El libro de tu mama en tanga

Tu te escondes yo te busco

Un día, mientras mis padres estaban fuera, yo estaba cuidando a mi hermano pequeño. Estábamos solos en la casa y decidimos jugar a las escondidas. Cerré los ojos y conté hasta veinte, mientras que mi hermano corrió a esconderse. Cuando terminé de contar, empecé a buscar a mi hermano, pero no lo pude encontrar en cualquier lugar. Con el tiempo, me fui a la habitación de mis padres y me di cuenta de que la puerta de su armario estaba entreabierta.

"Sé que estás ahí!", Grité mientras me ponía delante la puerta abierta. Cuando acerque mi mano al armario, otra mano de inmediato se acercó desde el interior y me agarró por la muñeca.

"Vamos! Te encontré!" Lloré tratando de sacarlo. "Salid de ahí!"

No importaba cuánto le jalaba, él no quería salir. Estaba escondido detrás de toda la ropa y no quería salir. A medida que empecé a preguntarme qué estaba mal con él, oí una voz detrás de mí preguntar: "¿Qué estás haciendo?"

Me di la vuelta y me quedé muy sorprendida al ver a mi hermano pequeño en la puerta. Mirando hacia atrás, me di cuenta de que la mano blanca y pálida todavía se aferraba a mi muñeca. Grité en voz alta y comencé a entrar en pánico mientras trataba desesperadamente de escaparme de sus garras de hielo. Mi hermano corrió a ayudarme y yo finalmente logre escurrirme de sus garras.

Corrimos gritando de la habitación y salimos corriendo de la casa. De pie en la calle junto al poste de luz, esperamos a nuestros padres mientras regresaban. Cuando por fin llegaron a casa, le dijimos a ellos lo que había pasado y subimos a buscar en el armario del dormitorio. Por supuesto, no encontraron nada en el interior a excepción de un montón de ropa vieja.