Sangre azul derramada en el asfalto,
Los zapatos de cristal rotos en pedazos.
La medianoche ha llegado
Pero la luna y las estrellas no han aparecido.
No quería ningún Romeo
Y tampoco ningún príncipe azul,
Solo a alguien que pudiese abrazarla cuando llovía dentro de su corazón.
Decían que era guapa,
Ella solo necesitaba que le dijeran que era fuerte.
Adiós al maquillaje corrido
Y a las sonrisas falsas,
Adiós a las dietas de manzanas envenenadas
Y a los sueños en aviones de papel.
No quería ser más Blancanieves.
Quería ser un enanito o incluso la Reina Malvada.
No la dejaron.
Decían que no era su lugar.
Prefirió irse.
Prefirió no ser nada
A ser alguien como ella.