No hay marcha atras.

No eres normal.

Sábado, y por fin en mucho tiempo tengo algo que hacer que no sea dormir, comer, leer y escuchar música. A ver aclarado las cosas con Edu ha sido lo mejor, me estoy recuperando aunque sólo sea con el y a veces con Dima.

Venga Sofía, no seas vaga y levántate. Has quedado con Edu a las 12 y tienes que salir de aquí a las 11 y son ... ¡¡las 10.15!!

-Mierda, mierda y mierda.- digo chillando mientras me levanto de la cama.

-¿Sofía que pasa?- pregunta mi madre.

-¡Que he quedado a las 12 con Edu!- le respondo mientas me voy al baño a ducharme.

-¿Edu?- pregunta mi madre sorprendida.

-ES UN AMIGO MAMÁ- chillo para que me escuche y le quede claro. Aunque seguro que esta pensando otra cosa, siempre me ha gustado tener como amigos a chicos, las chicas somos malas entre nosotras misma y sin embargo los chicos son más legales entre ellos, código de chicos. Nosotras el código de chicas las rompemos, somos así de cabronas.

Mientras me ducho pienso en lo que me voy a poner, y así me ahorro tiempo. Me ducho lo más rápido posible para que me de tiempo a maquillarme y no ir con prisas, aunque estoy yendo ya con prisas.

Me coloco las medias negras, una falda negra de tubo, una camiseta básica negra, mi chaqueta favorita de cuero que es negra también y pienso estrenar unos botines con tacón que me compre en Galicia. Y lista, bueno no me alta el pelo y maquillarme y tengo 15 min. Peino mi pelo ya se secara con el viento y me maquillo por encima, algo natural.

Voy corriendo a la parada de autobús, porque mi autobús ya estaba ahí y para mi suerte logro que el chofer no arranque. Durante todo el trayecto hago lo mismo de siempre de cuando voy al insti, me pongo a escuchar a Little Shady, DVicio y Dean Geyer mientras leo en mi móvil. Cuando estoy llegando a la parada veo a un chico con una melena corta castaña y es Edu, sino me quivoco. El utopía para delante de él, me bajo, le veo, sonrió y subo mi pierna parecido una chica adorable, estoy llegando 10min tarde. Al parecer hay tráfico a esta hora, supongo que será porque la gente querrá ir a comer y como siempre van con prisas, ya que sólo tienen tiempo para su trabajo. Que triste.

-Hola.- saludo a Edu, si el chico de la melena es él.

-Hola, siempre llegando tarde.- dijo mientras se acerca a darme dos besos.

-No es mi culpa si hay tráfico.- dije enfadada. Cosa que no estaba.

-No eres normal.- dijo mientras yo le sacaba la lengua.

-A lo mejor la normal soy yo y tu eres el raro.- dije haciéndome la interesante.

-Puede ser.- dice mientras se ríe.

-¿Que peli vamos a ver?- pregunto cambiando de tema.

-No sé, ¿cuál te apetecer a ti?-

-Me da igual.-

-A mi también.- dijo mientras reía. Y yo sonrió al recordar que cuando salíamos con mis amigos me pasaba lo mismo, nos daba igual que peli ver o a donde ir. -¿De que te ríes?-

-De que a mi y a mis amigos nos daba igual donde ir, o que hacer.- dije algo triste.

-¿Les echas de menos?-

-Mucho.- dije. Edu se acerca y yo me detengo, el acerca su mano y hace que sonría por sus dedos.

-Gracias.-

-No tienes porque dármelas.- me limito a sonreírle. -En el fondo de esa apariencia que quieres dar de chica mala hay una persona que ha sufrido mucho por diferentes circunstancias y trata de ser fuerte, de aparentar que todo le da igual y ser fría.-

-Wow, tu vas para psicólogo.- la verdad es que lo había clavado pero no pienso decírselo.

-He acertado ¿no?.- me pregunta divertido

-¿Al final que peli vemos?.- pregunto cambiando totalmente de tema.

-¿Anabelle?-

-¡Si!- repongo entunsiasmada.

-Espérame aquí que voy a comprar palomitas y bebida.- dijo mientras se iba a la taquilla. Al parece ya habíamos llegado al cine y yo no me había enterado.

-¡Y CHUCHES!.- le dije chille para que me escuche . Si el compraba la comida, yo compro las entrada, sería lo justo ¿no?

-Si tienes miedo me lo dices, eh.-

-¿Yo tener miedo?- dije alzando una ceja.

-Vale, vale. Yo solo te lo digo.-

-Sofía, puedes hacer menos ruido.- me dice con un tono burloso.

-Eh, no es mi culpa que las palomitas sean ruidosas.- le digo indignada.

-Pero es que haces más ruido de lo normal.-

-Shut up!.-

(...)

Siento como Edu me aprieta el brazo pero no me hace daño, tiene miedo.

-Si tienes miedo me lo dices, eh.- repito lo que me había dicho.

-N-no tengo miedo.- dice mientras tartamudea un poco.

-Lo que tu digas.-

La verdad es que la peli no daba miedo o al menos a mi no me dio, creo que Edu es algo miedoso. Pero me la he pasado bien.

Salimos del cine y vamos al McDonald's.

-¿Qué vas a pedir?- me pregunta Edu.

-'Dos de carne, salsa especial lechuga, pepinillos cebolla, queso y pan hacen el sabor de BIG MAC' pero sin cebolla y pepinillos.- cante entusiasmada.

-¿Donde quedo la chica borde y antipática?- me dijo con una sonrisa burlona.

-Soy así en un principio y después la gente que me conoce bien sabe como soy en realidad y la que no, pues soy una borde y antipática.-

-Menos mal que te conozco.- dijo divertido

-La confianza da asco, con eso te digo todo.- dije con una sonrisa malvada.

-Venga a sentarnos, que tengo hambre.- dijo con la fuente en las manos

-¿Quieres ketchup?- pregunte. Di que si.

-Vale.- respondió.

-Toma, y plum el ketchup en su cara.-

-¡Eres un demonio!.- dijo mientras me fulminaba con la mirada.

-Pero su soy un angelito.- dije mientras hacia cara de niña buena.

-Me pienso vengar.- dijo mientras achinaba los ojos.

-¿por? Si sólo te he dado ketchup..- dije con voz angelical.

-Si claro.- dijo mientras se limpiaba con la servilleta.

Terminamos de comer y cada uno para su casa. Edu cogió su autobús y yo el mío. Como rutina de vuelta a casa ponía The Pretty Reckless, Green Day y A Day To Remember. Tengo que descargarme nuevas canciones, aunque tengo muchas pero siempre escucho las mismas. Siempre cuando voy a borrar las canciones que no suelo escuchar, no las borro porque pienso que las escuchare y no lo hago.

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