FÖRLUST // ALBALIA

44. Risas

✨ CAPÍTULO CLAVE ✨

ALBA POV

Caminaba por un pasillo largo con el suelo blanco y las paredes de un color gris tétrico.

Me giro observando a mi hermana seguirme de cerca con la mirada en el suelo y un aura negativa rodeándola.

Nos acercamos a la puerta y ambas nos paramos enfrente con una pena muy grande. Paso mi brazo por el hombro de mi hermana que me abraza soltando un suspiro bastante pesado.

Entramos a la habitación caminando lentamente hasta la camilla donde mi padre yacía desde hace 1 mes. Ausente, sin realizar ningún estímulo, estaba en coma por culpa de un accidente, un estúpido accidente de mierda.

Marina se sentó cogiendo su mano y mirando el bote de suero que goteaba lentamente. Me giré observando de nuevo aquella imagen que tenía grabada en mi cabeza, aquellos edificios que conocía de memoria al pasar muchas horas aquí encerrada.

"No podemos quedarnos de brazos cruzados" habló Marina. Me giré para escucharla de nuevo "tiene que haber una manera de que vuelva, un tratamiento nuevo" suspiré acercándome a ella.

"Marina sabes que no hay dinero para eso, que solo podemos esperar" susurré derrotada. Ella se levantó furiosa de la silla mirándome entre lágrimas.

"¡A ti te da igual papá!¡Solo quieres que se muera para hacer tu vida y olvidarte de todo esto!" Gritó empujándome unos metros.

La sangre me hervía y decidí que la mejor manera de resolver esta disputa es yendo me allí. Saliendo de aquel hospital sintiéndome la mayor mierda del mundo.

Nada de eso es verdad, yo quiero a mi padre, pero no hay dinero, no podemos permitirnos un gasto tan grande sin garantías de que vaya a funcionar.

"¡Alba!" Me movió Natalia provocando que abriera los ojos clavandolos en el techo de la habitación. Me giré observando su cara de preocupación.

Me abracé a ella dándome cuenta de que no era una pesadilla, era otro recuerdo de mi antigua vida, un recuerdo que afloró en mi junto a un montón de sentimientos.

"Ya está" me abrazó retirándome las lágrimas que recorrían mis mejillas sin percatarme de ello "¿Qué pasó?" Me preguntó.

Unos segundos después de calmarme, bebí un poco de agua que me ofreció y me abracé a su pecho de nuevo sentadas en la cama.

"Mi padre estaba en coma, mi hermana me echaba la culpa de cosas que no lo eran" hablé cerrando los ojos para recordar los detalles "creo que ya se de qué va todo esto" la miré a los ojos y ella asintió esperando "creo que mi hermana quería conseguir dinero y se juntó a uno de ellos, de ahí que la retuvieran..."

"¿Y el niño?" Preguntó Natalia. Negué con la cabeza sin saber la respuesta. Todavía me quedaban un montón de lagunas y preguntas sin resolver, pero poco a poco íbamos hilando las cosas.

NATALIA POV

Comía la tarrina de helado mientras miraba como Alba se comía la suya bajo aquellos últimos rayos de luz del día sentadas en la azotea.

Me manché la nariz haciendo que su maravillosa risa fuera percibida por mis oídos como música celestial.

Reímos por mi ridiculez durante varios segundos hasta que me percaté que realmente le había dado un ataque de risa.

"¡Pero de qué vas!" Reí acercándome hasta ella dejando el helado a un lado y tirándome encima para hacerle cosquillas.

"¡NooOOOoo!" gritaba intentando zafarse de mi agarre sin poder parar de reír. Podía dedicarme toda la vida a observar sus dientes blanquecinos, su nariz roja por el frío y su sonrisa perfectamente acompasada con sus ojos color ámbar.

Era preciosa.

"¡Por favor Nat!" Hablaba sin dejar de reírse intentando que parara de provocarle aquella risa.

Dejé de hacer cosquillas por su costado moviendo mi mano hasta su flequillo apartando los mechones rubios que me ocultaban una de las 10 maravillas del mundo que eran sus ojos.

Ambas nos pusimos serias en la posición que estábamos haciendo que acariciara mis mejillas algo frías. No era buena idea en pleno enero estar en una azotea en uno de los países más fríos del mundo.

"Eres guapísima" susurré haciendo que sus labios formaran una tímida sonrisa. Me incliné hasta besar sus labios algo secos pero que humedecí con gusto en los segundos restantes.

Llevó su mano a mi nuca tocando mi pelo corto, le encantaba tocarlo y estaba segura de que no podía besarme sin hacer ese gesto

Nos separamos apenas unos centímetros para que mi nariz acariciase la suya mientras sonreíamos.

Me tumbé en su pecho rodeada por sus brazos que me acariciaban de arriba a abajo como siempre me gustaba que hicieran.

Estuvimos largos minutos escuchando nuestras respiraciones porque los corazones no podíamos, las capas de ropa que llevábamos lo hacían imposible.

Volvimos a casa ganandonos una bronca de María que decía que habíamos traído frío al estar casi en estado de congelación.

Si, tampoco fue buena idea tomar helado en pleno invierno, pero es que Alba no se acordaba del sabor y necesitaba hacerlo.

Entré a la habitación observando a Alba coger dos toallas del armario y me miró con una sonrisa traviesa.

"¿Podemos ducharnos juntas? Nada sexual solo...solo quiero ducharme contigo" habló más tímida que nunca. Sonreí y asentí para entrar ambas en el baño.

Me tumbé boca arriba y ella boca arriba contra mi pecho mientras el agua caliente nos rodeaba y nos daba la tranquilidad que apenas teníamos entre recuerdos dolorosos y escapadas para hablar sobre el dichoso plan.

Ese plan que me ponía los pelos de punta, era súper peligro que Alba fuera allí de nuevo, esa gente no tiene problemas en matar a diestro y siniestro a cualquiera.

La abracé fuerte contra mí oliendo su cabello húmedo olor vainilla que me encantaba. Ella se giró algo extrañada.

"¿Qué pasa?" Preguntó sin más. Hice un puchero al pensar la posibilidad de que me la quitaran de mis brazos, de que me quitaran la felicidad que había llegado a mi vida con forma de personita pequeña rubia y con una sonrisa increíble.

"Te quiero" susurré simplemente. Ella sonrió enternecida dándose la vuelta para abrazarme pecho con pecho, corazón con corazón.

"Yo también, tranquila" susurró de vuelta acariciando mi pelo húmedo. No me había respondido al te quiero, ese «yo tambien» era la respuesta al miedo a perdernos mutuamente, un miedo irracional que me bloqueaba y que ella lo sabía.

Porque mi ángel siempre lo sabe todo sobre mí

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Soft

¿Qué pensáis del tema de Marina y el niño?

Os leo!!! 🙈

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