De colores dibujé una sonrisa en una fría tarde de abril, me llené de optimismo y sentí revivir. La respuesta que necesitaba estaba ahí, siempre lo había estado, la encontré escarbando en el pasado y recordando lo que fui. Vi el amanecer y el anochecer del primer día del resto de mi vida, magia y sueños que tenía dentro de mí y que dejé salir afuera y existir. Me reconocí de nuevo en la calidez de mis palabras y las abrumadas marañas de enredos que se habían disuelto, pude descifrar aquello que estaba envuelto y sacarlo a relucir. Me topé con millones de recuerdos que me enseñaron lo que era y, por más que yo supiera, lo que tenía que ser. La fuerza y la garra tampoco la guardé y conmigo vino el temperamento ese que me acompaña desde mis primeros tiempos. La simpatía y la amabilidad para los que me rodean y la indiferencia para los que la busquen y la quieran. Rojo, amarillo y morado, colores que tienen un pasado que yo no puedo ni quiero olvidar, rojo, amarillo y morado, los colores de una bandera que bordó aquella costurera, llenos de orgullo y pesar.
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Los versos que no escribí
PoesíaPoemario que no te dejará indiferente. ¿Querías leer un poema de amor, de desamor, quizá uno más filosófico? espero encuentres aquí aquello que andabas buscando porque la poesía es un bálsamo que nos cura a todos y ese algo en lo que todos podemos s...