La lycanroc de la que me enamore

Un fantasma del pasado

Era temprano en la mañana, nuestro peliblanco se encontraba en la cocina haciendo el desayuno para su ahora novia.

Aquella que se encontraba durmiendo plácidamente en el cuarto que ahora había comenzado a compartir con nuestro protagonista desde hacía una semana, los rayos del sol comenzaban a ingresar a la habitación incomodando a la lycan y haciendo que se despertara.

Esta se estiraría mientras bostezada tratando de ahuyentar el sueño que aun sentía, luego de esto esta notaria que el peliblanco no se encontraba a su lado.

Cuando esta se disponía a levantarse de la cama el sonido de la puerta mientras se habría atrajo su atención, al voltear a ver quién era una pequeña sonrisa se le formo en el rostro.

- ¿qué tal amaneciste Yuli? -Preguntaría el peliblanco algo sonrojado mientras que sostenía una bandeja con el desayuno que había preparado para su amada-

Unos minutos después.

-Gracias cariño <3... estuvo delicioso -diría la lycan mientras le daba un pequeño beso a nuestro protagonista-

-Me alegra que te haya gustado - respondería nuestro protagonista sonrojado mientras juntaba las sobras y se disponía a salir del cuarto-

Aunque hubiera pasado ya una semana desde el inicio de su relación con Yuli este aún no se acostumbraba y por ende generalmente andaba rojo de un lado al otro, cosa que le hacía gracia a su amada.

-Oye cariño -volvería a decir la lycan causando que el peliblanco se diera la vuelta para verla-

Grave error.

-Hazme tuya -continuaría la lycan mientras jugaba con sus pechos-

El peliblanco por su parte estaba completamente rojo mientras le comenzaba a sangrar la nariz.

- ¿¡QUE?! -Exclamaría este mientras se cubría su hemorragia nasal-

Por su parte la lycan estaría riéndose de la reacción de su amado, aún para haber sido capaz de matar a alguien a sangre fría... se sonrojaba y sobre saltaba demasiado fácil.

-Solo bromeo -volvería a decir Yuli mientras se paraba y le daba un beso a nuestro protagonista-

Este último correspondería el beso que su amada le había dado, permanecieron asi durante un rato hasta que finalmente se separaron, esta vez el rubor lo tenían ambos.

-aún es muy pronto para hacer eso cariño -diría la lycanroc mientras se separaba y comenzaba a caminar en dirección al baño-

El peliblanco no diría nada simplemente soltaría un suspiro mientras se encaminaba a de vuelta a la cocina.

Un día de estos moriré de una hemorragia pensaría el peliblanco mientras bajaba las escaleras, unos segundos después de haber bajado el último escalón el celular del peliblanco recibiría una llamada de su hermano.

- ¿Qué pasa Alan? -Preguntaría el peliblanco mientras contestaba la llamada-

-Vaya forma de contestar a tu hermano mayor -se escucharía decir al antes mencionado-

-Sí, si lo que digas... ¿qué es lo que quieres? - Volvería a decir el peliblanco ahora un poco fastidiado-

Se escucharía un suspiro proveniente del otro lado de la llamada.

-solo llamaba para saber que tal están por allá -le respondería Alan resignado-

-Y estamos bien, Yuli es más hermosa cada día -hablaría el peliblanco con una sonrisa-

-El amor joven -comentaría el hermano de nuestro protagonista mientras se reía-

-Oye y... ¿ya lo hicieron? -Volvería a preguntar este con un tono pícaro-