-¡Deja de comportarte como si algo malo fuese a pasarnos!
La discusión con tu novio estaba comenzando a llegar a otro nivel de intensidad. La gente comenzaba a miraros, incrédula, más cómo pensaba que sólo se trataba de otra discusión de pareja os dejaba en paz.
-¡No confías para nada en mí!-continuó él-. ¡Siempre quieres saberlo todo! ¡Eres una controladora!
Lo callaste de una bofetada. Inmediatamente, te arrepentiste de haberlo hecho, pero la calor del momento había jugado en tu contra. Te ponía nerviosa que no dejase de gritar. Vale que eso había estado mal: no debías ponerte celosa por esas tonterías. Sin pensárselo dos veces, estiró el brazo para devolverte el golpe. Cerraste los ojos. Al abrirlos, viste que él había dado media vuelta y se había marchado. Te había plantado.
Agachaste la cabeza, sin palabras. Te dolía. ¿Era este el fin de vuestra relación?
Un chico tropezó contigo. Era el chico que te molestaba en la universidad.
-Vaya, mira a quién tenemos aquí. ¿No te vas a mover?-espetó-. Quiero pasar.
No le respondiste. Todavía estabas en shock por vuestra discusión. Además, era más que obvio que podía pasar por cualquier otro lugar y no estabas de humor para hablar con él.
-Apártate, venga. ¿Es que no me oyes? Ah, claro-se agachó para hablar contigo-. Tu novio te ha dejado, ¿verdad?-soltó una carcajada-. No me extraña. Nadie querría estar con una chica como tú. Sólo mírate. Eres tan patética.
Te cogió del mentón para que lo mirases.
-¿Qué? ¿Vas a seguir sin hablar ni moverte? Tan inútil como siempre. Pedazo de mierda.
Te empujó hacia atrás, por lo que estuviste a punto de caerte, pero alguien te agarró en brazos justo a tiempo.
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Sin perder un segundo, Bin agarró al chico del cuello de la camiseta y lo elevó en el aire.
-Vuelves a tocarla y te juro que será lo último que harás en tu vida. ¿Me has oído, basura?
El chico tragó saliva, asustado por las palabras de tu novio, y se marchó corriendo en cuánto lo dejó en el suelo. Bin se rascó la nuca, sonrojado, y comenzó a andar.
-¡Espérame!
Sin más dilación, cogiste carrerilla y te subiste en su espalda de un salto. Ambos comenzasteis a reír con ganas. Cuando te bajaste, te cogió de la mano y te besó como disculpa. Tú también te disculpaste. Nunca volverían a discutir.
💫💫💫
¡Gracias por todos los comentarios y votos que estoy recibiendo! En serio se agradecen. Saludos y espero que todxs se encuentren bien. ¡Aroha fighting! 💖💖
