Capítulo Cuatro

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Hay veces que hasta lo hombres perfectos desilucionan y empiezan hacer imperfectos.

-se ha roto el condón.

-¿qué hay con eso?- pregunte sin entender, que pasaba si se rompía el condón.

-por Dios, eres una estúpida o qué- me tomo por mis mejilla muy fuerte, ya no era ese hombre amable que con sus carisias me hacía ver lucecitas y transportarme a otro mundo-. Que se ha roto el condón, puedes quedar embarazada- espabile sin entender pero si había algo que entendía a la perfección, y era que Niall me estaba lastimando.

-suéltame, me lastima- el me soltó y frunció el ceño.

-yo… yo lo siento no fue…- lo interrumpí dándole un fuerte golpe en la cara con la mano abierta.

- no puedo quedar embarazada…- me coloque de pie y visualice mi vestido, me enrolle la sabana y fui hasta donde estaba, me dirigí al baño y antes de decir nada me gire sobre mis talones y lo mire-. Tomo la píldora.

Dicho esto me encerré en el baño, esto solo me pasa a mí, quiero a alguien que me llame la atención, y terminan siendo unos patanes sin remedio ni condiciones. Estaba cansada de hombres como el, que piensan que uno quiere andando quedarse embarazada de tipos tan arrogantes como ellos. Había algo que había aprendido de los tipos ricos, primero, que algunos pagan por sexo, otros tienen sexo con solo chasquear sus dedos y otros piensan que las mujeres siempre quieren intentar retenerle con lo que sea; así sea con un niño. Me metí en la ducha y me di un baño corto, entre más rápido salga de aquel lugar mucho mejor para mí y para mi salud mental, me coloque el vestido y recordé que había dejado la cartera y los tacones en el apartamento, abrí la puerta y Niall se volteó a verme, gire mi mirada hacia donde estaba mi cartera y mis tacones. Escuche como se levantaba de la cama y después sentí unas grandes manos en mi cintura.

-lo sien…

-no te preocupes, no nos volveremos a ver nunca- respondí tajante, no quería saber nada de él ni de su persona por el resto de mi vida, ya me bastaba con la simple idea de que me había acostado con él. Me separe bruscamente y me dirigí hacia la puerta, Salí dando un gran golpe y camine hacia recepción, era la última vez que volvería a dirigirle la palabras, ¡Eso lo juro!.

*****

Sentí que alguien me tocaba el hombre, empezaba a dar pequeñas sacudidas haciéndome gemir de incomodidad.

-despierta Thomasa, hoy es tú día esperado.

Era la maldita voz de Daniel me despertó, necesitaba dormir todo lo que pudiese ya que la noche anterior me regrese a mi casa a las cuatro de la mañana con cara de perros y este, ahora viene y me despierta como si tuviera ese derecho. Me senté en la cama y lo mire con furia, el me acerco unas bolsas y las lanzo sobre la cama.

-Sal de mi cuarto ahora- grite fuerte, escuche que alguien entro en mi habitación y era mi hermana con el ceño fruncido, me miro rabiosa.

-que tanto escándalo a esta hora, estás loca- tomo a David por sus muñecas y lo saco del cuarto. Refunfuñando. Tome una calada de aire y me estire para quitar todo tipo de cansancio, mire hacia el techo y volvió los sucesos de anoche <y tú de estúpida te lo querías ganar> <no te gustan los niños y jamás te gustaran> Salí de la cama aun con esos pensamiento desagradables sobre Niall, si lo vuelvo a ver voy a destruirlo, y luego hare que se arrepienta de haberme tratado de aquel modo, hay veces que sueno algo infantil pero la verdad con las cosas de este tipo, te vuelvo un infantil.

Eran la una de la tarde y entre al consultorio odontológico que estaba en aquel momento todo silencioso, mire hacia todos lados para ver si visualizaba a mi amiga Lyla que como siempre estaba batallando con la computadora. Me acerque por detrás para darle un gran susto, y casi lo logro si no fuera por Steven que me dio un azote en culo y chille del dolor. Steven era guapo, rubio, ojos color grises y unos labios regordetes, era tan sexy que no se le justificaba. Lo mire mal mientras me acercaba hacia mi amiga sonriente, ese hombre siempre hacia eso a todas las del consultorio.

