¡Ya era hora! Ya habían pasado las tres lunas que le faltaban en la maternidad a Pequeña Marrón y sus amigos. Se convertirían en grandes aprendices. Todos empezaron a asearse limpiamente hasta que sus pelajes quedaron lustrosos y brillantes. Pequeña Marrón sentía que había pasado una eternidad,pues ella estaba muy desesperada. El sol estaba en lo alto he iluminaba todo el campamento. Hacia una fresca brisa que hacía sentir animados y de buen humor a los gatos,en especial a los gatos que serían nuevos aprendices. Salió de la maternidad con Pequeña Siamés a su lado llenas de emoción. —¡Por el gran Clan Estelar!— maulló Pequeña Marrón —¡Podría tragarme un zorro por qué Estrella Dorada empezará con la ceremonia!— su compañera asintió emocionada con un resplandor en los ojos,pero ella era más tranquila y suave como para gritar. Salió Blanquillo acompañado de Pequeño Tierno y Pequeña Rosa,quien se dirigió con las gatas. —¿Están emocionadas?— maulló con entusiasmo. Pequeña Marrón sintió que se le salían todos los ratones que se había comido en su vida. —¡¿Cómo no estarlo?!— Blanquillo y Pequeño Tierno estaban hablando entre sí. El gato marrón se veía más feliz de lo normal,por lo tímido que era. De repente se oyó un aullido en la Peña alta dirigido por un atigrado dorado claro de grandes músculos y feroces fauces. —Que todos los gatos lo bastante mayores para cazar sus propias presas vengan aquí,bajo la Peña Alta para una reunión del clan.— maulló Estrella Dorada. Pequeña Marrón se puso a dar saltos enormes al ir hacia la reunión,con sus amigos pisándole los talones. Se sentó en primera fila,junto a Pequeño Tierno. —Pequeña Marrón,ven aquí.— ella con todo gusto obedeció y fue junto a el líder. —Desde ahora en adelante hasta que recibas tu nombre guerrero,serás conocida como Zarpa Marrón— maulló con orgullo. Luego volvió su mirada hacia un gran gato negro,de barriga y hocico marrones y unos temerarios ojos verde oscuro. —Garra Sangrienta,tú serás el mentor de Zarpa Marrón— el gato asintió y fue con ella a entrechocar narices. Garra Sangrienta no parecía tener ni una mínima pizca de alegría. Su mirada siempre era fría y exageradamente sería. —Que haremos mañana?— pregunto Zarpa Marrón con los ojos centelleando.—Veremos nuestros territorios y fronteras. Para que no te pierdas en el bosque.— maulló secamente.
—Suena aburrido.
—Lo es.
Estaba a punto de decirle algo más pero Estrella Dorada volvió a maullar. —Pequeño Tierno,tú serás conocido como Tierno. Corazón de Alcon,tú serás el mentor de Tierno.— el gato marrón asintió y entrechoco narices con su aprendiz. Al contrario de Garra Sangrienta,el se veía contento y feliz de transmitir sus enseñanzas a un joven gato como Tierno. Después,Zarpa Marrón fue a entrelazar colas con su amigo y los dos tocaron sus narices con las suyas. Estaba muy orgullosa de Tierno. Aunque ese nombre sonara demasiado suave,estaba segura de que su nombre Guerrero sería completamente diferente,y no tendría ni una sola palabra con «tierno». Estrella Dorada los miro con ojos relucientes y volvió su vista hacia Pequeña Rosa. —Tu serás conocida como Rosal.— maulló — Cola de Hielo,tú serás el mentor de esta gata.— la nueva aprendiza entrechoco narices con su nuevo mentor y Rosal le estaba diciendo algo a el guerrero tan bajito que Zarpa Marrón no pudo escuchar. Después,con la mirada fija en los hermanos restantes exclamó —Pequeña Siamés,tú serás Zarpa Siamés. Garra Espinoza,tú serás el mentor de Zarpa Siamés.— la gata se puso muy contenta y apenas y toco la nariz de su mentor. Por último,Estrella Dorada dijo —Blanquillo,a partir de ahora,hasta que recibas tu nombre guerrero serás conocido como Blanco. Sombra Marina será tu mentor.— al igual que todos,entrechocaron narices,y hasta el viejo gato gris azulado se limitó a sonreír amablemente a Blanco. A comparación de su mentor,Garra Sangrienta,el estaba muy feliz. — Clan Estelar,quiero que observen a estos aprendices. Ellos serán buenos guerreros y lo demostraran mediante su comportamiento,lealtad y entrenamiento. Bien,esta ceremonia ha llegado a su fin—maulló Estrella Dorada bajando de la Peña Alta. Zarpa Marrón seguía con la cola entrelazada con la de Tierno. Hasta que este se dio cuenta,este quito la cola rápidamente y rodeo sus patas con ella. Se volvió a mirar las zarpas como unas lunas antes,pero ahora vio un destello risueño en sus ojos. Rápidamente levanto la cabeza hacia Zarpa Marrón y le dio un afectuoso lametón en la mejilla y salió corriendo hacia donde el Clan Estelar supiera. Zarpa Marrón se puso tensa y se quedó inmóvil. ¿Podría ser que ella y su mejor amigo sentían algo más que amistad? Apartó esa idea de su mente y decidió buscar a Tierno.
Después de que lo encontró cazando fuera del campamento cerca del río,se dispuso a llevarle un ratón antes de hablarle. —Hola Tierno. ¿Qué haces?— maulló para no sonar curiosa ante lo que él hizo.
—Solo cazando algo para el clan. ¿Y tú?
—Bueno yo venía para hacer lo mismo. Pero te encontré.
—Pues es bueno que nos adelantemos,podremos causar grandes impresiones a nuestros mentores.
Zarpa Marrón no lo creía. Su mentor se veía tan serio siempre.
—Tal vez. Aunque nos podríamos adelantar con nuestro entrenamiento si empezáramos hoy. Después de todo nos queda mucho del día,es de mañana y está muy fresco.
—Buena idea.
Los aprendices fueron a él campamento para preguntarles a sus mentores si se podrían adelantar. La idea de que Garra Sangrienta no quisiera entrenarla y Tierno se adelantara le resultaba hasta humillante para Zarpa Marrón.
Cuando entraron por el túnel de aulagas fueron de inmediato a la guarida de los guerreros. Encontraron a Corazón de Alcon durmiendo en su lecho,pero Garra Sangrienta no estaba ahí. Tierno movió con su pata el omoplato del guerrero y este fácilmente se despertó. —Tierno,¿qué pasa?— maulló en voz baja con un bostezo adormilado. —¿Podemos iniciar el entrenamiento hoy?— preguntó el gato gris a su mentor. —Claro,solo déjame comerme un ratón y nos vamos.— maulló. Corazón de Alcon salió del campamento y fue al montón de carne fresca para tomar un campañol con su boca. —Bien,buscaré a Garra Sangrienta— dijo Zarpa Marrón mientras salían de la guarida. —Okey— maulló Tierno mientras Zarpa Marrón corría hacia Estrella Dorada. El estaba al pie de la Peña Alta hablando con su lugarteniente Pelaje Celestial mientras se comía una paloma. Cuando estuvo al lado del líder,este sonó un poco furioso. —Pero es mi vida. Yo puedo hacer lo que mi corazón me ordene.— maulló con frustración. —Pero Estrella Dorada,comprende. Que más da si quieres una vida así,tienes que vivir con el código guerrero,y esa vida no tiene nada que ver con el.—
aulló la lugarteniente. Estrella Dorada se volvió hacia Zarpa Marrón y su expresión cambio. Primero de sorpresa,y después cambió su frustración por un gesto poco cansado.
— Zarpa Marrón,¿qué pasa?
—Quería saber en dónde estaba Garra Sangrienta.
—Oh claro,él está dentro de la maternidad. Le dije que le llevará musgo a Tormenta de Nieve para que tomara agua,ya que los aprendices están entrenando.
—Gracias.
Zarpa Marrón se dirigió a la maternidad. Corazón de Alcon ya estaba terminándose el campañol mientras ella entraba a buscar a su mentor. Cuando entro vio a Garra Sangrienta con el musgo en frente de las patas. —Hola Zarpa Marrón. Felicidades.— maulló Tormenta de Nieve —Gracias— dijo la aprendiza orgullosamente. Luego se volvió hacia Garra Sangrienta —¿Podemos iniciar en entrenamiento hoy? Me quiero adelantar— su mentor hizo un gesto de irritación y al cabo asintió.
Cuando los aprendices acompañados de sus mentores salieron del campamento,se encaminaron hacia un barranco. Zarpa Marrón reconoció ese lugar. Allí estaba cuando salió a buscar a su padre cuando a penas tenía tres lunas de edad. Bajaron del barranco y pasaron por un gran árbol. —¡Estoy muy emocionado!— aulló Tierno. —Poder cazar,pelear,patrullar,ir a asambleas. ¡Sería genial!— Zarpa Marrón asintió con menos entusiasmo pero animada. Sin que ella se hubiera dado cuenta habían llegado a un lugar donde había una cueva muy grande. No estaba para nada profunda,era redonda y solo había un agujero de entrada en donde los gatos podrían entrar si querían. Entraron en la cueva y Zarpa Marrón contemplo una bella roca que estaba en medio de todo el espacio. Alrededor de la roca,había un círculo que se marcaba por tener agua. Era como un arroyo pequeño e infinito. —Aquí es la Cueva Estelar.— maulló Garra Sangrienta con voz ronca —cada luna llena todos los gatos se reúnen aquí para la asamblea,dentro de la cueva.— Corazón de Alcon se acercó más a la preciosa piedra. —¿Ven esto? Es la Piedra de las Estrellas.—su voz sonó tan baja que solo se escuchaba como un susurro. —Cuando un líder muere,el lugarteniente viene aquí,para recibir sus nueve vidas y volverse en el futuro líder de su clan. Guarden silencio,porque cuando está cueva está sola,el Clan Estelar descansa en un profundo silencio.— maulló. Zarpa Marrón miro hacia arriba,en donde encima de la Piedra de las Estrellas estaba un hueco en donde se proyectaba la luz lunar. Estaba sorprendida,nunca había visto cosa semejante. Siguieron avanzando por un sendero que llevaba a él río. Allí había rocas que resplandecían tanto bajo los rayos del sol que parecían diamantes. Corazón de Alcon fue a las rocas y las apuntó con la cola. —Aquí son las Rocas Lunares—dijo resplandeciendo bajo el sol igual que las piedras. —El río es lo que marca la frontera del Clan de las Nubes y el Clan de la Hierba.— señaló apuntando hacia el otro lado del río. Volvió con los aprendices y se sentó rodeando sus patas con la cola. —Las Rocas Lunares son sagradas para nosotros,ya que podemos ver la luna y las estrellas—se encaminó a la otra frontera,que era cercana a la de el Clan de la Hierba. Había una pradera que tenía mucha flora. Había un pequeño arroyo cuya agua era cristalina,y además había muchos árboles para esconderse. Aquel debía de ser otro clan,en su territorio era casi igual. Solo que no había tantas flores,y los árboles no tenían frutos. De repente,de unos de los arbustos salió un gato blanco. Tenía motas café claro y oscuro que parecían de un aspecto leopardino. Sus ojos azules se cruzaron con los de Corazón de Alcon e hizo un gesto amigable.
—¡Saludos,Corazón de Alcon!
—Hola Leopardo Blanco. ¿Cómo estás?
—Yo bien. Veo que tienes a dos pequeños contigo. ¿Son aprendices?
—Exactamente,y se convertirán en maravillosos guerreros. Oye,aprovechando que estás aquí,¿podrías decirles a estos dos cuál es el clan y las fronteras que este tiene?
—Pues claro.— maulló — Verán pequeños. Este es el Clan de las Rocas. Nuestra frontera se ve por el pasto verde claro del Clan de la Hierba y el pasto más oscuro de nuestro clan. Tenemos agua muy fresca,por eso en la estación sin hojas,el arroyo se ve hermoso— señaló con la cola el arroyo y se volvió de nuevo hacia los aprendices. —Cuando más lo necesiten,pueden venir a beber,si es que están en una situación extrema y Estrella de Peñascos se los permite,claro. En fin,necesito cazar para el clan. Espero que se conviertan en muy buenos guerreros. Adiós—
—Adiós— maulló Zarpa Marrón y Tierno. Leopardo Blanco se metió otra vez en los arbustos y solo se vio su cola cuando aprendices y mentores dieron media vuelta y volvieron a su expedición. Fueron a un lugar en donde había más arbustos,pero Zarpa Marrón vio unas piedras que eran oscuras. Nada comparadas a las de las Rocas Solares. Ahí había un territorio que solo era una pradera de pasto seco. Había muy pocos árboles y arbustos,además Zarpa Marrón pudo distinguir un olor que su madre le había enseñado que era de un conejo. Al poco tiempo vio a uno salir del pasto. Era un conejo café claro,se podía confundir muy fácilmente,pero tal vez para los gatos de ese clan,no era algo difícil. Garra Sangrienta avanzó hasta quedar enfrente del montón de rocas bajas. —Ahí son las Rocas Mortales. Ese es territorio del Clan de la Lluvia,y separa su territorio con el nuestro.— maulló seriamente —Se les dice así porque se pueden encontrar grandes cantidades de bayas mortales,y los gatos del Clan de la Lluvia no se acercan mucho a esa parte. Pero las presas distinguen las bayas y no las comen,para suerte del clan.— Zarpa Marrón se sobresaltó y se imaginó las dificultades que tendría ese clan si las presas comieran las bayas mortales y los gatos de allí comieran veneno. —Sigamos,ya quiero terminar esto e irme a dormir.— maulló con irritación su mentor. Zarpa Marrón solo pensó que Garra Sangrienta la odiaba. ¿O es que siempre sería así? Zarpa Marrón vio un destello de sol en una de las piedras de las Rocas Mortales,recordando a Estrella Dorada. Se preguntó qué estarían discutiendo el y Pelaje Celestial. Ellos eran muy cercanos y Zarpa Marrón nunca los había visto discutir de esa manera. La lugarteniente parecía preocupada y a la vez frustrada,con una mezcla de tristeza en su rostro. Quito la imagen de la gata de su mente y se puso en marcha con su mentor en frente de ella.
Avanzaron por un sendero que estaba cerca de él Clan de la Lluvia,había bastante hojarasca en el suelo forestal. Llegaron a una laguna en donde había pocos peces.
