En Busca De La Sumisa Perfecta [Camren AU] ✔

Capítulo 5

Lauren:

Chloé me analizó, en sus manos llevaba una humeante taza de café, yo en cambio, bebía té helado, sonrió, ¡bien, me creyó!

- Te propongo.... -Sonrió de medio lado, su semblante era dudoso, tenía un frívolo plan en mente, y eso no era bueno-... una apuesta.

- Te escucho... -Ella más que nadie sabe que no logro rechazar una apuesta.

- Te doy TODA mi mesada, más mi sueldo de tres meses en Starbucks, por enamorar a esa chica, y romperle su corazón, ilusión o esperanza por el amor... -Mis ojos se desorbitaron, ¿qué estuvo criando su madre? - ¿Aceptas? Se nota que la sumisión por ti es total, no se te hará difícil....

- ¿Qué si pierdo?

- Además de perder tu dignidad al enamorarte y someterte a alguien que te mira hacia arriba... -apoyó su dedo índice en su barbilla-. Serás una pasiva de mierda toda tu vida...

Reí - ¿Y como te darás cuenta que cumplo con la apuesta, eh... chica lista?

Me miró sería, demasiado para mi gusto. -Créeme, lo sabré.

Esa noche no logré dormir, joder... ni un poco. Creo que la cagué. Mierda, claro que la cagué al aceptar está puta apuesta... no puedo jugar con alguien tan inocente como Camila, creo que he jugado mucho con mucha gente, pero... siempre es tiempo de arrepentirse, ¿o no?

Por otra parte, pienso que no quiero ser una jodida gallina-pasiva-idiota...

Mi lado bueno es más, mañana hablaré con Chloé, aunque me mande a la mismima verga, me importa una mierda, ¿sería capaz de lanzar años de amistad a la mierda por "atracción"? Sí, no quiero hacerle daño, además que... creo que lo que dijo el enfermo de su mejor amigo, lo confundió, ya que luego de eso, no quiso darme un beso, en toda la tarde...

Camila:

Esta noche me quedaría en casa de Dinah, extrañaba tanto a la imbécil esta... también a su familia, siempre fui recibido bien aquí, estábamos en su habitación, era femenina y espaciosa, me gustaba mucho.

- Bebé, pareces conejo encandilado... ¿qué ocurre? -Bromeó Dinah.

- Tais-toi imbécile-Respondí en francés, noté su molestia y sonreí con suficiencia-. Sólo bromeo Di.

Rodó los ojos y me golpea fuerza sin fuerza, suelto un quejido para que asi se sienta mal -Sabes que odio ese mote, bebé.

- Púes yo odio "bebé" -alcé mis dedos como unas comillas-, y aún así lo usas, joder... -Bufé.

- Pero a ti te viene... -alcé una ceja esperando a que continuase-, me refiero a, tú eres tan puramente adorable, que... aww, eres un bebecito. -Besó mi mejilla estrechándome entre sus delgados brazos.

- ¿Por qué la gente cree que puede etiquetarte de la puta manera a la cual se le antoja? -Le miré inquisitiva, no quería, joder no quiero seguir llamada "adorable", pero me nace-. ¡¿A quién jodidos le importa si soy adorable o no?!

- Perdón Karla, olvidé cuanto odias que la gente RECALQUÉ -dijo haciendo énfasis en esa palabra 'recalcar'-, que eres adorable... por que, mierda, ¡Lo eres!

- ¡Juguemos de una re putísima vez, ¿quieres?! -Asintió, y nos acostamos, yo entre sus piernas, le entregué el joystick color negro y comenzamos una partida de PES.

Joder, Dinah no puede ser peor jugando esta mierda. Ya me cansé de gritar '¡goool!' en su cara, ahora estábamos acostados a la par, cualquiera que nos viera pensaría que somos pareja, pero no. Es una puta sobreprotectora, y la amo, a la vez la odio.