2 | Cacao Vibes

3.2K 354 206
                                    

Mientras doy clases de literatura luego de haber llegado tarde debido a la horrible mañana que he vivido en la editorial cuyo encuentro con Jennie resultó desastroso, me ha llegado un mensaje de Ellie donde me pide que no llegue tarde y que ha preparado una linda sorpresa. ¿Linda? No sé si me encuentre de humor para eso. Dios, no reconozco mi humor pesado, hoy no ha sido un día excelente, tengo jaqueca y la irritación está en su máximo punto de quiebre.

Lisa: No prometo nada;) igual estaré ahí. Xoxox

Ha sido difícil hablar de gramática española mientras una fuerte punzada en mi cabeza me mata con cada segundo que pasa. Se me han olvidado las tildes, los infinitos sinónimos y cada inicio de pregunta y oración exclamativa. No tengo cerebro para pensar en otra cosa sino en el bochorno que he vivido hace horas y en retractarme no volver a pensar en Jennie. ¿Cómo he llegado aquí? Estoy casada; hago lo que amo, no necesito nada más.

¿Su perdón?

Maldición ya son cuatro años desde aquel entonces, no se necesita perdón para situaciones de olvido. ¿Tengo razón? Es obvio que no cuando le hice daño pero, ¿por qué no hice esto antes sabiendo que la culpa me comía siempre por dentro? Exploté. Cada carga era como una gota en un vaso de agua. No puedo ser tan débil y creer que hago todo mal. Aunque lo hice, y ya es tarde para retractarme. Muy tarde. Demasiado. Ya no hay caso.

Agradezco que la campana haya sonado justo en el momento más oportuno del mundo. Me he sentado para acariciar mi sien. Estoy tan frustrada que puedo reventar de furia. Pensé que todo sería distinto. Una Jennie igual a la de USA dejándome notas de amor y duraznos dulces. Una charla sobre querido John; libre de tantos dramas y problemas. Cada vez que la veía sentada me daban ganas de correr y abrazarla, sé que vivía envuelta en conflictos que la afectaban tan a fondo que cambiada su tono de hablar según su estado de ánimo. ¿Por qué han llegado tantas ganas de recuperarla ahora? Justo ahora.

Dejo de pensar, deseando que fuese el último día en que lo haga, evitando cada recuerdo al máximo y pensando en lo que puede hacerme sentir confiada en el presente nuevamente. Salgo al parking para encontrarme con mi coche y releer el mensaje de Ellie:

Ellie: Lisaaaaa, no llegues tarde he preparado algo especial
Ellie: Una sorpresa
Ellie: Bueno, no tan sorpresa
Ellie: Por favor no tardees
Ellie: Xoxoxoxo

Resoplo al releerlos.

Ellie es tan buena persona que me siento tan culpable de haber ido en busca de Jennie nuevamente sabiendo que puedo abrir un baúl que hace cuatro años se cerró. Siempre hago lo mismo y debo de responsabilizarme. Soy tan tóxica que juro odiarme por completo.

Debo irme a casa.

Abro la puerta del coche, pero una voz perfectamente reconocible me detiene:

-Quien diría que serías igual que Alexander.

Volteo, y veo a Kim a pocos centímetros de distancia aún con la ropa que cargaba en la editorial.

Por favor ahora no. Es lo que menos necesito. Quiero que se vaya ahora mismo y me deje olvidar todo lo que hoy ha sucedido. Quiero alejarla de mí porque no puedo caer en lo mismo, no puedo. Otra vez no.

Ellie.

Nuevamente vuelve el dolor en mi cabeza. Maldita jaqueca no se detiene.

Trato de abrir mis ojos lo más que puedo para asegurarme que el dolor en mi cráneo no me ha hecho una mala jugada. Pero ciertamente Jennie Kim está parada en frente de mí con su uniforme empresarial que la hace ver mayor esperando a que dé una respuesta ante el momento. Me he quedado muda y mis dedos no se detienen, golpean una y otra vez el muslo de mi pierna.

Dear Lover 2: El Reencuentro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora