↦9↤

3.6K 281 64
                                    


Joel.

Después de decirle a Erick que estoy enamorado de él por tres años, lo único que hizo fue levantarse de su asiento y retirarse de mi oficina.

Me lo esperaba.

Quien reaccionaría de buena manera después de decirle que lo espiaba por tres años, soy un maldito loco.

Tomo la botella de whisky y me sirvo un poco en mi vaso, tomo un trago esperando a que calme mi nervios para poder verle la cara a Erick y no sentirme avergonzado.

Salgo de mi despacho para ir a mi habitación y poder dormir un rato.

Estoy cansado, es una rutina, incluso pensé que cuando llegara Erick eso cambiaría, pero no.

Pues casi siempre se alejaba de mi.

Abro la puerta de mí recamara y antes de cerrarla Erick se para delante de mi y me detiene.

Se nota nervioso.

—Joel... yo —esta tartamudiando —. Me gustas —esta sonrojado, me gusta verlo así, es algo tierno.

—¿Qué?

—No te hagas el que no entendió porque puedo ver tu sonrisa arrogante —se cruza de brazos.

Es tan pequeño.

—¿En serio te gusto?

—Si, y no me hagas repetirlo porque me da pena.

Estoy reprimiendo una risa, porque se que eso arruinará este bello momento.

Tomo su rostro entre mis manos y levanto su rostro.

—Eso es un gran avance —susurro cerca de sus labios.

—Creo que si —me mira sonriente.

Cierra sus ojos y no tardo en poner mis labios sobre los suyos.

Es lento y tímido.

Tomo la iniciativa y muerdo su labio inferior, gime despacio y aprovecho para meter mi lengua.

Hace lo mismo y nuestras lenguas juegan entre sí.

Bajo mis manos al borde de su camisa, adentro mis manos y siento como se estremece ante mi tacto.

Lo encaminó a mi cama.

Cierro mi puerta y le pongo seguro.

Me acerco y esta vez es él el que toma la iniciativa de iniciar el beso.

Los dos estamos muy excitados.

Lo puedo sentir.

Froto nuestras erecciones.

Gime.

Llevo mis manos al límite de su camisa para quitársela.

Rápidamente comienzo a quitarle las demás prendas.

Llevo esperando esto por mucho, desde que lo vi la primera vez con su falda y su top.

Siento como su mano comienza a recorrer mi abdomen.

-Ponte en cuatro-mi voz sale ronca por la excitación que estoy sintiendo en este momento.

Rápidamente se pone en cuatro.

Enpino mi rostro en su trasero pasando la punta de mi lengua sobre sus paredes internas.

—¡Oh D-Dios Joel! —empuja su trasero en busca de más.

Sonrió al verlo tan sumiso bajo mi dominio.

Pongo mis dedos frente su rostro para que los chupe.

Una vez bien lubricados, meto un dedo en su interior sin tener cuidado.

Gime.

Comienzo a mover mi dedo tratando de lubricar su entrada.

Cuando siento que esta suficientemente dilatado meto un segundo dedo, esta vez los muevo en forma de tijeras.

Saco mis dedos de su interior y me acomodó en medio de sus piernas.

Me introduzco poco a poco.

Me detengo cuando estoy completamente adentro para que se acostumbre.

Pasan los pocos minutos cuando siento que empieza a mover sus caderas.

Tomo sus caderas con ambas manos y comienzo a moverme, es un vaivén lento.

Siento como su paredes se abren con cada embestida que doy.

Se arquea cuando llego a su próstata.

—M-más rápido —dice entre gemido y hago caso a su petición.

Acelero mis embestidas, veo como se masturba pero rápidamente quitó su mano remplazando la mía.

Lo embistió cada vez más fuerte y se que le gusta.

Nunca fui de la persona que les importara si la otra persona lo disfrutaba, pero con él es diferente, quiero que lo disfrute como yo.

—J-joey, voy a llegar —arquea la espalda y acelero mis movimiento.

Lo masturbo más rápido y en poco tiempo expulsa toda su esencia en mi mano.

Sus paredes se contraen.

Con una mano tomo su mejilla para que me mire, lo beso metiendo mi lengua.

—Voy a llegar —tres embestidas más y expulsó toda mi esencia adentro de él.

Trato || JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora