Lunes por la mañana. El despertador esta sonando. Tengo frío y me duele la cabeza. La luz me da directamente a la cara. Mi hermano y mi padre peleándose por la ultima galleta en la cocina. Mi madre llamándome desde detrás de la puerta. Examen de mates a primera hora. Y tengo el presentimiento de que no debería salir de la cama. La combinación perfecta, ¿no crees?
-Genial.- Susurré.
-Venga Aria, vas a llegar tarde. - Chilla mi madre
- Voy mama.- Dije incorporándome en la cama.
Nada mas poner un pie en el suelo me tropecé y me caí de cara. Desde luego, hoy no es mi día.
Me levante gruñendo y fui directamente a la ducha. Agua fría. Já que me iba a esperar.
Cuando me termine de arreglar baje a desayunar con miedo de no atragantarme con algo, mejor prevenir que curar supongo.
Bajé las escaleras como siempre, de cuatro en cuatro y saltando.
-¡Aria¡ ¿Cuantas veces te he dicho que no bajes las escaleras así?- Dijo regañándome mi madre.
-Perdoooooon.- Dije sonriendo mientras que veía a mi hermano que se estaba riendo.
-Siempre igual.- Dijo mi padre dándome un beso en la frente.
Me senté y me puse a desayunar mientras que echaba miradas cómplices con mi hermano.
Al terminar me lave los dientes.
-Puagg. ¿Que es esto? La madre...- Chille nada mas ver que me había echado crema en el cepillo. De verdad que el mundo no quería que fuese al colegio hoy.
-Que asco.- Susurraba yo mientras me montaba en el coche.
Al llegar al colegio mi padre me deseo suerte para el examen y yo le sonreí en señal de gracias. (Soy muy poco sentimental, lose.)
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Los 8
Teen Fiction*-Imagina que un día te despiertas con un dolor de cabeza horrible y con un presentimiento de que no te deberías levantar de la cama ni ir al colegio. ¿Que harías? Bueno pues yo me levante, y fue la peor decisión que tome en mi vida. Si hubiese sa...