Juegos secretos

Traición

Me despierto como cada mañana en la habitación de mi residencia. Consigo salir de debajo del pesado brazo de Sam. Llevamos casi dos años juntos, más o menos los mismos años que llevo estudiando aquí. Su pelo rubio enredado marca un gran contraste contra mi melena castaña que ahora mismo está tan revuelta que no consigo domarla.

Me quiero quedar más tiempo en la cama pero le prometí a Alexis que quedaría hoy para desayunar con ella. Me ducho rápido y me aplico un poco de maquillaje para que mis ojos marrones no parezcan tan hundidos entre mis ojeras.

—Hey, me voy ya — le doy un pequeño beso en los labios a Sam que abre los ojos lentamente.

—¿Adónde vas? Vamos quédate, no tienes clase hasta dentro de dos horas.

—Le prometí a Alexis que iría a desayunar con ella

—Vale pues te veo luego —se da la vuelta secamente y sigue durmiendo, siempre que nombro a Alexa pasa igual. Él dice que son cosas mías pero mi novio y mi mejor amiga no se llevan nada bien. Me resigno y salgo de la habitación.

Recorro los grandes pasillos de la residencia hasta que llegó a la cafetería, detecto el rubio moño desenfadado de Alexis y me acerco a ella.

—Llegas tarde, pero bueno, te perdono —Alexis me sonríe y nos damos un abrazo.

—Lo siento casi me quedo dormida con Sam

—Oh, ¿lo viste anoche?

—Si se pasó por mi cuarto sobre las 11, venía de alguna fiesta pero quería dormir conmigo.

—Qué adorables sois, en fin, ¿Has pensado de que hacer el trabajo de arte contemporáneo? Porque no tengo ni idea.

Continuamos hablando y comiendo hasta que tenemos que irnos, hoy sería un día largo. Las asignaturas más pesadas se juntaban todas hoy y solo podía pensar en acabar y irme a la cama. Por culpa de Sam apenas dormí anoche pero se las haría pagar.

Al acabar todo lo que tenía que hacer volví a mi dormitorio, Sam ya no estaba pero me había dejado una nota.

Me voy que tengo clases, pasaré sobre las 8 y vamos a cenar algo. Te quiero.

Tenía tiempo de sobra para hacer tareas y dormir algo antes de que llegara.

Un ruido ensordecedor me despierta ¿Es mi alarma? Miro al móvil que no deja de sonar y veo en la pantalla el nombre de Alexis. Lo dejo sonar, estoy demasiado dormida para contestar. Reviso mi móvil y veo que tengo 10 llamadas perdidas de ella. Que raro, luego la llamaré cuando pueda pensar con más claridad.

Falta media hora para que llegue Sam así que me pongo a leer algo ligero hasta que llegue. De repente el móvil me vuelve a sonar y es Alexis otra vez.

—¿Qué pasa que no dejas de llamarme como loca? -No escucho nada al otro lado, solo a Alexis respirando fuerte.

—Claire... baja.

—¿Cómo que baje? - su tono de voz me pone nerviosa, jamas está tan seria.

—Escucha hay... hay algo en el tablón de anuncios que tienes que ver. Date prisa. - Me cuelga el teléfono tal cual.

No entiendo nada pero parece serio. Bajo corriendo y noto una sensación extraña que me revuelve el estómago. Todo el mundo me está mirando. Algunos son más sutiles que otros pero es obvio que algo pasa. Un grupo de chicos pasa a mi lado riéndose y señalándome sin ningún pudor. Noto el pánico creciendo en mi, me siento como cuando estaba en el instituto.

Me acerco al tablón de anuncios y hay una multitud agrupada que me impide ver nada. Me aproximo y todos otra vez empiezan a mirarme, me abro paso entre ellos y llego a Alexis. Se da la vuelta y me mira con expresión de pánico.

Miro detrás de ella y el estómago se me cae a los pies , el tablón de anuncios está empapelado de fotos mías. Fotos mías desnuda o con ropa interior. Las reconozco todas, son fotos que me he sacado y he enviado a Sam en nuestra intimidad. Solo las ha visto él y nadie más. Siento que voy a vomitar y me abalanzo sobre las fotos y empiezo a arrancarlas.

—Claire espera - Alexis trata de pararme mientras todo el mundo se ríe como si fueran adolescentes.¿Pero qué les pasa?

— ¡Déjame y ayúdame a quitar todo esto! - Sigo arrancando todo con violencia pero hay cientos de fotos.

—¡Para, mira! - Alexis señala a la esquina del tablón donde hay un folio blanco con texto en el. Me acerco y lo leo.

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Ahora si que voy a vomitar, no entiendo nada de lo que está pasando. Cojo el móvil rápido y entro en la página. Las mismas fotos del tablón y un par de ellas más aparecen todas en la página. No quiero ponerme a llorar delante de todo el mundo pero las lágrimas amenazan con aparecer.

—¿Quién me haría esto? - Alexis se acerca y me abraza.

—No lo sé, ¿quien tenía estas fotos a parte de ti?

—Sam pero... él no puede haber hecho esto.

—¿Estás segura?

—¡No tiene ningún motivo! —Me acerco al tablón otra vez mientras arranco el resto de fotos que quedan -¿Sabes si hay más por ahí?

—Aparte de las de la página no he visto más — Alexis mira severamente a un grupo de personas que no deja de reírse y estos se alejan cuchicheando.

—Oye mira el lado positivo, al menos sales genial en las fotos.

—¿Estás de coña verdad?—La miro con expresión enfurecida.

—Lo siento solo quería hacerte sentir mejor y... — Para en seco de hablar y mira detrás mía, me doy la vuelta y veo a Sam que se acerca corriendo.

—¿Es verdad lo que me han dicho? —se dirige enteramente a mí aunque le dedica una pequeña mirada de odio a Alexis.

No puedo evitarlo con él aquí delante y estallo a llorar. Alexis lo pone al día de todo y le enseña la página. Puedo notar que está cada vez más enfadado mientras navega por la página. Decido romper el silencio:

—¿Has sido tú? —Lo miro a través de las lágrimas , no sé ni porque lo estoy acusando pero nada tiene sentido.

—¡Por dios no! —se acerca a mí pero me alejo instintivamente.

—Eres el único que tenía estas fotos y lo sabes.

—¿Porqué haría algo así? ¿Crees qué quiero que los demás te vean así?

—Chicos creo que es mejor que vayáis al cuarto, nos está mirando todo el mundo - Alexis se despide de mí y nos dirigimos al dormitorio en puro silencio.

—Claire sabes que no tengo ningún motivo para hacer algo así.

—¿Le has enseñado las fotos a alguien alguna vez? ¿Quizás a algún amigo para presumir de chica? — mi voz destila odio pero ahora mismo no puedo sentir otra cosa.

—No Claire, te lo juro.

—Pues vete pensando si tienes que decir algo porque voy a llamar a la policía.

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