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La luz de su lámpara se apagó. Maldijo el no haberla revisado antes o al menos llevar baterías extra, así que acogió el libro en mano y se dirigió de nuevo a casa.

Trató de pasar desapercibido en la sala pero le fue imposible cuando su padre salió abrazarlo de manera agradecida mientras lanzaba un suspiro feliz porque al menos su hijo había salido de la cueva.

-Estas más delgado, ven, vamos a comer; Jimin a preparado algo para nosotros.

-Vale, solo déjame ir a lavarme la cara. - dijo mientras se safaba de los brazos de su padre yendo a caminar escaleras arriba.

Depositó el libro en la mesa de noche para bajar al comedor, no tenía hambre pero tenía que hacer un esfuerzo por su familia.

Se encontró con su abuelo quien metía un poco de algas a su boca viéndolo seriamente.

-Estas muy delgado jovencito, si sigues así vas a morirte tu también. - Jungkook sintió aquellas palabras dar un vuelco a su corazón haciéndole doler en demasía. Pero era su abuelo y sabía que lo decía por su propio bien. - Si no comes, voy a meterte a fuerza la comida a la boca.

-Sí, abuelo.

Jimin llegó con los platos junto a su padre y todos se dispusieron a comer. Sin duda alguna el ambiente estaba un poco simple, pero era razonable porque desde que murió su madre ya nadie hablaba. Parecía que lo dulce de la vida se había ido junto con ella dejando solo un sabor amargo en la casa.

-He hablado al colegio y dicen que puedes volver la próxima semana, Jungkookie. -  Jimin sonrió pequeñamente mientras se servía un poco más de arroz del tazón.

-No sé si... realmente quiera volver. - soltó Jungkook, sin despegar la vista del plato, jugando con un esparrago.

-No puedes perder el año o vas a retrasarte.

-Lo intentaré. -respondió forzando una sonrisa.

El resto de la comida fue silenciosa, a ecepción del sonido de los cubiertos chocandose entre sí. Jungkook hizo una reverencia para sus mayores y salió disparado a su habitación.

Tomó una camisa vieja del cesto de la ropa sucia y sacudió el libro empezando a hurgar en el.

Para resucitar a un ser necesitas:

1 lienzo de ramiro.
2 huevos crudos.
1 bote de alcohol.
1 pentagrama pintado de blanco en un fondo negro.
5 ramas de ruda.
Cinta aislante abundante.
1 cuchillo.
1 olla pequeña.
1 fogata.

Pasos:

1. Colocar el pentagrama cerca de la tumba de el ser que desea revivir o al menos cerca del cadáver.

2.En cada esquina del pentagrama deberá poner la rueda que irá bañada en alcohol.

3.Con la cinta aislante dibujará la palabra "Death".

4. Poner la olla en la fogata  depositar el líquido de los huevos, junto a 5 gotas de sangre de la personas que intenta realizar la resurrección como sacrificio y el lienzo de ramiro al final.

5. Por último recitar el juramento que viene a continuación.

Se le dificultaría un poco conseguir los materiales, pero tampoco sería algo imposible. Tomó su mochila y salió de casa.

Cómeme • [Kookgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora