22. Pesadillas

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NATALIA POV

Me removí abriendo los ojos siendo consciente de donde estaba. Me había quedado dormida en el sofá del nuevo apartamento de Alba.

Me giré notando como ella me debió de tapar con la manta que le compré, siempre tan atenta. Saqué el móvil del bolsillo observando la hora.

"Las 6 de la mañana" susurré para mí misma. Hoy no trabajaba hasta por la tarde así que podía seguir durmiendo tranquilamente.

Me levanté para ir al baño y después caminé lentamente hasta la habitación de Alba. Me asomé observándola dormir de lado espaldas a mi, pero algo iba mal.

Escuchaba un sonido extraño, como unos sollozos y como temblaba por dentro del edredón. Me acerqué preocupada sentándome detrás de ella con cuidado.

"Alba cariño, despierta" acaricié su mejilla húmeda por las lágrimas y al ver que parecía muy fuerte aquel sueño me arriesgué a moverla con algo de fuerza para despertarla.

Pegó un fuerte sollozo abriendo los ojos bruscamente observándome. Me abrazó como si de un salvavidas se tratase comenzando a llorar de nuevo.

"Ya está bby..." Susurré deslizando mi mano por su espalda algo sudada. Besé su mejilla mientras que ella me abrazaba con más fuerza.

Después de unos minutos en silencio notando como su respiración se calmaba y los temblores desaparecían me separé limpiando los restos de aquel desagradable y húmedo momento.

"¿Quieres hablarlo?" Susurré con delicadeza observando sus ojeras, se ve que no estaba pasando una buena noche.

"Era horrible" susurró casi en un murmullo inaudible. Asentí lentamente respetando sus tiempos. Se reincorporó pegando la espalda al cabecero de la cama y yo hice lo mismo quedando a su lado.

"Te voy a escuchar" dije de nuevo cogiendo su mano dejando un leve apretón. Ella sonrió tímidamente apartando una lágrima salvaje que todavía asomaba por su ojo brillante.

"He soñado que entraban a tu casa, te mataban y a mí me encerraban" dijo muy bajito mirando la pared de enfrente. Recapacité sobre sus palabras "no quiero ser un peligro" dijo de nuevo.

"Alba no lo eres" rebatí girando mi cuerpo para mirarla mejor "nadie me va a matar ni te va a encerrar mientras pueda impedirlo, no has hecho nada malo, nada que se pueda demostrar" dije intentando no cagarla. Realmente no sabíamos con certeza que estaba haciendo en Suecia antes del accidente.

"¿Y si soy mala?" Preguntó mirandome por primera vez a los ojos. Podía ver el temor al rechazo y el abandono.

"Puede que lo fueras, pero ahora no" dije sonriendo levemente. Ella copió mi gesto apretando nuestra unión "además de que estamos intentando que nadie nos siga la pista y sospeche de nosotras"

"¿Encontrasteis a Miki?" Preguntó algo más calmada, negué con la cabeza observando su desconcierto.

"Alguien o algo le debió de avisar, es verdad que te acabo de decir que estamos intentando que nadie sepa de nuestra pista pero...es difícil. Alguien nos tiene fichadas"

"¿Y si es alguien de dentro?" Preguntó dejándome desconcertada a mí esta vez "quiero decir que igual..no se...Tyra..."

"No" corté sus intenciones "Tyra no haría algo así nunca, puede parecer una hija de puta pero no haría eso" dije convencida "además de que no tiene motivos" cuando dije eso Alba chistó con la lengua "¿Qué?"

"Está celosa" habló bajando la mirada al edredón "celosa de que tú y yo..ya sabes, que tengamos esta relación tan extraña" me estaba dejando desubicada, necesitaría tomarme un Ubicatex después de esto.

"Eso no puede ser, Tyra sabe de sobra que entre ella y yo no hay ni habrá nada, solo es sexo, sin sentimientos" Alba me miró y asintió no muy conforme "yo te quiero a ti ¿Vale? Es arriesgado pero es lo que me dice esto" me señalé la zona izquierda de mi pecho.

"Eso a sonado muy moñas" dijo Alba riendo levemente. Me hice la ofendida empezando una batalla de cosquillas que gané de paliza acabando encima de Alba en el medio del colchón.

Estaba tan bonita con su pijama de nubes azules. Ella me sonrió con ternura acariciando mi mejilla. No me lo pensé mucho y me incliné hasta besar sus labios que tantos días estaban en sequía.

Nos besamos lentamente sin prisa y con todo el cariño del mundo. Alba me tenía loca, se me erizaba la piel con tan solo sus miradas y sus pequeños gestos que demostraban lo adorable que era.

Me separé quedando boca arriba a su lado mirando al techo. Ella buscó mi mano entrelazandola comenzando pequeños masajes.

"No quiero dormir sola" habló finalmente. Me reincorporé y asentí sonriente dejando un pico rápido en sus labios.

Antes de meternos a la cama me dirigí al salón cogiendo la manta nueva y una vez dentro de la cama nos tapé con ella para evitar tener frío ya que no hacía mucho calor en la casa.

ALBA POV

Me mantenía en el sofá con la manta leyendo la novela de una tal Perita mientras Natalia veía algo en su móvil desde un taburete al lado de su taza de café que dejaba un agradable olor en el salón.

Me encantaba observarla todo el tiempo, podía estar días sin verla según me dijo Tyra así que aprovechaba cualquier momento para memorizar cada detalle de su anatomía.

"Me vas a desgastar" levantó la mirada pillandome de lleno empezando a reírse "me voy a mi casa antes de comer y luego trabajo, vendré un par de días a la semana y sin horarios, por si alguien me sigue que no sepa con exactitud mis pasos" caminó hasta el sofá sentándose a mi lado "¿Que lees?" Preguntó mirando la portada.

"Una novela bastante extraña, tiene mucho drama y si te fijas las protagonistas se parecen a nosotras, coincidencias" dije sonriente. Ella asintió bebiendo un último sorbo de café para dejarlo en la mesilla.

"¿Quieres probar a recordar?" Dijo mirándome para buscar mi aprobación. Llevaba varios días sin hacerlo y la verdad es que con Natalia me sentía preparada.

Me senté como un indio dejando la novela en la mesa al lado de la taza vacía de café y Natalia cogió mis manos con delicadeza.

Cerré los ojos después de un par de respiraciones comparadas y me concentré en algo, lo más mínimo.

"¡Alba cariño a comer!" bajé las escaleras lo más rápido que pude intentando no tropezar con nada hasta llegar al salón. Un fuerte olor a café me atrajo hasta la cocina donde una mujer rubia de pelo corto llevaba un bol de sopa a la mesa "hola mamá"

"Venga hija que tenemos que ir al médico" dijo sonriente mientras me acercaba a darle un beso. Me senté en la mesa observando el bol de sopa con su pequeño humillo al estar caliente.

"¿Cómo está?" Pregunté mientras soplaba la primera cucharada. Mi madre me miró con una sonrisa triste que me lo dejó claro.

"Está en coma" dijo finalmente haciendo que la cuchara cayera al suelo y un fuerte sollozo saliera de mi garganta.

"¡NOO!" Grité abriendo los ojos observando como Natalia me acogía entre sus brazos. Me abracé a ella de nuevo intentando calmarme

"Eso es...respira despacio..ya está" hablaba preocupada por mi. Después de unos segundos me separé algo shockeada, no entendía nada "¿Que ocurrió?" Preguntó con cautela.

"Estaba con...con mi madre" Natalia me miró en silencio dejándome contarlo todo "no se si era mi casa.. olía a café y ella me decía que teníamos que ir al hospital y que alguien estaba en coma, no se quién era Nat pero me entró muchísima angustia"

Natalia me abrazó de nuevo pero con la diferencia de que esta vez no nos separamos hasta que se tuvo que ir, no sin antes decirme que la llamara cada noche por si me pasaba algo.

Cada vez entendía menos.

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Cómo me gusta el Hype...

Y tirarme flores a mi misma en mis novelas también, no me escondo.

Os quiero mucho en serio ♥

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FÖRLUST // ALBALIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora