Soy Tu Reflejo©

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El día después de eso pasó sin ningún conflicto. Javier al estar tan ebrio, no se acordaba de nada de lo sucedido cuando se despertó en el contenedor de basura que había en un callejón del barrio, dónde era que Christofer en realidad lo había transportado tras la pelea y su  desmayo. Mirian después de haberlo noqueado tomo más confianza en sí misma y no permitió que él le pasará por encima de su autoridad.

Celeste con cada día que pasaba se volvía más cercana a Chris mientras que Isaac había dejado de molestarle en las horas de clases y recesos. Aunque siempre parecía estar detrás de él observándolo, vigilando todo lo que hacía y estando con el ceño fruncido cuando había muestras de afecto entre Celeste y Christofer.

En la empresa las cosas estaban siendo perfectamente manejadas por Romina y marchaban a la perfección pese al cambio de CEO. Ella enviaba informes periódicamente para mantenerlo al día de todo lo que los tiburones intentaban hacer o de las decisiones que se tomaban y también de cómo tanto Erik y Franco interactuaban con Esteban.

Los hermanos después de la primera llamada crearon un pequeño ritual. Todos los días se llamaban a la misma hora y hablaban hasta que uno de los dos de quedará dormido y el otro tenía que cortar. En esas llamadas hablaron de sus vidas, de lo que querían en el futuro cercano, de lo que hicieron de chicos. Sus padres fueron mencionados y el tema de que ambos son adoptados pero decidieron por acuerdo mutuo encargarse de eso después de que cada uno volviera a ocupar su lugar.

Para Christofer le era aún difícil volver a su verdadera casa pero tenía que hacerlo eventualmente y se estaba preparando para eso, Esteban le había pedido pasar el fin de semana juntos y no se pudo negar verlo. Ninguno de los sabía quién de ellos había nacido primero pero Esteban despertaba una inmensa sensación de protección a Chris  que le era difícil negarle las cosas.

Esteban en cambio se sentía los primeros días mal por haber dejado a su madre sola con Javier, solo se tranquilizó después de que su hermano le contara sobre la confrontación y como su madre por fin se había defendido de los maltratos. Tener un hermano era lindo, agradable, cálido, era como si al encontrarse nuevamente pudiera llenar la parte en su interior que faltaba y no sabía que era así, le dió seguridad de que no estaría solo nunca. Y conocer dónde había sido criado y junto a quién fue un paso más cerca de converger, de ver lo que lo transformó en él. La mansión de los McWhithe era enorme, pero pese a los prejuicios que siempre tuvo por las familias ricas en su mente debido a sus compañeros, no era como se había imaginado que sería. En toda la casa se podía sentir la calidez de un hogar, lleno de fotos, retratos y objetos que uno no asumiría encontrar en tal lujosa mansión. Romina le había dicho en que trabajaba los padres de Christofer y se sintió feliz por saber que por más rico que estos fueron no lo educaron mal, sino todo lo contrario, era un ser humano excepcional. Erik también habló de ellos, recordando sus momentos junto a ellos con nostalgia y cariño, eran una familia un tanto extraña pero una familia y de eso no había duda.

Tampoco paso desapercibido la atracción de Romina y Erik ni del   como bailaban uno alrededor del otro cada vez que se veían aunque parecía que ninguno tenía el valor de hacer un movimiento para acercarse al otro.

La otra persona que estaba tratando de hacerse notar desde que se instaló y llamar su atención era Franco. Al principio fue raro, saber que era la pareja destinada de alguien y que por más que lo rechazará tendría que permanecer a su lado para su supervivencia. Sí, los hombres lobo tenían una pareja destinada del cual, literalmente, dependían para sobrevivir una vez que la encontraran. Pues una vez que eso sucedía se creaba un vínculo automático, un lazo, que unía sus almas, si la persona no era otro hombre lobo esté podía rechazarlo pero, por la conexión entre los individuos, no podía perder el contacto y verse cada cierto tiempo para permitir al lobo dentro de ellos no consumir la mitad humana y se volviera salvaje.

Después de hablar toda una noche con Christofer sobre cómo se sentía y que pensaba sobre  eso llegó a la conclusión de que no lo conocía, por lo cual no podía decidir si darle una oportunidad o no. Por lo que antes que nada se conocerían y dentro de un mes, tiempo que había decidido por su hermano por él, daría su veredicto.

Cuando tomó el valor suficiente para sentarse frente a Franco y contarle todo lo que había decidido después de tartamudear mucho, sonrojarse completamente y querer huir de su presencia, el sonrió y estuvo  feliz de su curso de acción le felicito por ser más sensato que él en el curso de acción de la situación.

Las cosas entre ellos quedó más tranquila después de aquello y dejaron todo el asunto de la pareja destinada a un lado para simplemente conocerse. Sin la tensión entre ellos las conversaciones comenzaron a fluir y pronto comenzaron a formar las bases de una bonita y sencilla amistad.

Isaac no podía creer su suerte. Desde que volvió a ver a Esteban en el hospital con ese traje bastante caro y había percibido  su aroma había descubierto que era su pareja destinada. No entendía como no lo había notado antes, pero cuando lo descubrió una sensación de absoluto terror y culpa lo recorrió. Terror, porque el desde que lo conoció le había hecho la vida imposible, humillando en cada oportunidad que tuvo, golpeándolo y burlándose de él sin remordimiento alguno. Muchas veces lo había hecho llorar frente a todos y todos los recuerdos de esos sucesos solo aumentaron la sensación de culpa en su interior, porque si él lo rechazaba iba a ser por todo lo que había hecho y no podía reclamar nada, ni siquiera podía pedir ser su amigo.

El lazo ya estaba formado pero era tan frágil y quebradizo que no pudo dormir al pensar en eso y sentirlo así. Cuando se acercó a él en el instituto el lunes para hablar con él y este lo ignoro solo le causó más dolor a él y a su lobo quien rugió molesto, culpando a ambos por la situación.

Tenía mucho miedo por lo que se lo contó a su madre. Siempre pudo confiar en su madre en situaciones como está para guiarlo en la dirección correcta. Desde que se enteró de que tendría una pareja destinada cuando tan solo era un cachorro, comenzó a soñar que sería una mujer hermosa y muy buena que lo quería y el la amaría con todo su corazón, él la protegería y la llenaría de amor y mimos para formar una familia numerosa con ella y llegar hasta viejitos juntos.

La ironía del destino lo golpeó de lleno cuando vió a Esteban ese día. Sí, su pareja era hermoso pero era un hombre y además un brujo. El mismo al que había lastimado tanto y del que ahora sentía la necesidad de proteger pero no podía.

Su madre con mucho amor le dijo que enmendarse era el único curso de acción posible y demostrar que estaba verdaderamente arrepentido por sus actos. Eso con suerte le podría dar una oportunidad para llegar a su corazón al que tanto había lastimado. Y siguiendo su consejo comenzó a observarlo desde ese día y pensar como seguiría el consejo de su madre, pero para un chico al que había sufrido un accidente de tránsito y ahora tenía amnesia temporal se comportaba muy distinto al Esteban que recordaba.

Antes cuando alguien lo molestaba el bajaba la cabeza y trataba de pasar desapercibido, en cambio ahora les hacía frente y les respondía de manera ingeniosa. En sus ojos había un animal furioso que se había mantenido dormido y que después de muchos golpes había despertado furioso y poderoso. Sintió que no conocía al Esteban que ahora observaba en los pasillos o en clases. La manera de caminar era soberbia, con presencia, como si pudiera comerse el mundo. También era más confiado, principalmente cuando estaba con Celeste. En lo único que él y su lobo estaban de acuerdo era en que no la querían cerca de Esteban y harían lo posible para separarlos, pues los celos mantenían constantemente su ceño fruncido al observarlos.

Las dos mitades que se habían separado de habían juntado nuevamente y las ruedas del destino se pusieron en marcha. El equilibrio cósmico comenzó a moverse para restaurar lo que años atrás le habían arrebatado y ahora no había nada que le impidiera. La luna brilló como nunca, bañando a la tierra con su poder para lo que se avecinaba y la Naturaleza incremento su poder gracias al sol.

Era momento de que la justicia divina interviniera...