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Lex escuchó un retumbar proveniente de las paredes de la pirámide que se encontraba en ese momento. La criatura a su lado la empujó hacia atrás con él cuando una losa se estrelló desde el techo y aterrizó frente a ellos bloqueando la llegada del tesoro de Aliens que se acercaba a ellos. Lex podía escuchar sus chillidos y gemidos de frustración desde su lado de la losa mientras sus garras resonaban en la losa de la roca.

Preguntándose dónde estaba ahora, principalmente por miedo, encendió su rostro y se dio cuenta de que estaba atrapada en un callejón sin salida con una criatura sádica de otro mundo que disfrutaba matando criaturas de otros mundos por la pura emoción.

Lex murmuró sarcásticamente, "Gran idea que nos hayas encerrado aquí". [Esto se cita directamente del libro, así que doy crédito a Cerasini el autor]

El Depredador pareció gruñir una respuesta antes de comenzar a quitarse su armadura quemada revelando mucho de su cuerpo reptiliano.

El Depredador al que Lex había llamado Scar se fue a un rincón de los alojamientos estrechos que él y el humano ahora compartían. Scar estaba extremadamente infeliz y se puso a trabajar cortando pedazos del alienígena muerto que yacía en el medio de la habitación. No le gustaban los ojos del humano sobre él como si lo analizara.

Soltó algunos ruidos por frustración y tiró una parte de su sistema de calefacción / refrigeración que estaba dañada y el humano la agarró y comenzó a pasar sus dedos por ella. Scar estaba feliz de que el molesto humano ahora tuviera su atención en algo diferente a él y continuara trabajando en silencio.

Scar siguió mirando rápidamente a la hembra humana mientras desarmaba el cuerpo alienígena pieza por pieza. Era mucho más valiente que las otras criaturas de su pequeña raza y no parecía temer a la muerte como sus semejantes. También había matado a uno de los demonios negros, un truco fácil para un Depredador ordinario.

Lex se había acercado al Depredador y lo observaba atentamente mientras ella procedía a sentarse a su lado. Inesperadamente para la criatura a su lado, ella extendió la mano y lo agarró del brazo. Scar bajó la mirada hacia su mano en su brazo y luego a su rostro, que tenía una mirada inquisitiva en su rostro.

Un gruñido bajo reverberó a través de su garganta y ella inmediatamente retiró su mano de su brazo. Continuó trabajando en el Alien antes que él y luego procedió a ver qué parte del Alien sería útil como armadura para el humano porque la exo caparazón del alienígena era una armadura perfecta para defenderse de su sangre ácida.

Después de eso, el Depredador presionó algunos símbolos y la losa se levantó. Luego, lado a lado, humanos y Predator salieron a combatir a los malvados demonios negros.

Continuará . . .

Atrapado en una pirámideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora