ME ENAMORÉ DE UN NIÑO

CAPITULO 14

-Soledad?--dijo y me miró como si lo estuviera persiguiendo.

-Danilo, juro que no tenía idea que viajabas en la noche y mucho menos en esta aerolínea.

-No te preocupes, es una gran coincidencia ¿puedo?--se refería a sentarse a mi lado.

-Si claro.--dije

-¿puedo saber a dónde vas?

-Voy a quedarme en un hotel en Las Bahamas

-En serio? Eso significa que estás de vacaciones

-SI! quiero olvidar un poco lo que ha pasado.

-Te felicito, viajar cambia un poco nuestra manera de pensar y de vivir. Espero que nos encontremos por las calles de la ciudad.

-¿donde irás tu?

-Como te dije, tengo un negocio que cerrar y bueno....yo no me quedaré en un hotel, tengo un departamento allá y es ahí donde estaré. Te lo ofrecería pero temo que seré mal interpretado.--dijo y me asombró su manera de ver las cosas.-- ¿qué pasa? ¿por qué pones esa cara?

-Es que te veo y realmente admiro tu madurez. Pareces ése tipo de hombres que espera una señal para dejar escapar todo ese fuego por dentro.

-jaja. ¿eso es malo?

-entonces estoy en lo cierto?--dije y reí

-Es que detestaría mal interpretar situaciones y quedar como un loco acosador o algo así.

-Ay Danilo! Me cuesta creer que no tengas novia. Al menos debes tener alguna pretendiente

-Las tengo sí, pero no puedo tener algo con ellas.

-Si las ves desnuda las vistes? Asi es como pienso que harías tú.

-Oh no Soledad! Por favor no me veas de esa manera, tampoco soy un santo. Soy hombre y como todos tengo mis debilidades y mis placeres pero prefiero alejarme de los sentimientos cuando se trata de alguien que espera más que sexo conmigo.

-Ves? Me sigues sorprendiendo. La mayoría de los hombres no distinguen entre amor y deseo y mucho menos se detienen a analizar si una mujer los ama o solo los desea. En cambio tu sí lo haces......o al menos éso es lo que me quieres hacer creer

-¿cómo dices?

-Oh vamos Danilo! Has estado interesado en mí y estás al tanto de lo que ocurrió con el imbécil de Sam. Estás creando una buena historia para que yo caiga en tus brazos.

-No no!

-Si es asi dimelo, yo ya no tengo reparo en hacer el amor contigo.

-No Soledad! Lo que dices no es nada cierto, yo no quiero aprovecharme de tu situación para sacar ventaja, de ninguna manera. Tampoco me estoy inventando una historia, sinceramente me duele que pienses así pero respeto. Con respecto al hacer el amor contigo, claro que lo deseo pero no así.

-¿asi como?

-Despechada, no quiero hacer el amor contigo justo en el momento en el que el corazón se te está cayendo a pedazos.

-A mi no se me está cayendo nada a pedazos, dejame informarte.

-Soledad! Libera tu dolor, si lo reprimes te enfermarás, te lo puedo asegurar. Yo quiero contigo mucho más que sexo. Quiero tener una familia contigo, se que suena cursi pero es lo que sueño. Te veo y mi mente empieza a imaginar cosas, cosas de familia.

Bajo la mirada porque me arrepiento de no haber aceptado a Danilo antes.

-Discúlpame Danilo, no debí tratarte mal. Eres muy bueno para mí.