El reencuentro :3

1.9K 128 55
                                    

La oscuridad reclamaba en su totalidad un pequeño complejo industrial abandonado, aun con aquel manto de oscuridad había una figura parada observando el único punto iluminado del lugar.

La figura dejaría de mirar aquel lugar metiendo su mano en el interior de la chaqueta que tenía sacando un pequeño collar que antaño había pertenecido a su primera amiga y el motivo de que este aun este vivo.

- ¿estás segura que es aquí? -Pregunto al aire mientras la leve luz de la luna lo iluminaba dejando ver como una capucha cubría su cabeza-

Hubo un breve silencio mientras un leve viento aparecía.

-la verdadera pregunta es si tú estás listo -le respondió una voz femenina-

El encapuchado se quedaría en silencio mirando hacia la luz mientras guardaba el pequeño collar.

-Tomare eso como un si -continuo la voz- en ese caso suerte.

Luego de eso la voz callaría dejando en su lugar el silencio de la noche.

-Eh estado listo por 10 años -dijo el encapuchado retirándose lo antes mencionado dejando que su pelo blanco se moviera junto al viento-

este daría una leve sonrisa mientras se colocaba una máscara algo extraña y se dirigía a la fuente de la luz, cuanto más este se acercaba a aquel edificio (la fuente de la luz) más siluetas podía distinguir, la mayoría estaría moviendo lo que parecían ser cajas mientras otros parecieran ser los guardias del lugar.

Al estar a unos 30 metros este metería las manos en sus bolsillos sacando 2 extrañas esferas plateadas, al casi estar a unos 3 metros de la entrada nuestro peliblanco se detendría al escuchar como uno de los guardias del lugar le había gritado y apuntado con su m416, al mirarlo este notaria como un doomhound se pondría a su lado comenzando a gruñirle a este, segundos después otros "matones" aparecerían rodeando a nuestro peliblanco.

Matías daría una pequeña sonrisa tras su máscara mientras levantaba las manos con una esfera plateada en ambas.

-¡¿Quién diablos eres y que haces aquí!? –Interrogaría uno de los matones-

El peliblanco se quedaría callado mirando el suelo, el matón volvería a preguntar, pero nuestro peliblanco dejaría caer aquellas esferas, rodando estas a los pies de aquel matón que había estado hablando, para posteriormente comenzar a emanar un gas de color negro que se esparcía rápidamente por el complejo, los matones y todas las personas y/o pokemones presentes comenzaron a ir cayendo inconscientes uno tras otro.

-Entre esto y el canto de un gigelipoff no sé qué es más efectivo -pensó el peliblanco adentrándose en el edificio-

Viendo como de algunas cajas estaban al tope de pokebolas dando un pequeño suspiro mientras se seguía adentrando en el edificio.

- ¿Que acaso el tráfico se puse de moda? –pensó mientras llegaba al frente de una puerta desde que desde atrás de esta se escuchaba lo que parecía ser una persona hablando una sonrisa maliciosa se manifestó en el rostro del peliblanco mientras abría la puerta-

30 minuto después (en el mismo lugar de antes)

Un pelinegro de alrededor de 34 años comenzaba a despertar, dándose cuenta que estaba amarrado a una silla mientras un enmascarado lo miraba fijamente, este trataría de zafarse haciendo fuerza, pero las cuerdas se lo impedirían.

El enmascarado sonreiría debajo de la máscara mientras comenzaba a acercarse al pelinegro.

-Tal vez tu no sepas quien soy -hace una pausa mientras se detenía y mira fijamente a los ojos al pelinegro- pero yo si se quién eres Matt y hay algo que quiero que me digas.

La lycanroc de la que me enamoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora