Destinado a ser

7

-¡Dragones!-

Levantando la vista desde donde estaba parado, Fergus entrecerró los ojos cuando un dragón comenzó a bajar hacia ellos. -Nadie dispare todavía. Podrían ser de la isla de Estoico-Cuando la chica del dragón de color arcoíris aterrizó en el borde del barco, Fergus mantuvo una mirada fulminante. -¿Puedo ayudarte?-

Astrid tenía una mirada fulminante. Odiaba su vida en este momento y se vio obligada a patrullar con el bastardo que arruinó su vida.
-Vinimos a preguntarte lo mismo. ¿Quién eres y por qué te diriges hacia Berk?-

Con un suspiro, Fergus sonrió mientras se relajaba. -Bueno, yo soy Fergus de Dumbroch. Jefe del Clan y viejos amigos de Estoico. Nos dirigimos allí desde que nuestro castillo fue destruido-

-¿Fergus?- Astrid entonces jadeó cuando sus ojos se abrieron de par en par. -¡Espera! Fue tu hija a quien Hipo fue a buscar ayuda, ¿no?-

-De hecho. Aunque no había regresado cuando nos fuimos. Dejamos un mensaje, pero el dragón de hielo casi mata al resto de mi familia. No iba a arriesgarlos, así que los cargué y vinieron-Al escuchar los pasos detrás de él, sonrió. -Ella es mí esposa Elinor y mis niños-

Con una sonrisa mientras asentía, Astrid se relajó, pero luego se preocupó. -¿Has oído algo de él?-

-No. Solo se fue unos días antes de que sucediera-

Con los ojos tristes bajando, suspiró y luego les hizo un gesto brusco. -No te preocupes. Hipo la atrapará y descubrirá a dónde fuiste y la traerá aquí sana y salva. Lo sé-

-Bien. ¿Vas a dejar que Estoico ...-

-Cosa segura- Astrid sonrió mientras volaba y luego se fue a la isla. Solo para mirar cuando Spider la alcanzó. Odiaba el nombre casi tanto como odiaba al hombre que lo tenía.
-¿Qué quieres Spider?-

-Entonces, ¿quiénes son?-

-Amigos. Es Fergus y su esposa. Los que Hipo fue a ayudar. Un dragón de hielo los atacó y luego vinieron aquí para que nada le sucediera a la familia. Todavía no tenían noticias de Hipo antes de irse-

-Sabes que bien podrías olvidarte de ese tonto Astrid. No lo volverás a tener-

-Vete al infierno bastardo- Luego empujó a Storm Fly más rápido para alejarse de él. Sabía que incluso si volvía corriendo a Hipo, probablemente destruiría toda la confianza que él tenía en ella. Pero ella no iba a dejar que nadie le hablara mal. De ningún modo.

Cuando la isla apareció a la vista, suspiró cuando Storm Fly fue directamente a la casa de Hipo. Deslizándose, corrió hacia la puerta y llamó. -Espero que estén en casa-

Cuando se abrió la puerta y encontró a Estoico parado allí, lo miró a los ojos. -Se acerca un barco. Son Fergus, su esposa y sus hijos. Y parece que hay muchos aldeanos-

-¿Hipo?-

Sacudiendo la cabeza mientras bajaba los ojos, Astrid suspiró. -Dijo que cuando el dragón atacó el castillo, Hipo se había ido unos días antes. No habían escuchado nada de él antes de que sucediera y se fue para venir aquí-

Al pasar junto a ella, Estoico suspiró. Tenía que hacer planes y preparar el gran salón para los invitados. Y no tenía tiempo para la lástima de Astrid. Algo que parecía querer de todos desde la noche en que destrozó el mundo de su hijo.

Bajando la cabeza mientras suspiraba, Astrid se dirigió a su casa, pero se detuvo cuando sintió una mano en su hombro. Al volverse, encontró a Valka parada allí. -¿Qué pasa, Valka?-

-Camina conmigo. Necesito hablar contigo Astrid-

Parpadeando asintió mientras Storm Fly y Cloud Jumper los seguían fuera de la aldea. -Sabes lo mal que lo lastimaste, ¿verdad?-