Me observo en el espejo consiente
de ser mujer y lo que implica serlo, mis ojos observan mi rostro que para mí
concepción es muy hermoso; mis pensamientos se incorporan buscando conservar
una imagen mental de mi juventud y exigiéndole a mis memorias no permitir que
esa imagen desvanezca en mi vejez. cuando mi piel pierda esa luminosidad, ya no
tenga ese aire de juventud, mis arrugas reflejen mis experiencias en este plano
físico y la vida junto con los años arrebaten
mi belleza y su antiguo esplendor , espero que mi memoria no me falle y reviva esa
imagen de mi rostro perfectamente joven y bello, pero aclaro ese recuerdo no
debe ser amargo sino con una aire de madurez, aceptación y agradecimiento a la
vida por haberme permitido experimentar y sentir que es ser joven dentro de un
tiempo determinado.
Firma: Nanda
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Meditaciones
CasualeReflexiones, vivencias y pensamientos se entremezclan en este ejercicio de liberación personal de dos personas que pretenden despojarse de sus juicios patriarcales. Todos los escritos que se encuentran aquí están publicados también en la cuenta de i...
