Redentor: Inframundo. (Hades y Perséfone)

Capitulo 2- El Rapto

Perséfone entra a la gran sala de Reyes, en esta se encontraba Zeus, su padre y Deméter. Al ver a su madre corre hacia sus brazos y la abraza fuertemente.

—Persefone? Que estás haciendo aquí?—la voz de Deméter sonaba confundida.

—Lo siento mucho madre—esta se arrodilla avergonzada—estaba muy preocupada por ti, pensé que no te volvería a ver.

—Persefone no debiste haber venido aquí—dice su madre en voz baja.

—Ya lo se, lo siento.

En la bella noche Zeus decide dar un banquete para celebrar que todos los dioses estaban juntos. Incluso Hades. Las ninfas decoraron el lugar de una hermosa manera lleno de flores y luciérnagas. Deméter decidió dejar a su hija en su habitación así nadie intentaría sobrepasarse con ella y la mantendría a salvo. Todos conocían el carácter sobre protector de Deméter, pero como ella misma decía..."Es mi hija, solo yo se lo que es mejor para ella"
Persefone se encontraba encerrada en su habitación, aunque deseaba ir a la fiesta, respetaba los pedidos de su madre. Después de peinarse el cabello, y ponerse la fina bata de dormir decide asomarse al balcón solo unos minutos. La joven pone sus manos en la barandilla y cierra los ojos al sentir el aire en su rostro, respiraba como si fuera la última vez que lo hiciera. Y así fue, solo le quedaban minutos en el mundo de los vivos.
Las puertas de su dormitorio se abrieron de una y en estas se detuvo un joven de cabello color plata, que se fue acercando lentamente. La joven asustada pregunta.

—Quien eres??....—pero no tiene respuesta el chico llevaba una máscara negra impidiendo ver nada más que unos rojos ojos—...si das un paso más gritaré!—amenaza la pobre joven, su corazón comienza a latir con fuerza.

—No te preocupes hermosa, nadie podrá oírte.

Una nueva voz hace que se voltee, ahí encontró una chica de cabello rubio vestida de igual manera que el chico, eran muy similares los dos. Persefone intentó correr pero la chica de la máscara la agarró en sus manos y pronunciando unas extraña oraciones la hizo caer en un profundo sueño.

"Mi mente se fue desvaneciendo poco a poco, intente luchar pero no fue posible, caí en un sueño desgarrador"

Después del banquete hubo una gran fiesta, llena de vino y música. Hacían décadas desde la última vez que esto sucedió en el Olimpo. Zeus sentado en su trono se dio cuenta de que había alguien que faltaba en su fiesta y ese era Hades. Aunque en el fondo sabía perfectamente donde estaba.
Deméter va hacia la habitación de su joven hija, a darle un beso de buenas noches y para ver qué todo estaba bien con ella. Pero cuando la diosa entro y se percató de que su hija no estaba la tierra tembló, las ninfas que estaban a su cargo fueron castigadas, por no ver nada de lo que le sucedió a Persefone. Todos la buscaron, pero no había rastro de la pobre, había desaparecido. La fiesta se detuvo y Zeus fue a ver a su amada.

—Que sucede Deméter, se puede saber porque todos están como locos en el palacio?—exige Zeus molesto.

—Es Persefone, no esta—Deméter lucia desesperada, podía verse en su mirada, sus manos temblaban. Pero hubo algo que la hizo recapacitar, porque la reacción de Zeus había sido tan tranquila, acaso el sabía lo que estaba sucediendo?

—Zeus....tu..tu tienes algo que ver con esto?—Zeus se quedó callado y Deméter se volvió histérica, comenzó a tirar las cosas al suelo mientras gritaba-..Donde esta ?!!!!..Donde esta mi hija!!!!??que hiciste con ella??!!

Los gritos de Deméter se escuchaban hasta en la tierra, nunca se la había visto de esa manera. Zeus toma aire y le dice.

—Se la entregue a Hades...—las palabras de Zeus hacen que la furiosa diosa se detenga.