—Aquí es la Laguna del Pez Dorado.—maulló Corazón de Alcon —Los peces son preciosos,pero no significa que no sean sabrosos. Hay pocos,pero siempre hay bastantes para el resto del clan contando las otras presas. ¿Y ven allí? Es en donde los aprendices entrenan.— maulló señalando una parte abierta en donde había pasto verde claro y se podrían practicar batallas muy bien. —Es todo,al campamento. Pero antes... Tienen que sacar el rastreador que llevan dentro— solo dijo eso y los guerreros salieron de un salto del espacio abierto de la laguna. Zarpa Marrón solo le hizo una seña a Tierno para que siguieran cualquier marca olorosa. Tierno le hizo caso y salieron del espacio de la Laguna del Pez Dorado. Sin embargo,a Zarpa Marrón se le hizo la boca agua con el olor a presas que la distraía por completo. Vio una ardilla pasar por un zarzo mordisqueando una semilla,y Zarpa Marrón se abalanzó sobre el roedor y lo mato de un mordisco. Estaba a punto de darle un bocado cuando Tierno le pisó la cola. —Oye,recuerda que los aprendices no pueden comer antes de alimentar al clan. Mejor llévalo al campamento,Tormenta de Nieve mencionó en la mañana que tenía hambre y apenas había salido una partida de caza— la aprendiza asintió con los ojos apagados. Ella también estaba muriéndose de hambre,pero debería respetar el código alimentando al clan primero. Tomó la ardilla y el olor de la presa la distraía bastante. Hizo un esfuerzo por recordar los senderos por los que habían pasado,del campamento hasta los otros lugares. Después de un tiempo no tubo problema con la ardilla y pudo distinguir un olor a gatos. Pero también un olor a sangre,y era fresco. Zarpa Marrón miro a Tierno preocupada,el gato gris también parecía haber olido los rastros. —¡Mira!—Tierno apuntó con la cola gotitas de sangre que llevaban al campamento. Zarpa Marrón corrió con su amigo pisándole los talones hacia el campamento. Algo andaba mal,y sin duda alguien se habría hecho alguna herida. Cuando entraron al campamento,Zarpa Marrón dejó la ardilla en el montón de carne fresca y rápidamente vio cómo Corazón de Alcon se hallaba bajo la Peña Alta junto a Estrella Solar y la lugarteniente,con Garra Sangrienta ayudándolo a apoyarse en el. Los aprendices fueron corriendo hacia ellos,preparados para una explicación ante los rastros de sangre. Los guerreros entraron a la guarida de la curandera Boscosa cuando Zarpa Marrón y Tierno llegaron con ellos. —¿Que ha pasado?— pregunto Tierno preocupado. Corazón de Alcon tenía el omoplato rasgado,no parecía ser una herida hecha por una garra de gato.—Pase corriendo demasiado rápido contra un espino y me raspe el omoplato. No te preocupes,estaré bien— lo tranquilizó Corazón de Alcon. Garra Sangrienta le hizo un gesto en modo de pregunta a Corazón de Alcon y este asintió calladamente. Su mentor se fue a la guarida de los guerreros y se acomodó en su lecho cómodamente relajado. <<¡Es un grosero!>> se dijo Zarpa Marrón para sus adentros. Solo hizo como si no le importará su compañero y se fue. Eso no era ser un buen guerrero. Boscosa llevaba consigo una rama que tenía telarañas pegadas y algunas hierbas. —Las telarañas evitarán que tu herida se infecte,y por lo tanto,¿te duele mucho el rasguño?— El guerrero negó con la cabeza —Muy bien. Si te duele ven conmigo para que comas unas cuantas semillas de adormidera— Corazón de Alcon asintió y salió de la guarida de la curandera dirigiéndose junto a un zarzo. Tierno fue a él montón de carne fresca y tomo un campañol. Fue con su mentor y se lo entregó. El gato le dijo algo a su aprendiz,demasiado lejos de Zarpa Marrón como para que ella escuchara. Tierno asintió y volvió con su amiga.
—Corazón de Alcon me dijo que mañana estaría bien y podríamos seguir entrenando.
—Pues eso está bien,no quiero que te quedes atrás.
Su amigo entrelazo la cola con la de Zarpa marrón y esta restregó el hocico contra su costado.
—Espero que seamos los mejores guerreros del bosque.
—Lo seremos.
Una brisa fría hizo que la aprendiza marrón claro sintiera un escalofrío. Se acercaba la estación sin hojas,Zarpa Marrón no quería nada de eso. Quería ocuparse de sus tareas tranquilamente;sin tener que estar cazando de más para el clan y alimentarse hasta el anochecer. Al menos caían copos de nieve con los que podría jugar,si es que le daban tiempo de hacerlo. Tierno se paró del suelo y maulló —¿Qué tal si vamos a cazar?— Zarpa Marrón asintió y salieron del campamento. Bajaron del barranco y se dirigieron a un sendero en donde había mucha hojarasca y se podrían escuchar fácilmente las pisadas de los aprendices si una presa estaba cerca. Siguieron avanzando por el sendero hasta llegar a la Laguna del Pez Dorado. Cerca de la laguna había un arrendajo bebiendo del lago. Zarpa Marrón se agazapó y camino sigilosamente con la hierba rozándole la barriga. Saltó a gran velocidad y le dio un mordisco al ave. Fue hacia los árboles y la lleno de tierra para mantenerla fresca,ya que su madre le había contado que cuando un gato cazaba algo,debía de cubrir a su presa.
El sol ya se estaba ocultando. Zarpa Marrón y Tierno ya habían llevado algunas presas al campamento,pero aún les faltaban algunos ratones para llevar. Ya casi todo el clan estaba alimentado,principalmente las reinas y veteranos. Algunos guerreros ya se habían zampado su comida y Tierno le había llevado a su mentor un campañol. Pelaje Celestial dijo que Garra Espinoza iría por las presas restantes. Zarpa Marrón tomo una Paloma del montón de carne fresca para Estrella Dorada. Se dirigió a su guarida,que se encontraba al lado de la guarida de Boscosa. Era una pequeña cueva que tenía bastante musgo. Entró a la guarida de Estrella Dorada y vio al líder dormido en su cama de lechos. Por dentro también había musgo,y había suficiente luz para poder ver el pelaje dorado del líder. En cuanto Zarpa Marrón piso el suelo arenoso el macho volteo hacia ella y parpadeo ante la luz del sol que ya casi se ocultaba.
—Buenas tardes,te traje esto. Pensé que tendrías hambre—
—Oh,gracias Zarpa Marrón. Veo que tuvieron una buena caza—
Estrella Dorada apuntó con la cola el montón de carne fresca que se podía ver desde la entrada de la cueva. La aprendiza asintió y se preguntó si sería grosero o irrespetuoso preguntarle a su líder porque estaba discutiendo con Pelaje Celestial. Retiro eso de su mente y trató de decirle algo a Estrella Dorada que no tuviera nada que ver con el tema,pero él la interrumpió preguntándole algo con la mirada apagada.
—¿Qué tanto escuchaste en la conversación que teníamos Pelaje Celestial y yo?
—No lo suficiente para comprender.
—Entonces no podrás saberlo aún.
Aunque Zarpa Marrón no podía meterse en los asuntos privados del líder,no pudo evitar preguntar:
—¿Qué cosa?
Estrella Dorada negó con la cabeza y empezó a darle mordiscos a la paloma. Hizo un movimiento con la cola indicándole a Zarpa Marrón que se fuera. —Vete— la aprendiza dio media vuelta. Vio la luna que ya estaba en el cielo. —Ah,Zarpa Marrón. Dile a Pelaje Celestial que venga aquí ahora mismo. Ella asintió y fue con la lugarteniente.
Los aprendices ya estaban en la guarida. La luna resplandecía y todo el Manto Plateado relucía ante el claro. Zarpa Marrón se había colocado junto a Zarpa Siamés. Ella,a parte de Tierno,era muy cercana para Zarpa Marrón. Desde que eran cachorras jugaban juntas y además Zarpa Siamés era muy paciente con ella. Rosal se había acostado con su hermano y Zarpa Puntiaguda y Alba estaban entrando a la guarida. Había muchos aprendices,pero los más grandes no tardarían en convertirse en grandes guerreros. Zarpa Marrón miro hacia el cielo una vez más,y pensó en el futuro. Siendo una gran guerrera. Quién sabe,¿y si llegara a ser lugarteniente?
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Los Gatos Guerreros #1 -la unión de los clanes- :el líder doméstico
FanfictionPequeña Marrón es una gatita muy curiosa que se convierte en aprendiza. Ella tiene que averiguar qué siente por su mejor amigo, y lo que está pasando entre la lugarteniente y el líder del Clan de las Nubes. Además, sueña un futuro como una gran guer...