Paso una noche hace días atrás.
Estaba acostado boca abajo en mi habitación. Mi hijo de 3 años llegó corriendo hacia mi habitación y cerró la puerta corrediza. Pero él no sólo la cerró, él se mantuvo sosteniéndola y tratando de prevenir que se abriera.
Yo: Que pasa?
Hijo: ...........
Yo: Por qué la estás cerrando?
Hijo: Va a entrar.
Yo: Que cosa?
Hijo: El fantasma.
Yo: Que tipo de fantasma era ese?
Hijo: Un hombre.
Yo: Era el terrorífico?
Hijo: El era terrorífico.
Yo: ese fantasma, estaba enojado?
Hijo: No, pero era terrorífico (?
Mi hijo seguía sosteniendo la puerta.
Hijo: Me pregunto si... Él fantasmas seguirá ahí?
Yo: Papá quiere verlo.
Abrí la puerta un poco y tome un vistazo a la entrada. Y entonces cerré la puerta y dije con una cara sonriente.
Yo: No hay nadie ahí.
Hijo: Enserio?
Me: Si. Ahora, quieres ver la TV?
Después de lo dicho, estire mi mando hacia la TV, pero al instante, mi hijo abrió la puerta para tomar una ojeada afuera.
Hijo: Uwaaaaaa...
El cerro la puerta inmediatamente, llego hacia mi llorando y se aferró a mi.
Hijo: El fantasma! Esta enojado. El fantasma! Esta enojado.
Tome su cabeza gentilmente y trate de calmarlo.
Yo: Todo está bien bien. No te preocupes.
Hijo: El fantasma esta enojado. Es mi culpa?
Le aseguré con una sonrisa.
Yo: No, no es tu culpa.
Es cierto. No es la culpa de mi hijo.
En realidad, es mi culpa por qué pretendí no haberlo visto.El primer platillo tiene que ser ligero para abrir paso al apetito...
Listos para el siguiente?
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El libro de tu mama en tanga
TerrorUn libro que te garantiza escalofríos, fríos pensamientos, malos ratos y a veces pesadillas. 98% de lo que leerás es real y el otro será inventado para trolearte. Este libro contiene, historias de terror, rituales, pensamientos obscuros etc.. Espero...