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Con el paso de las semanas HyunJin empezó anotar distintas cosas sobre Félix sin tener que dirigirle una sola palabra para entenderlas, la primera y la que se le hacía más tierna es el hecho que le gusta esconder sus manos en la manga de su hoodie, sosteniendo los bordes de estas con la punta de sus pequeños deditos. La segunda es que es alguien muy inteligente, hacía ver las matemáticas como si fueran un juego para niños de primer nivel preescolar, eso junto a su gran habilidad para el inglés.

La tercera es que los ruidos altos y Félix no son una buena combinación, ya varias veces durante el desorden habitual de sus compañeros había notado al pecoso tapando sus oídos casi con necesidad o buscando sus auriculares como si su vida dependiera de ello.

La relación que llevaba con ese castaño era algo más que de simple compañeros, no estaba seguro de que amigos fuera la palabra más adecuada para describirla, pero se mantenían juntos casi todo el tiempo cuando estaban en clases ya que al parecer luego de aquel ataque la familia del pecoso pidió que se le asignara un compañero fijo para mantener las cosas bajo control y el pecoso le eligió a él.

Se entendían en silencio y este era muy agradable, los post-it's de ChangBin eran de una gran ayuda ya que era la manera principal de comunicarse en su relación, además que había notado que a Félix le gustaba especialmente los que son de un tono amarillo muy pálido.

Un fastidioso viernes en la mañana HyunJin llegó a su aula para notar que como toda esa semana Félix no se encontraba allí, eso le colocaba nervioso por desconocer el estado del menor luego de aquel ataque y no sabía a quien podía preguntarle por el estado del menor ya que desconocía en donde encontrar a los chicos que estaban con él aquel día.

— Entonces veía felizmente con mis nuevos lápices y un chico chocó conmigo ¡Pero eso no es todo! ¿Recuerdas a Han JiSung? —hablaba Seo sin tomar aire, ignorando que HyunJin estaba casi dormido en la mesa de su silla con los brazos colgando de esta— ¡Estaba con él! Hermano, nunca estuve tan descuerdo con un trío.

Lo último llamó la atención de HyunJin, haciendo que se preguntase muchas cosas ya que ChangBin a pesar de ser tan sociable nunca apuntaba a tener una relación con alguien desde sus simples fantasías.

— Nunca pensé en que una relación de tres te llamaría la atención, son complicadas —respondió en murmuro sin levantar la cabeza de la mesa, su voz distorsionada ya que su mejilla se encontraba aplastada contra la mesa.

— Pero posibles —golpeó suavemente la cabeza del mayor— Hyun~ ¿Qué puedo hacer para que dejes de actuar como esposa despechada? Llevas media semana así.

— Pagarme la cena.

— Está bien. Ahora levántate que el demonio llegó.

La profesora que les daba matemáticas entró con muchas cosas en brazos, dejando que varios vieran que se trataban de exámenes limpios y por entregar cosa que causó un ascenso astronómico del nerviosismo en la sala.

— El día de hoy estaba planeado hacer una prueba sorpresa, pero recibí un memorándum que los ha salvado —dejó su maletín en el pupitre para mirar a los chicos— Solo daré la mitad de mi clase y ustedes podrán irse a hacer otras cosas.

Luego de pasar lista y ver que solo faltaban tres estudiantes siguió explicando lo que harían.

— ¿Cómo piensa que hagamos eso en treinta minutos?

La pregunta vino de JungWoo que miraba boquiabierto a la hoja que le habían entregado.

— De dos en dos al tablero, iniciando por usted señor Kim —la profesora le sonrió al chico quien maldijo en voz baja— YukHei puede acompañarlo.

In your armsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora