Esclava Sexual

Parte V: Descubriendo tu ternura

Los tenues rayos de un sol rojo se filtraban por entre los altos ventanales.

La princesa albina se encontró desnuda bajo una capa de las más finas telas que actuaban como sábanas.

Procedió a vestirse y encontró una nota de su amado en la mesita de noche:

Mi amada Eli;

Salí en una misión de reconocimiento, volveré antes del medio día. Si necesitas algo no dudes en pedirlo. Recuerda siempre que te amo.

~Meliodas

La chica llevó la nota hacia su pecho y suspiró mientras la abrazaba y un leve sonrojo se dejaba ver entre sus pálidas mejillas.

Se disponía a desayunar cuando un agudo dolor en el vientre la paralizó. Cayó de rodillas pero alcanzó a afianzarse de la orilla de la cama. Llamó a una trabajadora de la servidumbre y decidió tomar el desayuno en cama.

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El reino de Liones se había recuperado por completo de la intervención del Comerciante mas no del rapto de la tercera princesa de Liones.

El rey Baltra estaba determinado a recuperarla y contaba con el apoyo de su pueblo, aun que eso significara tener de enemigos al poderoso reino demoníaco. Varios caballeros sacros se ofrecieron como voluntarios de avanzada para el rescate de la princesa, entre ellos Gilthunder, Howser y Griamore.

- No se preocupe su majestad, traeremos sana y salva a la princesa - comentó el pelirosa mientras observaba el rostro de su amada princesa Margareth sumido en una profunda desesperación.

-Cuento con ustedes - asintió el rey.

- Partiremos al alba- comentó de nuevo el chico. Se despidió con una reverencia del rey y las princesas y fue a alistarse con el resto del escuadrón a los cuarteles.

Al día siguiente partieron hacia una entrada fuertemente custodiada hacia el inframundo que se había descubierto hace poco, fue la misma entrada que usó el comerciante para accesar al mundo humano.

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El príncipe demonio divisó a la distancia un campamento humano, éste se encontraba muy cerca de la grieta que daba paso del mundo humano al mundo de los demonios. Cerró sus ojos. Entró en modo asalto. Tal como lo pensaba, incluso los tres caballeros juntos no presentarían dificultad alguna para él.

Se acercó un poco más, volando a una distancia cautelosa y determinado a que no lo descubrieran.

Observó el emblema de los caballeros.

Liones.

Zeldris y los demás estaban dispuestos a atacar.

- Hermano, danos la señal y masacraremos a esos humanos - dijo Zeldris.
- Son del reino de Liones - contestó el rubio - por respeto a Eli no atacaremos. Muy probablemente vengan a rescatarla ya que piensan que estamos torturándola y en muy malas condiciones.
- Tranquilo capi, yo me encargo - dijo un hombre peliplata con ojos color rubí.
- No hay necesidad Ban. Avisa a los demás que se queden en sus posiciones, estos caballeros simplemente son de avanzada. Además- dijo esto mientras desactivaba su marca demoníaca y ponía amos brazos detrás de su cabeza - apuesto a que Elaine te extraña, te aconsejo que vayas al bosque de las hadas con ella con Diana y con King - el rubio soltó una risita.

El astuto demonio había creado una alianza muy peculiar que involucraba a la mayoría de los clanes -exceptuando al de las Diosas- por amigos que había hecho en el camino en su búsqueda de Elizabeth.