Estuve todo el camino en el hombro de este Neanderthal, mi cuello comenzó a dolerme desde hace metros pero ya no importa en cuanto me recupere y coma claro, saldré corriendo de aquí para ir con mi hermano.
–Ya llegamos–dijo Alan con su tono de no tengo emociones–
–Entonces..... bájame–le dije mientras intentaba quitarme de su hombro–
–Si sigues moviéndote así harás que tus heridas empeoren–me vale un cacahuate tu opinión–
–No importa!–comencé a patearlo de nuevo–
Deje de hacer mi berrinche para cuando entramos a una gran mansión, esta cosa es más grande que mi casa, son como ocho casas.
Alan la me bajo con cuidado, mientras yo miraba la casa maravillada, entonces ahí fue cuando el me tomó de la cadera para atraerme a su cuerpo, dándome un susto de muerte.
–No me has dicho tu nombre–susurro el en mi oído–
Haciendo que me estremeciera y lo alejara para quedar en frente de él y decirle.
–Mi nombre es Kira Isabel González–dijo ella sin hacer un gesto–
Alan me llevo aún cuarto que él mismo me eligió, indicándome que me recostara en la cama lo cual hice y esperara pacientemente al doctor cuando esté aprecio Alan se retiro, el doctor me indicó varios días de reposo, pues la heridas estaban comenzando a sanar bastante rápido, así con ello vendándome los tobillos, cuello y muñecas.
Después de que este se retirara Alan se sentó aún lado de mi pero yo solo me aleje hasta la otra punta de la cama dejándolo extrañado.
–Por que te alejas?–pregunto el con cierto enojo–
Me tensé pero eso no dejará que me abrumara, para nada ya que mi orgullo es más fuerte que mi voluntad.
–No es obvio?, estoy con un extrañó que dice que yo soy su mate su luna o lo que sea–lo mire con algo de miedo y enojo–
–Bueno no importa, tienes hambre?–pregunta ya un poco más calmado–
En ese preciso instante se me iluminan lo ojos y asiento frenéticamente esperando mi preciada comida.
Después de unos minutos que fueron eternos, Alan llega con una bandeja llena de comida había pastel, jugo, chocolate y había una gran torta de carne, se le hacía agua la boca.
Tome la bandeja y comencé a comer como si dependiera de ello, Alan no deja de mirarme lo que hace incomodarme.
–Tengo algo en la cara?–pregunte terminando de masticar un pedazo de la torta–
–No, pero tanta hambre tenias?–pregunta el asombrado ya que había terminado de comer muy rápido–
–Mucha, no comía desde hace tres meses hasta ahora–dije para así tomar del jugo de naranja–
Puse la bandeja en una de las mesitas que están al lado de la cama para acomodarme en esta ya que aún me dolía todo, después de tanto tiempo no había tocado una cama más que el frío suelo de aquel lugar.
Me recosté en la cama ya que todo me dolía, pero me incomodaba tenerlo a él mirando todo el rato entonces pensaba levantarme, pero él se posiciona quedando arriba mío.
–Oye que te pasa?–le dije estando algo furiosa–
–No puedo controlarme–me dice mientras esconde su cara en mí cuello–
–Oye, quítate de encima!–le digo al mismo tiempo que lo empujo pero este es una piedra que no se mueve en lo más mínimo–
–Mia, solo mía–dijo para después pasar a hundirse más en mi cuello y depositar un beso en este–
Diablos es tan seductor este hombre, pero no puedo caer, mi hermano sigue en peligro y yo estando aquí en la cama de este idiota.
–Yo no soy tuya y no soy de nadie–le digo mientras mi enojo aumenta–
–Eres mía lo quieras o no!–salió de su escondite para mirarme a los ojos, los cuales estaban negros en su totalidad–
Me quede algunos segundos contemplando su rostro, es fino y se ve que es suave, sus ojos son negros ahora pero hace unos segundos eran verdes, su cabello negro, tez blanca, unos labios rosados y un cuerpo de dios griego, es hermoso.....
Y volviendo a la realidad el me toma bruscamente del cuello para unir nuestros labios, pero que!?.
Sus labios comienzan a moverse suavemente mientras que los míos hacen lo mismo, oh rayos esto no puede ser verdad, en el momento en el que me beso una corriente eléctrica paso por todo mi cuerpo.
Bueno que más da..... acepto el beso gustosamente aunque sé que no lo hago a la perfección ya que es mi primer beso, sin darme cuenta su lengua entra en mi boca para recorrerla a su gusto y es entonces cuando nuestras lenguas pelean entre sí para saber cual es la dominante.
El beso para por la falta de aire me separo de él y mi cara está ardiendo y de seguro estoy roja como un tomate entonces vuelvo a reaccionar y toco instintivamente mis labios.
El me mira con una sonrisa ladina mientras que yo evito su mirada.
–Yo lo siento, no sé qué me ah pasado–dije algo nerviosa cubriendo mi cara entre mis manos–
Entonces el toma mis manos y las besa.
–No tienes por qué disculparte, es normal que tu cuerpo reaccione así cuando te toco–me mira para volver acercarme a el–
Se siente extraño pero..... me siento bien con el, me siento...... protegida de nuevo como antes, en los brazos de mamá.
El planta cuidadosamente un beso en mi cabeza para soltarme y salir del cuarto, ah sido esto muy extraño pero no puedo decir que lo amo apenas lo conozco, quizás si lo conozco mejor...
Ya es de noche, hace tanto no veía la luna....
–El te ama Kira, así como tu lo amas a él–dijo aquella voz en mi cabeza, ya estoy alucinando rayos–
Antes de dar una última mirada a la luna logro ver algo desde el balcón, unos ojos rojos me miran desde el bosque, entro de nuevo en pánico y tomó mi collar entre mis manos para después pasar a cerrar la ventana corrediza que daba con el balcón.
Son ellos?, los que me tenían "Entre Cadenas"?.
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ENTRE CADENAS (SIN EDITAR)
AventureHabía escuchado las frases "Todo en un día puede cambiar" pero no creía que realmente pasaran o al menos no a mi. Mi vida que había creído normal, resultó de todo menos eso, un gran peso sobre mis hombros se cierne sobre mi y la sombra de dos criatu...