Promise ✨| Kookmin

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- ¿Mañana? - Preguntó el pelinegro haciendo un enorme puchero.

 Jungkook rodó los ojos.

- Tae, he quedado con Lisa. - Respondió el castaño, volviendo a escribir en su cuaderno. 

 - Desde que estás con ella me tienes abandonado.- Protestó Tae con tono dramático, apoyando el rostro en la palma de su mano.

 Jungkook ya se estaba arrepintiendo de haber aceptado ayudar a su amigo a estudiar.

 - No insistas. Ahora deberías preocuparte por el examen del viernes.- Dijo el castaño sin mirarle.

  El contrario suspiró sonoramente.

 -  Vamos Jungkook... 

 Finalmente, el nombrado levantó la mirada.

 - Mira, si apruebas este examen, el fin de semana haremos lo que quieras. - Garantizó el castaño, cansado de escucharle.

 La cara de Taehyung se iluminó.

 - ¿En serio? - Preguntó incrédulo, dejando caer el lápiz al suelo.

 Sabía de sobra que Jungkook rara vez proponía algo así, y si lo había hecho esta vez había sido por la simple razón de que estaba convencido de que Tae no aprobaría el examen, pero al menos conseguiría que lo intentase.

 Jungkook asintió, y Tae en respuesta aplaudió emocionado.

 - Ahora ponte a estudiar.- Dijo serio.

 El contrario asintió enérgicamente, para después concentrar toda su atención en el libro que tenía delante.

 En ese momento el móvil del castaño vibró en su bolsillo. 

 - Dime, mamá. - Dijo tras coger la llamada.

 Taehyung le observaba expectante, por lo que Jungkook señaló los libros que se encontraban delante de él con rostro imperturbable. El pelinegro le sacó la lengua, pero no desobedeció. 

 Jungkook asintió varias veces antes de despedirse y colgar. Seguidamente comenzó a recoger sus cosas y a guardarlas en su mochila.

 - ¿Qué quería?- Preguntó Tae curioso.

 - Tengo que ir a buscar a Jisoo.- Respondió poniéndose la mochila al hombro.- ¿Vienes?

 Tae no lo pensó dos veces antes de levantarse de la silla.

 - Prefiero aguantar a la pesada de tu hermana antes que estudiar un solo tema más de matemáticas. - Aseguró .- Vámonos.

 Jungkook negó sonriendo.

...

Jisoo les esperaba apoyada en un poste, con un helado en la mano y mirando al frente con cara de haber tenido un mal día.

 Jungkook hizo sonar el claxon para que reparase en ellos. La chica volvió la vista al coche y comenzó a caminar hacia él aún con rostro serio. Abrió la puerta trasera y se sentó sin mirarles a ninguno.