-qué haces aquí nena- me senté junto a Lyla sonriéndole de lado, ¿acaso se le olvidaba que trabajo aquí? Ella se echa a reír como siempre lanzando una estruendosa carcajada-. Steven, debes dejar de azotarle el culo a mi amiga… y a todas las de la oficina.

El chico soltó una carcajada que nos hizo reír a la mayor parte del consultorio, no había absolutamente nadie y me encantaba de que el día estuviera solo para poder pensar, mi hermano Travis vendría dentro de dos días a ver a mi madre, hacia meces que no lo veíamos a la cara y si lo veo ahora lo sentiré como un chico extraño. Miro la agenda de notas que hay en la mesa y el primer nombre que veo es el de Zayn Malik. Quede en Shock, no me lo podía creer era el Zayn malik que yo pensaba ¿o habría otro por ahí? Miro a Lyla, pero ella sigue con la frente arrugada en la pantalla, lo primero que se me viene a la cabeza es pegarle con la agenda en la cabeza, ella chilla de dolor y me mira mal.

-¿quién es Malik?- mi amiga me miro mal y luego me arrebato la agenda y con este me devolvió el golpe, pero no me interesaba el golpe; solo me interesaba saber quién era ese Zayn Malik.

-pues un tipo rico- vuelve su cabeza al ordenador cuando abre los ojos como platos y vuelve su mirada en mí-. No me digas que también te tiras a ese tipo.

-¡no! No me tiro a todos los tipos que vienen a consulta, pero mejor dime que hace en esa lista.

Ella volvió si mirada a la agenda y leyó lo que decía. No necesitaba que ella me dijese que decía lo había leído perfectamente, me había venido a buscar a mí y yo no sabía porque. Me coloque de pie deprisa antes de que Lyla me bombardeara con preguntas.

Me senté en la mesa que había dentro de mi consultorio y saco mi celular de él, necesito hablar urgentemente con David, él debe de saber que hacia el tal Zayn malik llamando a mi lugar de trabajo. El móvil sonaba y sonaba, pero él no lo tomaba estaba tan desesperada que por Dios necesitaba que ese tipo me respondiera.

-¿diga?- dijo este al otro lado de la línea un poco aburrido.

-tu jefe llamo a mi oficina- le grite al pobre teléfono que no tenía la culpa de nada.

-lo sé, cuando se enteró de que su prometida no iba almorzar con él se puso furioso, él ya me dio el dinero a sí que has lo que se te dice.

-¿y mi parte?- pregunte más severa, ya sabía que no había parte ese tipo no me iba a dar nada, porque según él yo era la que tenía al tipo rico.

-no hay parte para ti, ahora tienes quince minutos para llegar a la cena en una mansión cerca de heiball o me mata a mí y luego te mata a ti, no juegues con Malik entendido.

Dijo eso ultimo y corto la llamada, no sabía cómo interpretarlo, solté un gruñido y me coloque de pie de la silla. Camine hacia mi bolsa donde había metido el vestido de color fucsia con flores azules, camine hacia el baño y me empecé a cambiar el vestido por los jeans ajustados y la blusa de tiras, ese imbécil me había hecho meterme en una situación que no deseo. Ya lista salí del consultorio hacia la recepción Lyla me miro con los ojos abiertos porque no entendía que hacía de aquella forma vestida.

-no hables- ella simulo como si cerrara una corredera sobre su boca y lanso la llave, Sali de ahí y me fui directo al aparcamiento donde tome mi auto rumbo a ver a mi futuro prometido. Si es que ya no lo era. 

la mentó la tardanza, pero esperaba conseguir mas estrellidas... por favor recomiendenla y hagan que más personas como ustedes interesadas la lean, suerte en su dia... Bsx

hace un rato me di cuenta que las personas que lo leen por celular les sale muy mal, lo siento eso ya no esta entre mis manos y aun no se porque... si sigue asi, me tocara subir capitulos sin tildes ni nada por el estilo u.u

DELIRIOUS PLEASURE [Zayn Malik]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora