En la mira de un pequeño Halcón [ENNEAD]

🌸Seis🌸

La hora favorita de Horus era, sin dudas, al mediodía de la tarde.

Como futuro faraón y soberano de todo egipto, el príncipe de ya casi seis años no sólo tenía que conocer toda la historia de su pueblo y absorber su sabiduría, sino que también debía de saber pelear como ningún otro en todo el territorio, tanto dioses como humanos y, para que el niño adquiriera esos conocimientos de batalla, no había mejor maestro que el dios de la guerra y el desierto, Seth.

Su padre había cedido llevarlo al palacio de Seth todos los días para ser entrenado en la batalla (después de un berrinche por parte de Horus y una conversación seria con Isis de que era su único hijo y debía de complacerlo porque era un niño bueno), y Seth le advirtió que no sería un entrenamiento suave solo porque aún era un semidiós.

Si, era rudo cuando Seth le empujaba hasta hacerle caer al suelo, o los movimientos de espada que tenía que practicar con un palo de madera, era demasiado doloroso el resentimiento en sus músculos y a veces su madre tenía que ir a sobarle y consolarle, diciéndole que tanto su padre como Seth pasaron por lo mismo y que con el tiempo sus músculos se acostumbrarían y ya no dolería. Pero aún con todo, Horus no podía esperar la hora para salir disparado de la clase de Toth y llegar a su entrenamiento con Seth.

Después de todo, había prometido que él sería su futura reina y debía de demostrarle lo fuerte que era.