—oh muchas gracias por traerlo. Que pena contigo, te pido una disculpa por el.— Dijo su madre de Jaeden, Ángela.
—Si, no se preocupe. Pero debo ir a casa, am..—
—No. Quédate aquí, ya es muy tarde y no quiero exponerte a los peligros de afuera.—
—Muchas gracias.—
—Es lo menos que podría hacer.—
(...)
Ayer les había llamado a mis padres par avisar y no tuvieron algún problema ya que Ángela me ayudó a convencerlos.
Justo ahora miraba el techo, estaba aún lado del cuarto de Jaeden y no sabía que iba a hacer cuando el preguntara sobre el beso de ayer, iba a evitar a toda costa el tema y probablemente me haga la enfadada con el.
(...)
La verdad es que me había llevado muy bien con Ángela. Ella era muy amable y carismática, creo que me había hecho amiga de mi suegra.
Jaeden estaba frente mío y su cara solo me reflejaba su sufrimiento. Sus manos estaban en su frente y mantenía los ojos cerrados con fuerza.
Por una parte estaba feliz y decía: "A ver si sigues de canijo" y por la otra parte si me daba dolor verlo así.
—Tomate esto, Jaeden.— Ángela le dio una pastilla junto con una taza.—Bueno, los dejaré hablar.—
Ella se fue.
Jaeden solo me miraba y yo sentía que mi mirada solo lo estaba asustando aún más.
—Se que hice algo malo. Por favor no me lo recuerdes.—
—No lo estoy haciendo. Además nunca dije que hiciste algo malo.—
—Tu mirada me lo está diciendo y me siento fatal. Justo ahora no estoy en las mejores condiciones. Solo recuerdo que estaba en la fiesta y tu llegaste.—
—Sí. Y nunca más te rescatare de nuevo. Quería pedir disculpas pero no contaba con tener que sacarte de una fiesta en la que solo te estaban alcoholizado.—
—Yo no contaban con mejeterme al.equipo.—
—Eso es lo de menos.—
—¿Fuiste al museo? Talvez podamos ir hoy.—
—Sí. Lo hice virtualmente. Solo me quedé para asegurarme de que estarías bien. Y ahora que lo sé me puedo ir.—
— Oye no. Espera, lo siento...— Lo interrumpi.
—La cosa está asi: Estoy enojada y no creo que sea lo más conveniente que hablemos así. Entonces, sal con tus amigos, desayuna tranquilamente y no lo sé...pero am creo que volvemos a hacer amigos.—
—Siempre lo hemos sido.—
—Comenzamos a hacer algo más que eso y se terminó.—
—¡Oye! No puedes jugar así conmigo y luego simplemente decir que no.—
—Tu tampoco puedes hacerlo.—
—Yo siempre te e estado rogando. Me e preocupado por ti y tu nunca lo valoras. Parece que solo piensas en ti.—
—Tienes razón.—
—Y sobre mis amigos de Básquetbol. Se que diacutiste con una chica y luego me besaste. Ella me gustaba, supongo que gracias por arruinarlo.—
—¿Eso significa...?— Me interrumpió.
—Que ya no te metas en lo que no te importa y que puedes irte ya y no tienes que preocuparte más por mi, puedo cuidar de mi mismo.—
(...)
Justo ahora me sentía muy culpable. Era cierto que si me mentía en cosas no relevantes a mi y probablemente si haya estado siendo muy egoísta.
—¡Hola!— Llegué a la casa.
—Hola ____.— Dijo sonriendo Renatha.
—Bueno, tu no lo sabes pero eres justo lo que necesito ahora.
Renatha logró recuperar en cierta manera mi tarde. La pasamos juntando con muñecas y al "té". No había prestado atención a lo genial que podía llevarme con Renatha.
Cuando ella se cansó de jugar. Tuve un tiempo para pensar:
No debería sentirme mal por lo que pasa con Jaeden. Se que lo lastime al siempre rechazarlo, pero prefería hacer eso a ilusionar lo y cuando comenzábamos relativamente bien ambos destruimos la construcción y sabía que había hecho las cosas bien. Pero igualmente ese sentimiento no se iba. No sabía como arreglarlo. Incluso no sabía si tenía las ganas de hacerlo.
~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~
Hola
Am, pues la verdad es que estoy un poco triste (es lo de menos) pero por si acaso las amo ❤ mañana tengo firma de boletas y no es que haya salido mal, pero sque 8 en muchísimas materias. Cuando suele ser un 9. En fin, (el rango de calf en México, en secundaria es de 5 [reprobado] a 10)
Bueno, si quieren cuebtenme cosas buenas de su vida o las malas también, no importa, las estaré leyendo y contestando les.
Las amo mucho ❤
Bai.
ESTÁS LEYENDO
Cliché. (Jaeden Martell y tú)
FanficCliché. -Tienes que entender que yo no soy una de tus princesitas a las que les gustan las rosas y los carteles cursis.- No copias, no adaptaciones.