Taesexual. Kookv

Diez.

—Oh joder.

TaeHyung se posicionó en su asiento correspondiente, haciendo con la cabeza un gesto de disculpas hacía el policía, quien asintió y se retiro del aparcamiento murmurando algunas groseras palabras. Por suerte no se había ganado una multa.

El rubio encendió el auto y se movió en busca de otro estacionamiento libre para aparcar. La tensión era palpable, JungKook estaba sudando como nunca pensó que sería posible. Cuando se estaban besando no les estaba importando lo que estaban haciendo, pero ahora que habían sido interrumpidos sus corazones parecían salirse de su pecho.

—Bájate.—Fueron las primeras palabras de dijo TaeHyung cuando estacionó el auto.

—Me fuiste infiel.

Las palabras habían sido directas, no tenían sentido pero ahí estaban, siendo pronunciadas por el azabache.

—¿Qué?—TaeHyung giró su cabeza en su dirección, agarrando el brazo de JungKook con tanta fuerza que este pudo sentir las lagrimas de dolor amenazando con salir, pero no le importaba, quería escuchar lo TaeHyung tenía que decir.—JungKook escucha. Terminaste conmigo hace TRES meses y yo empecé ha salir con alguien hace un mes, con alguien que comparte mi futuro y que quiere lo mismo que yo. No te juzgo, me amaste y yo te amé a ti, pero tú terminaste eso, así que no te atrevas a decir que te fui infiel porqué es mentira.

La rabia que trasmitía la mirada del rubio junto a su penetrante mirada y la fuerza que estaba empleando en agarrarlo provocó que JungKook se sintiera amenazado, se suponía que las cosas no saldrían así, se suponía que sería él quien miraría de esa manera a TaeHyung, reprochándole con la mirada todo el daño que le había causado.

—No. Ahora estás con un chico, yo realmente confiaba en ti.—TaeHyung supo diferenciar que era ese brillo en la mirada de JungKook y sintió sus manos sudar.

Esta situación era tan graciosa, se sentía como una anciono explicándole a un niño sobre como funcionaba el mundo.

TaeHyung pasó sus manos por su cabello rubio, una risa nerviosa amenazaba de salir de su boca al igual que unas ganas de golpear a JungKooK.

—JungKook, vale, fuera. Ya.

—Infiel.

TaeHyung sentía que si volvía a escuchar esa palabra definitivamente estallaría.

—JungKook nosotros no estamos saliendo, NO te estoy siendo infiel.

El silencio invadió el auto nuevamente y las ganas de golpear al zabache no parecían irse. JungKook en cambio no sabía como se sentía, sabía que esa palabra era la única que describía en sus pensamientos a TaeHyung. TaeHyung malo. Todos. Todos eran iguales, le hacían daño y jugaban con el, todos dejaban de amarlo en algún momento y él lo único que podía hacer era atarlos a él antes de que el momento final llegara.

Cuando JungKook salía con aquellas chicas que babeaban por él en la escuela, no sentía ningún tipo de atracción física hacía a ella, pero ellas lo amaban, no provocaban ese doloroso sentimiento cuando las cosas acaban. Aunque supuso que eso sucedía porque todas ellas estaban cegadas por aquel popular chica de la escuela que habían visto alguna vez por los pasillos. Sentir que alguna vez tendría a alguien que pasase lo que pasase nunca le haría daño y nunca lo engañaría le le provocaba una sensación rara en el estómago, al igual que también le excitaba la idea de hacer daño a alguien que le había dañado primero.

Y quizás en algún momento llegó a la conclusión que la fórmula para que la gente que amas no te dañe en él algún momento es dañarlos tú mucho antes.

—JungKook te quiero, fuiste mi pareja durante años pero tu me dejaste y yo acepté eso, ahora yo estoy formando mi vida, déjame hacerlo.

JungKook no estaba escuchando, según escuchó el sonido del seguro del auto siendo retirado abrió la puerta y saltó fuera, sintiéndose desubicado cuando sus pies tocaron el suelo.

[...]

TaeHyung aún seguía en el coche, no sabía como sentirse ¿JungKook estaba bien?No parecía estarlo, no mentalmente.

Limpió su rostro cuando las lagrimas empezaron a caer, todavía recordaba el día de su ruptura, era uno de los días que con mayor tristeza recordaba, JungKook había sido un completo cabron e insensible con el.

Flashback.

—Entonces...

— Ya...

JungKook jugaba con sus propias manos mientras miraba el suelo, el duro golpe por el que TaeHyung parecía estar pasando después de decirle que quería que se fuera de sus apartamento era incontrolable para él.

—Pero, es porque necesitabas un tiempo o-

—Esto se terminó. Me he dado cuenta de que no queremos lo mismo. El tiempo que he pasado junto a ti ha sido genial pero...quiero que te vayas de mi vida.

Nada de " No me mereces. " " Lo siento en verdad te aprecio. " TaeHyung nunca se imaginó que JungKook le diría lo que le acababa de decir, que rompería con él. Y si lo hacía nunca pensó que usaría esas frías y directas palabras.

Sabía que JungKook y el no pensaban igual en muchas cosas ,o no querían lo mismo para el futuro, es más nunca le dieron tanta importancia a eso, todas esas cosas podrían hacerlas juntos.

Fue humillante cuando empezó a llorar de forma descontrolada delante de su ahora ex novio, quien mantenía la mirada hacía abajo. Ahora solo le quedaba llorar mientras el azabache se levantaban e iba sacando sus cajas de mudanza hacía el camión. Dios, lo estaba sacando.

JungKook había sido un chico maravilloso ,se lo había presentado a su familia y este había encajado cómo uno más. Era un chico atento, le traía regalos e iba a visistarlo a la pastelería donde el trabajaba. Pero había algo en lo que siempre JungKook más destacaba de los dos, los celos.

No era posesivo o controlador, era más bien extremadamente dependiente. Lucía un chico serio pero no podía vivir sin muestras de cariño, o más bien demostraciones que le hicieran saber que él era una prioridad en muchas ocasiones. Además JungKook era guapo, muy guapo, para que decir que no y esto hacía que las confesiones de amor fueran algo común. A TaeHyung más que ponerlo celoso le hacía gracia y lo hacía sentir orgulloso, pero JungKook rechazaba esas declaraciones de forma tan brusca e insensible que incluso TaeHyung llegaba a sentir pena, sí, aunque suene extremadamente ridículo.

Su primer impuslo en esos momentos fue levantarse y abrazar fuertemente a JungKook por la espalda, quién seguía llevando las cajas.

Sabía que estaba mal lo que hacía, que seguramente debía de gritarle de frustración hasta ya no poder más, pero se sentía tan bien, se sentía tan bien cuando JungKook envolvía sus brazos alrededor de él devolviendo el abrazo.