1- ¿Tú eres el Diablo?

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Cualquiera que viera a Warlock Dowling diría que es un adolescente común. Quiza un poco mimado, pero que se puede esperar del hijo de un Agregado Cultural Americano, que tiene casi tantos lujos como si fuese el hijo del mismísimo presidente.

Consideraría que tiene un juicio moral un tanto especial, por no decir extraño, pero nadie adivinaría que eso es debido a que fue literamente criado por su niñera que le aseguraba que el podría reinar el mundo con puño de hierro y doblegar a las personas a su voluntad, y su jardinero que le enseñó a respetar a todas las criaturas viviente por igual, ya que estas eran sus hermanas en ese mundo. Él no los culpaba, le habían enseñado a respetar las opiniones de la gente vieja, aunque claramente no duda en aclararles cuando su ideas les parecen estúpidas; pues le enseñaron a decir lo que piensa, claro que siempre respetando la opinión agena.

Si, puede que tenga un look un tanto Emo o Dark, pero hey, es un adolescente entrando a sus diecisiete años, es obvio que no es mas que una fase. Igual que su gusto por las cosas sobrenaturales y el ocultismo, todo normal en un chico de su edad, que si ha intentado, y logrado, invocar unos cuantos monstruos y demonios de vez en cuando, algo clásico de un chico aburrido y con mucho tiempo libre.

Lo único que quizá nadie podría averiguar de él seria su extraña resurrección después de hacer sido quemado vivo por un demonio enojado, en realidad ni siquiera él sabía que había ocurrido ahí.

Fue unos días después de su cumpleaños número once, sus padres lo habían llevado a un aburrido viaje que su padre describió como "culturalmente enriquecedor"; él claramente no tenía interés en eso y reclamaba por que estaba en ese apestoso desierto pidiendo ir a una isla tropical o algun parque de digresiones.

Después el extraño guía le presto demasiada atención a él, incluso se acercó demasiado, eso le incómodo pues el tipo apestaba a mierda, y siguiendo la educación que su Nanny y el Hermano Francis se lo dijo directamente, el apestoso guía se río y comenzó a preguntarle sobre voces y un perro, ese tipo necesitaba seriamente ayuda psicológica.

Después de eso solo recuerda que el tipo enojado grito cosas sobre el infierno y luego comenzó a quemarse.

Y la tarde de ese mismo día estaban todos aun ahí, enteros. Tras unas miradas y aclarar no mencionar nada de eso nuevamente volvieron a casa.

Warlock intento ignorar lo ocurrido, pero la curiosidad fue mas halla y aprovechando su tiempo libre comezo a investigar por su cuenta todo aquello. Al principio no encontró mucho, pero eso debido a que era bastante complicado para un niño de doce años buscar información sobre ángeles y demonios sin que las personas lo miraran como si tuviese un gigantismo letrero luminoso en la frente que dijera "Raro".

A los trece años se sabia la mayoría de nombres de ángeles y demonios, a los catorce intento rezar a Dios buscando respuesta, como hace ya varios años le había recomendado el Hermano Francia, nunca obtuvo respuesta alguna. A los quince le interesó y gusto la ropa de tonos oscuros, la mayoría de hechiceros y brujos de los libros llevaban ese tipo de ropa, pero él no tenia intención de usar apestosas túnicas, pero el algodón y la mezclilla fueron un útil sustituto, tampoco pensaba en utilizar una barba larga, eso se veía realmente incómodo, pero dejar su cabello lo suficientemete largo para hacerse una pequeña coleta parecía servir igual; no tenia joyas mágicas pero los anillos y piercings lucian bien en él.

La ropa pareció dar resultado ya que poco tiempo después logro invocar en el viejo cobertizo del jardinero a un demonio llamado Abraxas; salvo por unos cuantos insultos, amenazas e intentos de que hiciera un trato con el por su alma, lo que el engendró le dijo no le sirvió de mucho, un tiempo después intento con el lado opuesto, un ángel llamado Ezequiel aparecio ante él, este solo le sermoneo y dijo que se alejara de esas cosas, que los humanos no podían entender dichas fuerzas, ninguna respuesta a sus dudas.

Pasaron algunos meses más, una idea paso por su cabeza. Cuando se tiene una duda en clase no le pregutas a un compañero, a menos que este sea el nerd del salón, lo mejor es ir siempre con el maestro.

¿Y si preguntaba directamte a los importantes?

No a un Lord del infierno ni a un arcangel, sino a los jefes supremos de cada lado; aunque Dios quedo descartado, ya había perdido suficiente tiempo rezando si obtener respuestas, y dudaba que hubiese una especie de hechizo de invocación para él.

El Diablo, Satanás, en cambio, había bastantes de ese tipo en su pequeña estantería de ocultismo, sólo tendría que investigar unos días para encotrar el que no pusiese tanto su vida en riesgo, y que no implicará sacrificar ningún animal, conseguir cabras o gallinas negras era algo difícil en ocasiones.

Unas noches después, cuando se aseguro que todos dormían, salio hacia el cobertizo y preparo lo necesario, con el símbolo protector listo comenzó con él conjuro, no entrare mucho en detalles con esto, solo que fue necesaria sangre virgen y que no fue un problema conseguir esta.

Cuando todo estuvo hecho en el centro del pentagrama comenzó a acumularse un extraño humo negro que giraba como un tornado, el pequeño cobertizo descendió su temperatura de manera casi inmediata, sólo para que cuando el humo comenzará a despejarse aumentará hasta sentirse como un horno.

Warlock tenia preparados sus amuletos de protección, esperando ver a la figura con cuernos y piernas de carnero, al tridente llameante y los ojo de reptil.

En su lugar había un chico con pijama que miraba confundido a todos lados, mientras que en una de sus manos, de la cual ninguna de las dos teniar garras, ni siquiera uñas largas, llevaba una revista de "divulgación científica" y en la otra una bolsa de papel que el estaba seguro temía caramelos; no había pezuñas, solo unos pies normales con dedos y uñas perfectamente cortadas, en lugar de cuernos había una rizado cabellos café claro, solo unos pocos tonos mas claro que el suyo, que necesitaba ser peinado.

Warlock lo miro confundido, ¿ese era el traidor del cielo? ¿El destructor del mundo? ¿La bestia devoradora de mundos?

El chico en el centro del pentagrama lo mir a los ojos, Warlock noto entonces que eran tan azules como los suyos, extendió la bolsa de papel hasta él sin levantarse del suelo.

- ¿Quieres un caramelo de limón? - y entonces el supuesto diablo le sonrió con unos brillantes dientes blancos.

Caramelo de Limón | Antichristboy-friends.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora