máscara........

Retirandola lentamente, hasta que se fue por completo, se había quitado ese pesar, la admiro unos segundos, tomo de nuevo las tijeras y corto de a poco cada pedazo que la complementaba, cayó al suelo junto con ella, llorando desconsoladamente, estaba muy débil.......

Desvio la mirada a el atrayente filo de las tijeras, ¿que haría ella en ese mundo?, que más da si desaparece, ya era libre, podía hacer lo que quisiera......

Las tomo sin rechistar, acabaria con todo......

Miro por última vez sus brazos, cortando infinidad de veces su brazo el cual sangraba sin parar....

Esbozo una última sonrisa al cielo y todo signo de vida en ella desapareció.