«TwitahLove» [NamKook]

🐰

Había muchas cosas que le causaban miedo y pánico a JungKook, las veces en que se iba la luz en su casa mientras afuera llovía como si se fuese a acabar el mundo, o aquellas veces en las que se quedaba solo y de repente escuchaba ruidos extraños. Jamás creyó que una invitación por parte de NamJoon le causaría querer vomitar y dejar de existir. 

No lo malinterpreten, él realmente estaba emocionado. Es solo que esa emoción lo hacía sentirse enfermo y con muchas ganas de vomitar su desayuno. ¿Y si algo salía mal? ¿Y si Nam se daba cuenta que en realidad no sentía nada? ¿Y si todo era una especie de sueño? ¿Cómo sobreviviría a eso? 

JiMin tuvo que llegar a su casa, sacarlo de su cama, y mandarlo a bañarse.

—Está bien que te gusten los videojuegos, pero un baño de vez en cuando te haría bien —susurró JiMin tomando a su amigo a por los hombros empujándolo directo al baño.

JungKook solo tosió un poco, pero se dejó hacer. JiMin siempre estaba ahí cuando él más lo necesitaba incluso sin que él mencionase alguna palabra. JiMin parecía conocerlo demasiado bien.

Cuando la hora de la cita llegó, el timbre resonó puntualmente por toda la casa de JungKook. JiMin estaba sonriendo, y fue directo a esconderse. 

—Yo no estuve aquí, ¿de acuerdo? —murmuró JiMin antes de quedarse en la sala en sumo silencio. 

Claro que no se quedaría en la habitación donde no escucharía nada.

—Hola —saludó JungKook tímidamente.

—Hey —respondió NamJoon viéndose relajado con el gran ramo redondo en sus manos—. Esto… esto es para ti.

JungKook sonrió mientras el lindo sonrojo se extendía por toda su cara.

—Gracias —musitó.

JungKook tomó el ramo e hizo pasar a NamJoon hasta la sala, pues quería dejarlas en un florero antes de irse.

—Enseguida vuelvo —se disculpó.

Los nervios de NamJoon no se hicieron esperar, así que mientras esperaba trataba de enseñar lo que estaba por decir. 

—Escucha, JungKook, sé que quizás ya lo sepas, pero quería decírtelo de todas formas. JungKook, yo te… —se detuvo un segundo para tomar aliento—. Tú me gu...

Un estornudo lo interrumpió, casi entra en pánico al pensar que era JungKook quien lo había escuchado, pero no había nadie en la sala. Un segundo estornudo se escuchó, y casi automáticamente dijo «salud».

—Gracias.

NamJoon reviró sus ojos.

—¡JiMin! —chistó—. ¿Qué estás haciendo?

El susodicho salió de su escondite con cara avergonzada.

—No escuché nada —dijo al momento de chocar miradas con NamJoon—. En serio.

Nam levantó una de sus cejas.

—Pero si se me permite decir algo —hizo una pausa—, yo lo llevaría a su cafetería favorita y después a caminar al parque, entonces en un momento adecuado lo miraría a los ojos y le diría que me gusta. Quizás él lo sepa por intuición, pero se me hace lindo que quieras aclararlo.

—¿Gracias? —dijo Nam confundido.

—De nada. —Le guiñó un ojo—. Por cierto, nada de alcohol —advirtió antes de volver a su escondite. NamJoon estaba por decir algo más, pero JungKook hizo acto de presencia.

—¿Nos vamos?

NamJoon le sonrió después de mirarlo unos segundos, se encontraba tan lindo. Un ser precioso. Su sonrisa no pudo más que agrandarse hasta que sus hoyuelos se notaron con demasiada fuerza.

—Nos vamos —dijo y le extendió su mano para sujetar la suya.

Sí, él podría hacerlo.

«JungKook, me gustas. JungKook, te quiero», repetía en su cabeza.

━━━━━━ • ✿ • ━━━━━━