Capítulo. 33

40 4 0
                                    

Soy oficialmente la novia de Zabdiel.

Quien lo diría.

Después de tanto soñar con esto al fin es real.

Y yo no puedo estar más agradecida con todo.

Con Tess, los chicos, Chris, Zabdiel, todos se volvieron realmente importantes para mí.

Al fin estoy sintiendo lo que hace tiempo no sentía.

El amor familiar.

Y es el amor más maravilloso del mundo, tan tibio y cariñoso.

Tan incomparable.

Han pasado los meses y mi relación con Zabdiel es demasiado linda.

Cada vez más fuerte.

Parecemos dos locos enamorados.

Y yo no puedo dejar de besarlo, soy adicta a su boca, al sabor de sus hermosos labios.

Soy adicta a sus abrazos y caricias.

Soy adicta a su ternura y personalidad.

En fin... soy adicta a Zabdiel, lo amo completamente.

No intentaría jamás cambiarlo porque él es perfecto así como está, es maravilloso siendo solo él mismo.

Estamos en Miami y hoy es el cumpleaños de Richard asi que los cinco salieron a celebrar a algún restaurant o algo similar.

Después volverían a casa e íbamos a celebrar todos juntos.

Aunque solo Zabdiel y Erick sabían sobre el cumpleaños sorpresa de Richard ya que la fiesta la prepararemos yo y Tess.

Zabdiel me rogó para que fuera pero yo no quise ir.

Me quedé en casa y le preparé una torta, junto con Tess.

Faltaban los toques finales y listo.

Todo estaba preparado, los adornos, la comida y los bebestibles.

Solo faltaba que llegaran.

Pasaron más de dos horas y no aparecían.

Le marqué a Zabdiel.

Una, dos, tres veces y no contestó.

Le marqué a los demás y tampoco.

Nadie contestaba.

Llegó la noche y aun no sabíamos nada de los chicos.

Le he enviado mensajes a Zabdiel para preguntarle donde estaban pero nunca respondió.

Ni ninguno.

Esto se me hace demasiado extraño.

¿Y si les sucedió algo?

¿Estarán todos bien?

¿Y si alguno tuvo un accidente y están en el hospital?

Miles de posibilidades pasaban por mi cabeza y la mayoría eran negativas.

Estoy demasiado abrumada.

Tocaron la puerta de mi habitación.

-Mira esto Abigail- Tess me entregó su celular y yo pensé algunos segundos antes de abrir los ojos, tenia miedo de que sucediera lo peor.

Al abrirlos vi como todos estaban en una casa celebrando.

Vaya al menos están bien que alivio.

-¿Qué hacemos?-  Pregunté.

Ella sonrió con diversión y lo entendí de inmediato.

Asentí.

Entre dos AlmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora