ʙɪᴏʜᴀᴢᴀʀᴅ ≪ ʟᴇᴏɴ ꜱ. ᴋᴇɴɴᴇᴅʏ x ______ ≫.

Capitulo 3.

      Algo me saco de mi viaje por el pasado, la sonrisa que se formo al recordar buenos tiempos se esfumo al ver el caos en el que estaba sumergida la ciudad de Raccoon, casas en llamas, vidrios rotos y muchas más de esas criaturas perturbadoras rondando las calles de este infierno.

      Un gran estruendo se escucho detrás nuestro, eso era ¿Un camión? el vehículo se dirigía a toda velocidad contra nosotros, tratamos de salir a toda prisa del coche ¡Mierda!, una de las puertas estaba atascada, no quedo mas opción la patee lo más fuerte que pude rompiendo el vidrio.

      Caí junto a Claire en el frió suelo, el camión choco con el coche haciendo una gran flama y la explosión no se hizo esperar, me estrelle en una pared llevándome un buen golpe, Claire estaba tirada en el piso, me acerque para ayudarla a levantarse.

      La tome de la mano para comenzar a correr no sin antes escuchar a Leon decir que nos reuniríamos en la estación de policía, esas cosas nos perseguían sí que era un infierno, recorrimos algo que parecía ser un callejón con la lluvia aun cayendo sobre nuestras ropas.

      Encontramos una entrada a la estación, primero entro Claire y luego yo, si afuera era un desastre dentro era peor, nos encontrábamos en la recepción, entre en algunas habitaciones sin llevarme sorpresas, hasta que escuche una voz.

─ Agente Samuels, manos donde pueda verlas.- Musite mirando al Agente herido sobre una silla, corrí hacia el viendo mejor su condición ─ Oh por dios, ¿Que ha estado ocurriendo aquí?.- Solté algo aterrada.

      Con mis manos palpe su herida era profunda y la sangre no dejaba de salir, sus ojos se cerraron del dolor mientras jadeaba, trate de hacer un torniquete alrededor de su cuerpo pero no ayudaría de mucho si seguía desangrándose de esa manera.

─ No se esfuerce, buscare algo para curarle.- Dije mirándolo, busque por algunos de los bidones de la habitación, sin encontrar más que vendas y pequeñas curitas.

      Una mano en mi hombro me hizo voltear, ese hombre no era el mismo de antes, su cara estaba podrida él era una de esas cosas, se abalanzo contra mi tratando de morderme lo patee en el abdomen alejándolo de mi.

      Tome mi arma esta vez sin temblar, cerré un ojo tratando de apuntar de la mejor manera, jale el gatillo y el sonido hueco del cuerpo cayendo lleno el lugar, lo único que salió de su boca fue un "Sálvate" muy mal articulado para luego caer por completo, mi mano se posiciono en mi boca pero un sollozo se escapo, la idea de haber matado a alguien me carcomía.

      Revise rápidamente el cadáver encontrándome con una llave que tenia las inscripciones "SC 002" y una que otra bala, pase por la puerta que estaba a mi espalda según el desgastado cartel estos eran los vestidores.

      Tome una chaqueta del cuerpo de policía con las letras RPD colocándomela encima de mi camiseta negra, tome un par de botas que me llegaban al tobillo intercambiándolas por las zapatillas que tenia, tome mi cabello en una coleta alta y antes de salir de la habitación tome una linterna en mi mano izquierda.

      Trataba de recordar el protocolo de que hacer en estos casos pero ¿Que debería hacer? Hay personas enfermas por todo el lugar, son agresivas y vienen en grupos bastante grandes, pensé unos segundos repitiendo las palabras de mi padre en situaciones de rehén, "Buscar supervivientes y luego una salida" paso fugas por mi cabeza.

      Salí a la recepción apuntado a todos lados buscando a Claire con la mirada pero ni señales de vida me daba, busque por todos lados pero nada ¿¡Donde se había metido!? Comencé a caminar por pasillos sigilosamente tal vez esta llave me lleve a algún lado.

      Algunos pasillos carecían de iluminación, temblé al escuchar el terrible sonido de las ventanas ser azotadas por esas "Personas" ¡Romperán el cristal! Tome en mis manos algunas tablas de madera del suelo trabando la ventana, si esas cosas llegasen a entrar serian mas enemigos con los cuales combatir.

      Mirando puertas algo viscoso cayó en mi mejilla, subí mi mirada, una criatura sin cráneo con el cerebro a flor de piel estaba sobre mí, los latidos de mi corazón se detuvieron por algunos segundos, un gran estruendo al final del pasillo llamo su atención haciendo que se moviera rápidamente hacia el sonido dándome la oportunidad de entrar en la puerta más cercana, esto estaba hecho un manicomio.

      Pantallas azules resplandecían sobre mesas de madera, me acerque a una entrando sin problemas al sistema de cámaras de seguridad, mi vista paseo por algunas grabaciones pero no veía a mis compañeros solo escuchaba los horribles gemidos que provocaban esas cosas al caminar.

─ ¡Maldita sea!- Grite golpeando una de las pantallas, las lagrimas amenazaban con salir de mis ojos la desesperación comenzaba a consumirme ─ ¡Leon! ¡Claire!-