Capítulo Once.

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No diré que es un día como otro, porque no lo es.

Mis padres me dejaron a cargo de Renatha ya que ellos saldrían de la ciudad para visitar a la tía que al parecer quiere ver cosas de su boda y bla bla bla. Lo único bueno sería que no iría a la escuela y creo que es bueno, porque no vería a Jaeden después de lo de anoche aunque sería una madre irresponsable y no...

—¡____! ¿Ya está mi desayuno?— Me grito Renatha.

—Si. Ya está.— Dije para después darle su plato.

—Mamá no tarda tanto como tú.— Me dijo para después comenzar a comer. Ya había escuchado muchos comentarios así de ella durante todo el día, así que solo me resigne a bufar.

(...)

—¡Millie que bueno que llegas! Ya no soportaba a Renatha. Se queja de todo y ya no la aguanto. Es mi hermana, pero es súper fastidiosa, nunca había estado tantas horas con ella.— Abracé a Millie.

—Mira, yo te ayudo a cuidarla, tu ve.—

—¡Gracias Millie! Pero, ¿ah donde se supone que voy a ir?— Entonces Jaeden estaba justo enfrente con una sonrisa.

(...)

—¿Entonces...?— Dijo Jaeden.

Estabamos sentados en el sofá justo en frente de la TV viéndonos a través de ella porque al parecer los dos estábamos igual de avergonzados.

—Creí que ya se habían ido. No los e eschado como mínimo saludarse. Y para tu información.— Millie me señaló.— Renatha esta entretenida viendo un programa. Y no la distraje para nada si ustedes solo están sentados como idiotas frente al televisor.—

—Millie...— Estaba a punto de hablar y me interrumpió.

—Quiero que me digan lo que pasa ya. Porque no quiero empezar a jugar a las deducciones.—

Millie era como una madre de 17 años.

—Bien. A ver, Jaeden siempre te está buscando hablando o llamando tu atención, justo hoy no lo hizo como otros días. Tu, estás más sonrojada de lo normal, bueno Jaeden también, pero menos que tu. Lo que me da a entender que ayer paso algo entre ustedes, porque no creo que tenga vergüenza porque si.—

—No paso nada, todo sigue igual ¿no es así, Jaeden?— Le pregunté a Jaeden.

—Si. Todo igual.— Dijo el sonriendo.

—Bueno, si es así, pueden irse a donde ustedes quieran. Yo cuidaré de Renatha.— Ninguno dijo nada.— Bueno yo me iré con Renatha, pero yo les diré que hacer exactamente.—

Millie fue por Renatha.

—Se quedarán aquí, van a preparar la cena y se harán preguntas, absolutamente de lo que sea, pueden ir al supermercado si es que algo les falta y listo. Es todo lo que harán, sus preguntas pueden ser las que sean.—

—¿Tenmos otra opción?— Pregunto Jaeden.

—Sí, cuidar ustedes dos a Renatha.—

—No. Puedes llevartela ya tengo suficiente con la harina.— Ella salió.

—Bueno tenemos que hacer la cena.— Dijo Jaeden.

—La pediremos por internet o llamaremos a algún lugar.—

—Bueno, entonces am...—

Ninguno sabía que decir.

—¿Quieres ver a la iguana?— Le pregunte y el asintió así que fuimos a mi cuarto. Ya le tenía un lugar donde vivir así que aún no tenía nombre.

—¿Sin nombre?— Preguntó.

—Sí. Se me ocurrió Thor.—

—¿Cómo el superhéroe?—

—Sí, como el Dios del trueno. Su color más abundante es el azul y relacione el azul con un trueno aunque se que no tiene nada que ver. En fin, se llamará Thor.—

—Que buena lógica.— Dijo sonriendo.

Nos volvimos a sentar. Cuando lo miraba recordaba justo lo mismo que sucedió anoche y por mi mente llegaba a rozar la loca idea de repetirlo. Aunque sabía que no lo haría.

—Oye. No quería incomodar más el momento.— Me miró y por primera vez en su corto tiempo aquí lo miré a los ojos.— Pero ¿Qué te parece olvidar lo de anoche?—

—Y lo de hoy.— Le dije.

—¿Esta platica?—

—Sí, esta claro que eso.—

—De acuerdo.— Ninguno dijo más. Solo recorrimos con la mirada el cuarto.

—Nunca lo voy a aceptar, y lo vamos a olvidar así que...— Lo tome del cuello de su playera para darle un casto beso. Me miró sorprendido.

—¿En serio lo olvidaremos?—

—Sí.—

Estaba vez el beso fue iniciado por el. Este claramente duró más, sus manos ya se encontraban en mi cintura y las mías estaban alrededor de su cuello abrazandolo.

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Holaaaa

Oigan les tengo dos opciones.

Quiero hacer un "Gritos felices" aqui pero implicaría que no comenten nada durante esas partes o borrare los comentarios.

O la segunda que sea un cap normal  donde comenten libremente.

No hago la primera opción por mala onda sino que me da mucha pena y me daría más si lo comentan JAJAJA, así que decidan.

LAS AMO.

BAI.

Cliché. (Jaeden Martell y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora